Rosita Argüello entrevista a la Presidenta de la República Laura Chinchilla Miranda
La cita fue un desayuno ofrecido por la mandataria costarricense Laura Chinchilla Miranda en su segunda navidad al frente del gobierno. El plan fiscal y la posible crisis que su no aprobación pueda provocar en las instituciones costarricenses, es el problema que le oscurece el horizonte.
Así contestó doña Laura algunas de las preguntas que se le realizaron en esta ocasión.
CAMBIO POLÍTICO – ¿Se dice que para su gobierno el 2011 ha sido un año muy duro, porqué?
LAURA CHINCHILLA MIRANDA – En términos generales uno podría decir que el año 2011 fue un año en que nos correspondió poner en evidencia los problemas mas complejos que en estos momentos tiene Costa Rica y que la mayor parte de ellos (los mas complejos), están asociados precisamente a las dificultades que muchas de las instituciones del sector público están enfrentando en relación con su sostenibilidad financiera, no quiero con esto reducir toda la deuda pública solamente a este tema, hay muchas otras cosas, pero si hay un tema que se ha venido reiterando en el debate público y que ha venido recibiendo el mayor de los énfasis de parte del gobierno de la república es precisamente la situación financiera de muchas de las instituciones del sector público y no estaríamos hablando de solo el gobierno central donde mas fuertemente ha impactado el déficit fiscal, déficit que a partir del 2012 estará acercándose al 6%.
CP- ¿Este déficit afecta solo al gobierno central?
LCM- NO, estaríamos hablando de la situación de la Caja Costarricense del Seguro Social, pero no se eximen a las instituciones similares, JAPDEVA, INVU, CNP, Correos de Costa Rica, etc, que nos ha obligado a hablar con claridad, y a emprender el análisis de cierto tipos de escenarios de reformas institucionales, a procurar ser mas consientes en el uso de los fondos y en la ejecución del gasto, procurar reducir al máximo lo que podamos hacer en el marco de las potestades que tiene la administración y por supuesto también buscar formas alternativas para llevar mas recursos a las instituciones.
La principal forma en que hemos podido operar es empezando a cobrar de verdad. En Costa Rica no hemos aprendido a cobrar de verdad, tampoco hemos acostumbrado a la gente a pagar lo que hay que pagar y entonces ustedes han visto los esfuerzos que hemos realizado en materia recaudatoria, estamos sentando todo un tono en lo que es el cobro de impuestos en el país, difícilmente se nos ha quedado un sector por fuera que no ha sido escrutado en estos meses, ha habido quejas, reacciones, pero estamos haciendo lo correcto, además hemos tenido que hacer una importante revisión de la ejecución del gasto, a la par del poblamiento de la planilla del Estado y de tener incrementos salariales que no sean aquellos que estrictamente responden al incremento por razones de costo de vida, hemos también reducido las transferencias a muchas de las instituciones, a las cuales les hemos solicitado que aprendan a su vez a cobrar, que aprendan a definir sus tarifas, y a cobrarlas como debe ser.
Y entonces hemos tenido también instituciones recurriendo ya a la ARESEP, procurando definir con mas claridad cuales son las tarifas necesarias para alcanzar sus balances financieros para poder desarrollar sus inversiones y esto por supuesto también ha implicado toda una reacción institucional y también una reacción por parte de los usuarios, que de alguna manera sienten que en varias de las tarifas de los servicios públicos están experimentando ajustes hacia arriba.
Si ustedes revisan muchas de esas instituciones que atraviesan graves problemas financieros simple y sencillamente son instituciones que nunca o por muchos años no actualizaron sus tarifas, el caso del INVU, de manera que les estamos diciendo a las instituciones, tienen que aprender y sacar a sus instituciones adelante sin depender de las transferencias presupuestarias, y aquellas que además han venido perdiendo negocio en el país como es el caso de RACSA, tienen que tomar un análisis respectivo, de sus nichos posibles y tratar también de tener una propuesta para seguir adelante.
CP- ¿Como visualiza el 2012?
LCM- Yo diría que el año 2012, va a ser un año donde van a empezar a conocer muchas de las propuestas alternativas, con las que cada una de estas instituciones va a procurar salir adelante, porque no van a poder seguir viviendo a través de las transferencias presupuestarias, ya para el presupuesto ordinario del 2012, no van esas transferencias que en el pasado se realizaban y entonces vamos a ver cuales instituciones de verdad tienen el pensamiento estratégico que se requiere, tienen la iniciativa y el deseo de emprender esos procesos de reforma interna y cual es el personal necesario para seguir adelante, para poder avanzar en el marco de la sostenibilidad de las políticas que tienen que impulsar.
CP- Cierra el 2011 con menos popularidad y con los sectores sociales molestos ¿cómo piensa recuperar la credibilidad?
LCM- No todo ha dependido de la administración, ahí es donde nos hemos podido mover, donde hemos podido revisar tarifas y ajustar presupuestos, o ir a cobrar mejor los impuestos, así lo hemos hecho, hemos utilizado de manera muy intensa los espacios, pero también hay una importante parte de esta agenda que tiene que ver con la situación financiera con instituciones publicas cuya producción no depende únicamente del gobierno sino que también depende de la Asamblea Legislativa y del Poder Judicial.
Y entonces hemos venido impulsando este debate tan complejo para cualquier sociedad, una reforma tributaria de gran calado no solamente por el monto que pretende recaudar sino sobre todo por la redefinición del sistema tributario que tiene Costa Rica, es decir vamos hacia un sistema donde fundamentalmente estamos tratando de definir mecanismos eficientes de recaudación a través de los controles que nos garantiza la modalidad del costo al valor agregado.
Hemos tenido que hablarle al país con mucha crudeza y esto se ha unido a un contexto internacional que nos genera grandes niveles de incertidumbre a todos aquellos que estamos debidamente informados, yo diría que la población costarricense es una de las poblaciones que tiene mayor acceso a la información, por nuestro nivel de desarrollo humano por nuestro acceso a la información, por nuestro sistema también de opinión pública, es gente informada, es gente que sabe lo que está pasando en el mundo, las situaciones económicas por las que atraviesan países que nos son cercanos por su intercambio comercial. Así pues en función de estos niveles de preocupación de parte de los costarricenses hemos procurado actuar de manera muy consecuente con las políticas que tenemos que impulsar.
Esto ciertamente ha afectado la imagen del gobierno, pero lo hemos dicho de manera reiterada: un presidente o un gabinete no puede tomar decisiones en función de lo que las encuestas van diciendo día a día, las decisiones que estamos tomando son decisiones con un altísimo sentido de la responsabilidad para con los tiempos en que nos correspondió gobernar, pero sin embargo, cada vez que veo el desempeño de Costa Rica en otras áreas, tiendo a abrigar un sentimiento de esperanza de vencer y de enfrentar muchos de los obstáculos que tenemos en este momento y poder salir adelante no solamente tan bien librados como en el pasado lo hemos hecho en otras coyunturas difíciles por las que ha atravesado el país sino aun mejor y salir fortalecidos de esta situación.
Lo que el Gobierno de la República ha procurado hacer es básicamente evitar una crisis fiscal, una crisis de financiamiento de las instituciones estatales que tiende a convertirse en una crisis económica y todavía estamos a tiempo, pero también debo de reconocer que cada vez el tiempo corre en contra y cada vez hay mayor riesgo de que toda la economía se contamine de la situación fiscal, por eso es que vamos a seguir insistiendo en hacer esas reformas institucionales que muchas de ellas ya se están decantando pero que lo harán con mayor fuerza en el año 2012 y también seguiremos insistiendo en la necesidad de arreglar el problema fiscal a través de la reforma tributaria, que le hemos presentado al país.