TIRA SALVADORA
IBA don Adán en un tranvía atestado de gente, y llovía a cántaros. De pronto el tranvía dio un socollón tremendo que hizo caer a algunas personas sobre otras. Don Adán casi le cae encima a una guapa mujer muy conocida por muchos, pero lo salvó el hecho de haberse asido fuertemente a una correa de cuero que se usaba exprofesamente en los tranvías para ese objeto. Don Adán comentaba:Caray, SI NO ES POR ESTE CUERO ME CAIGO.
Tomado del Anecdotario del Lic. Adán Acosta V.
COMENTAR EN FACEBOOK