La Segunda Guerra Mundial y su incidencia en Costa Rica

Vía costarricense

Johnny Soto Zúñiga

Hace 70 años finalizó la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), dejando la muerte de más de 50 millones de personas, la destrucción de infraestructura en muchas ciudades de Europa, Asia y África, y el estallido por primera vez de dos bombas atómicas lanzadas por EE.UU. sobre dos ciudades de Japón: Hiroshima y Nagasaki, para evitar mayor derramamiento de sangre y eventualmente se calculan morirían más de un millón de personas para rendir a Japón; entonces la solución menor fue lanzar las bombas, para que el país del Imperio del Sol se rindiera de inmediato, como en realidad sucedió. El Fascismo y el Nazismo habían surgido en la primera mitad del siglo XX, precisamente entre las dos grandes guerras mundiales (la primera y segunda básicamente en Europa). Estas ideologías tienen su base en la exaltación de los sentimientos nacionalistas de los pueblos y la existencia de razas superiores; como por ejemplo propugnaba la Alemania Nazi, de una raza “aria” superior a todas las razas, el expansionismo e invasión a otros países, etc.

La xenofobia (del griego xenos: extranjero y phobos: odio, miedo) y explotación del “nacionalismo” fue base fundamental para la llegada al poder de las ideas del Fascismo en la década de 1930 en Alemania y en Italia. Existían muchos problemas económicos, una dura crisis económica internacional, la miseria de los movimientos obreros, un gran descontento popular, que aprovecharon los grupos políticos fascistas para liderar esa reacción política con el “estado de cosas”. En Italia su líder principal fue Benito Mussolini (1883-1945), que culpaba al sistema de “democracia” como la causa de los males de Italia; impulsaba la disciplina, utilizaba un lenguaje duro y populista, estableció una organización “semi-militar” en sus estructuras políticas; buscan establecer sistemas políticos totalitarios. En Alemania, surge el nazismo liderado por Adolf Hitler (1889-1945), se basa en una ideología ultranacionalista, explotación del sentimiento antisemita (contra los judíos).

En 1933 llega al poder por la vía de los votos el Partido Nacional Socialista Alemán e instaura un sistema totalitario. El totalitarismo es la expresión máxima de la dictadura como sistema, concentra el poder casi siempre en un solo líder, se da un culto a la personalidad sin límites (saludos, estatuas, servilismo, no se admite la crítica, etc.) Se da una represión y violación de los derechos humanos fundamentales de los ciudadanos, una política de terror policial y militar; todo con el fin de controlar, neutralizar cualquier disidencia, la censura y control sobre los medios de comunicación. Alemania, Italia y Japón constituyeron el denominado “Eje”, que tuvieron el peso de la Segunda Guerra Mundial contra los aliados (Gran Bretaña, Francia, EE.UU., la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), ahora Rusia; y demás países que se unieron a la causa por liberar a Europa del yugo expansionista de los fascistas y nazis)

En Costa Rica, la Segunda Guerra Mundial aconteció durante tres distintas administraciones: finales del Gobierno de León Cortés, dura todo el período del Dr. Rafael Ángel Calderón Guardia (1940-1945) y los albores de la Administración de Teodoro Picado. Es una realidad que el conflicto mundial tendría sus consecuencias inmediatas en nuestro país; se da una crisis económica importante, con la importación y exportación de productos; siendo el más afectado la mayoría del pueblo consumidor. Los estudios realizados concluyen que nuestros gobiernos no tuvieron la capacidad para hacer frente con un plan eficaz a la “previsión de la guerra”, ni para cuando se dieran los tiempos de la “post-guerra”, y todas sus consecuencias y efectos en nuestro país. Se dice que en Costa Rica, los ciudadanos y el gobierno veían el conflicto como muy lejos; en muchos casos sin tomarle importancia (no como ahora que mediante las redes sociales nos damos cuenta de inmediato de los sucesos de cualquier parte del mundo; y la globalización e intercambio comercial golpearía de inmediato si se da cualquier conflicto mundial o regional de esta naturaleza)

Sin embargo, en agosto de 1939 el gobierno de Cortés aplica las primeras medidas previsorias: suspende las licitaciones públicas y demás gastos que impliquen salida de divisas, elimina nuevas plazas y becas; queda sin efecto el recargo del 100% al impuesto de aduanas a las mercancías procedentes de países con los que se tenga un alto déficit comercial. La Junta de Control de Exportación de Productos no autorizará divisas para el pago de importaciones de artículos de lujo y se establecen multas a los especuladores, ordenándose incluso la cárcel para los culpables. Se decide intensificar la productividad agrícola e industrial con el aumento crediticio a cargo del Banco Nacional y los bancos privados; fortalecer el Fondo de Regulación de Cambios, en especial con el crédito de $ 1 millón de dólares proveniente de la Compañía Bananera y, reglamentar las facultades de la Junta de Control de Exportación de Productos, para un uso más racional de las divisas extranjeras. (Costa Rica en la Segunda Guerra Mundial 1939-1945-.Carlos Calvo Gamboa. Págs. 23 y 24)

Una de las crisis económicas que afectan a lo interno del país, es la especulación con los precios de las mercancías, crisis de abastecimiento; en agosto de 1939 se aprueba la “Ley de Subsistencias” que determina los casos para la importación de granos ante el aumento de los precios. Existe mucha gente aprovechada e inescrupulosa; se crean las “comisiones de abastos” por cantón para evitar y controlar los precios de los productos al consumidor. En 1940 el presidente Dr. Rafael Ángel Calderón Guardia, en su discurso inicial del 8 de mayo se refiere a la dura prueba que atraviesa el viejo continente europeo y el llamado a la armonía internacional, delinea su política exterior y el compromiso con la naciones americanas. Con el ataque de Japón a la base marina de EE.UU. “Pearl Harbour” el 7 de diciembre de 1941, de inmediato entra EE.UU. en la Segunda Guerra Mundial.

Costa Rica actúa de inmediato con fundamento en los acuerdos de las convenciones y declaraciones americanas, y el Presidente Calderón y su Secretario de Relaciones Exteriores Lic. Alberto Echandi Montero envían al Congreso la solicitud de acuerdo para: “autorizar al poder ejecutivo para que declare la guerra al Japón y a cualquier otra potencia no americana que cometa actos de agresión o declare la guerra a una de las repúblicas americanas…”, es aprobada el 8 de diciembre de 1941. El 11 de diciembre de 1941 con base en el anterior acuerdo del Congreso Nacional, el Consejo de Gobierno N°4 decreta: “A partir de esta fecha existe estado de guerra entre Costa Rica y Alemania e Italia.” Esto con fundamento en que EE.UU. como nación americana entró en guerra con los países que conforman el “Eje”.

Una de las consecuencias más dura en nuestro país, es la persecución en contra de los extranjeros o ciudadanos de origen europeo miembros de las colonias: alemana, italiana y española, que en su mayoría eran empresarios exitosos y que tenían muchos comercios en su mayoría en San José. Ya que se habían dictado leyes de bloqueo económico a los ciudadanos del Eje en América, que impedía el traslado de propiedades, fondos y valores pertenecientes o controlados por intereses enemigos o simpatizantes suyos; congelamiento de los valores importados a América procedentes de los países del Eje; control financiero y económico de todas las personas sospechosas de tener vínculos con actividades contrarias a la seguridad americana y, control de las empresas comerciales e industriales pertenecientes a los súbditos del Eje. Se recomienda primero su traspaso forzoso o liquidación y si las circunstancias lo ameritan, se solicita su “bloqueo, ocupación intervención.” (Op.cit. Pág. 59)

Finalmente, esperemos que en el mundo reine la paz internacional; porque la humanidad no resistiría una tercera guerra mundial, basada seguramente en armas nucleares. Que la Organización de las Naciones Unidas y demás organismos que surgieron luego de la finalización de la Segunda Guerra Mundial, hace 70 años, puedan seguir consolidando políticas públicas mundiales para beneficio de todos los países integrantes de los diversos continentes. Que se reduzca el gasto en armamento militar y más bien se invierta en obras sociales y en las personas más vulnerables de los países (falta de empleo, agua y alimentación, armonía con la naturaleza y respeto a los Derechos Humanos fundamentales, etc.)