El Imperio ruso invade Ucrania

Vía costarricense

Johnny Soto Zúñiga

Johnny Soto

El movimiento de las tropas de combate rusas durante varios meses cerca de las fronteras de Ucrania antiguo integrante de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) con el fin de derrocar al gobierno democráticamente elegido, era un decisión esperada y fue el jueves 24 de febrero de 2022 donde inicio la invasión por aire, mar y tierra. Lo que era una información constante en los medios de comunicación a nivel mundial, que nos tuvo en vilo en los últimos meses; y con comunicados del Presidente de Rusia Vladimir Putin, y que desde el año 2000 tenía claro su posición de volver a que Rusia se consolidara como el Imperio que ha sido en varios siglos, es un recuerdo de la Rusia de los Zares, de la URSS de Lenin y Stalin. La caída en 1991 de la URSS, donde se dio una desintegración territorial, y varios Estados se declararon independientes, y disminuyó el territorio de Rusia; y que aún así sigue siendo el país más grande del mundo.

El gobernante ruso; siempre ha manifestado que es necesario volver a reunificar a toda la gran Rusia, similar a todos los territorios que constituían la URSS; y si los países independientes vecinos de Rusia, se unían a la Europa occidental o del oeste y pasan a ser parte de la OTAN o NATO, que es el Tratado del Atlántico Norte integrado por Europa oeste y EE.UU.; lo considera un “peligro inminente” para la seguridad territorial y militar de Rusia; máxime que Ucrania ha sido durante siglos parte de Rusia, son hermanos, hablan ruso como principal lengua materna, existen familiares en ambos territorios, una cultura similar, una religión común en muchos lugares; la idiosincrasia no es muy diferente; con una historia tradicional en común. En realidad, son muy pocos los años, más de dos décadas que Ucrania es independiente; siempre ha dependido de Rusia.

Putin es un gran estratega militar, y venía planeando esa invasión dentro de Ucrania; ha exigido la rendición incondicional del gobierno ucraniano y que los militares entreguen sus armas; la superioridad numérica y militar de Rusia en comparación con el país invadido es 10 veces mayor; y a hoy no sabemos cuánto durará el “derrocamiento” del gobierno de Volodímir Zelenski, quien ha llamado a la resistencia, impuso la ley marcial, y ha convocado a todos los ciudadanos que estén en condiciones de combatir; se les entregaran armas, e ir a la guerra en todos los campos contra el ejército ruso; que bombardean las ciudades y los bunkers militares, aeropuertos etc. Es tenebroso cuando se escuchan en las ciudades de Ucrania “el sonido de las sirenas”; alertando a las personas que caerán bombas enviados por los misiles desde tierra y mar; y hemos vistos que muchos misiles caen sobre edificios, urbanizaciones de las distintas ciudades atacadas; las personas se esconder en los “refugios anti-bombas”

Muchos ciudadanos están huyendo de las ciudades de Ucrania, su capital Kiev se ve desolada, El ejército penetró por tierra utilizando Crimea anexada en 2014, luego invade las ciudades cercanas de Donetsk y Lugansk, ciudades donde ha existido una rebelión contra el gobierno de Ucrania; y sus fuerzas militares son pro-rusas; y consideran que deben anexarse con la gran Rusia; recibiendo armamento militar y apoyo del gobierno de Putin. El presidente Zelenski expresó que lo dejaron solo; y que está dispuesto a resistir militarmente a Ucrania; sin embargo, se dice que desde la invasión del 24 de febrero de 2022; a hoy existen más de 350 muertos y miles de heridos; sin embargo en la realidad esos números pueden subir; y los combates se tornan en sangrientos y en una guerra de guerrillas. Rusia ha venido “cercando” por todas las fronteras de Ucrania; en el Mar negro, Járkov, Odessa el principal puerto cerca de la frontera de la Europa occidental, por Georgia, Crimea y otras ciudades, rodeando totalmente a Ucrania.

Este conflicto entre Rusia y Ucrania, tiene repercusiones mundiales, se dice nunca vistas desde la Segunda Guerra Mundial, con agresiones militares desde 1945; en esta ocasión es una invasión a gran escala; que no sabemos cómo va a terminar; solamente esperemos que el conflicto geopolítico regional, no crezca y entre en conflicto con otras regiones de la Europa occidental amparada a la OTAN que lidera los EE.UU. Las sanciones de todo tipo lanzadas por el Presidente Joe Biden, van en el sentido de “golpear” la economía de Rusia etc.; busca presionar a Putin; y las consecuencias serán la variación del orden internacional vigente; incluso diferentes líderes políticos han venido proclamando que deben cambiar y modificarse “las reglas internacionales” actuales, entre ellos el ex presidente Trump, Orban, Salvini.

Rusia actualmente le suministra entre el 35% a 40% de gas natural a Europa, es un gran proveedor con una enorme red de gasoductos conectados con el resto de Europa; y la mayor parte transitan “por el corredor ucraniano”, y los precios se han disparado hasta el 60% según el referente regional en el mercado neerlandés; existe el miedo de que Rusia “corte el suministro”; sin embargo el Kremlin señaló que los flujos de suministro seguirían otorgándose con normalidad, pero condiciona que si Occidente saca a Rusia del sistema Swift, que es por donde se realizan las transacciones monetarias y bancarias internacionales, dejando a las empresas rusas sin poder recibir los pagos de los compradores de gas y otros suministros; Rusia en represalia podría variar su decisión, y esto haría que los precios subieran en la electricidad, la calefacción y de productos de industrias dependientes del gas natural.

Sobre el impacto en nuestra región latinoamericana y todo el continente, se afirma que la falta de petróleo y las sanciones impuestas, tendrán sus consecuencias en las economías; ya que Rusia es el segundo país mayor exportador de petróleo después de Arabia Saudita y es el tercer productor de crudo en todo el mundo. Sin duda se dispararían los precios del petróleo; y Brasil y México podrían exportar más; sin embargo siempre los precios subirían. Por otra parte, recordemos que Rusia suministra armas a Cuba, Nicaragua y Venezuela, y podría tener una mayor escalada de inversiones en América Latina, no obstante la distancia con Rusia es bastante; y solo podría afectarse más directamente estos 3 países latinoamericanos; pero sin duda las repercusiones afectan a nuestro continente y a todo el mundo.

Finalmente, siempre que se dan estas guerras regionales; y en este caso al estar involucrado el Imperio Ruso y siendo un país con un asiento permanente en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, y por su magnitud el mundo sufre y está atento a sus consecuencias económicas, sociales y por supuesto militares. La mayoría de los países latinoamericanos han rechazado la invasión de Rusia en Ucrania; han denunciado la violación del derecho internacional, a la convivencia pacífica entre naciones y muchos están apoyando las sanciones impuestas por EE.UU. Los creyentes debemos orar para que este conflicto cauce la menor cantidad de vidas humanas y que se permita una salida pacífica; para evitar un peor derramamiento de sangre en muerte de vidas, miles de heridos y destrucción de obras e infraestructura en Ucrania, y miles de desplazados que buscan refugio en otras zonas de Ucrania y en otros países vecinos.

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