Cambio Político Opinión, análisis y noticias
Febrero 29, 2024
Redacción
La ONU considera que la situación en Gaza, sin ley ni orden, dificulta en extremo las misiones del organismo y pone en alto riesgo al personal que lleva la ayuda humanitaria, así como a los necesitados que se agolpan para recibirla. La falta de coordinación para la seguridad es grave.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) dijo que quienes intentan distribuir o recibir ayuda humanitaria en la Franja de Gaza enfrentan desafíos que ponen en peligro sus vidas.
En declaraciones a periodistas en Nueva York, el portavoz de la ONU, Stephane Dujarric, dijo el miércoles que los peligros que presenta el conflicto han provocado los repetidos llamados del organismo por un alto al fuego humanitario.
«Sí, hay camiones que han cruzado de Israel a Gaza. La situación en Gaza es, como la hemos descrito en numerosas ocasiones, casi imposible para nosotros hacer trabajo humanitario», dijo Dujarric. «Hay un conflicto activo. Hay una ruptura de la ley y el orden. No hay suficiente coordinación en el aspecto de la seguridad, hemos planteado todos los desafíos. Eso no nos impide trabajar», dijo Dujarric.
Israel comentó el miércoles que había llevado a cabo ataques aéreos contra sitios de armas de Hizbulá en el sur de Líbano, y que había interceptado varios cohetes disparados desde el Líbano hacia Israel.
El ejército israelí también informó de nuevos ataques aéreos en la zona de Khan Younis, en el sur de Gaza, así como de operaciones terrestres en esa zona y en el norte de Gaza.
El Ministerio de Salud de Gaza, dirigido por Hamás, informó el miércoles que al menos 76 personas más murieron en la campaña de Israel. Al menos 29.954 personas han muerto desde que comenzó la guerra en octubre, y otras 70.325 han resultado heridas.
Israel, Hamás y mediadores qataríes restaron importancia el martes a una sugerencia del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de que pronto podría alcanzarse un nuevo acuerdo para un alto al fuego y la liberación de rehenes en la guerra de cinco meses entre Israel y los militantes de Hamas.
Hamás está considerando una propuesta, aceptada por Israel en conversaciones con mediadores en París la semana pasada, para un alto el fuego que suspendería los combates durante 40 días durante el Ramadán, el mes de ayuno musulmán, que sería la primera tregua extendida en la guerra.
Ambas partes tienen delegaciones en Qatar esta semana tratando de resolver los detalles. Pero el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Qatar, Majed al-Ansari, dijo: «No tenemos un acuerdo final sobre ninguno de los temas que están obstaculizando el logro de un acuerdo. Mantenemos la esperanza de que podamos llegar a algún tipo de acuerdo».
Un funcionario de Hamás dijo a Reuters que «todavía hay grandes brechas que cerrar. Las cuestiones principales y primarias del alto el fuego y la retirada de las fuerzas israelíes no están claramente establecidas, lo que retrasa la consecución de un acuerdo».
Israel no comentó directamente sobre el optimismo de Biden sobre un alto al fuego, pero la portavoz del gobierno, Tal Heinrich, dijo que cualquier acuerdo aún requeriría que Hamás abandone «demandas extravagantes, de otra órbita, otro planeta».
«Estamos dispuestos. Pero la pregunta sigue siendo si Hamás está dispuesto», dijo.
Biden dijo a los periodistas el lunes que esperaba que hubiera un alto el fuego para el 4 de marzo. También le dijo al comediante Seth Meyers en su programa nocturno en la cadena de televisión NBC: «Se acerca el Ramadán [10 de marzo], y ha habido un acuerdo por parte de los israelíes de que no participarían en actividades durante el Ramadán, también, para darnos tiempo de sacar a todos los [100 o más] rehenes».
Según una fuente cercana a las conversaciones, la propuesta de París vería a Hamás liberar a algunos, pero no a todos, los rehenes que tiene en su poder, a cambio de la liberación de cientos de palestinos encarcelados por Israel, un aumento de la ayuda humanitaria para los palestinos hambrientos en Gaza y la retirada de las tropas israelíes de las áreas pobladas en el enclave a lo largo de la costa del mar Mediterráneo.
Pero el acuerdo aparentemente no cubre la principal demanda de Hamás de un fin permanente de la guerra y una retirada de las tropas israelíes. Tampoco resuelve el destino de los hombres israelíes en edad de combatir entre los rehenes.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo en los últimos días que un alto el fuego temporal no cambiaría los planes de Israel de llevar a cabo una ofensiva en la ciudad sureña de Rafah para lograr el objetivo de Israel de eliminar a Hamás.
Las perspectivas de una operación en Rafah han hecho saltar las alarmas internacionales debido al gran número de palestinos que viven allí, muchos de ellos después de huir de otras partes de Gaza en busca de seguridad.
Funcionarios israelíes han mencionado la evacuación de civiles de Rafah, pero no han dado ningún detalle sobre dónde podrían ir los palestinos. Egipto, que limita con Rafah, ha dicho que no abrirá sus fronteras. Gran parte de Gaza ha sido arrasada durante la contraofensiva masiva de Israel después del ataque terrorista de Hamás del 7 de octubre que mató a 1.200 personas en Israel.
Las Naciones Unidas han expresado su preocupación por cualquier plan para trasladar a la población civil del sur de Gaza y por los planes israelíes de lanzar una ofensiva en la zona poblada por personas que ya necesitan ayuda humanitaria.
Hamás capturó a unos 250 rehenes en su ataque de octubre. Alrededor de 100 rehenes fueron liberados durante un alto el fuego de una semana en noviembre. El ejército israelí dice que cree que unos 30 rehenes retenidos por Hamás han muerto o han sido asesinados posteriormente en Gaza.
[Parte de la información para este informe provino de The Associated Press, Agence France-Presse y Reuters]Voz de América
