Cuenca de los montes Chisos

Dónde	Parque nacional de Big Bend. Texas, Estados Unidos
Altitud de la montaña más elevada	2 388 m
Número de especies de aves	434
Número de especies de mamíferos	78

La cuenca de los montes Chisos forma parte de un fabuloso valle surcado por una falla que se extiende de Colorado a México. La cuenca y sus montañas se asientan sobre un bloque hundido de la fisura, rodeado a cada lado de más montañas. El resultado de esta intrincada formación es una tierra de contrastes: de desérticas tierras bajas y húmedos bosques en las montañas. Pero, sobre todo, una tierra de vistas panorámicas. Los montes Chisos se elevan 610 m desde el fondo de la cuenca a 2 388 m, y están cubiertas de bosques de robles, pinos ponderosa, enebros y álamos temblones.

Estas montañas albergan la única humedad y las únicas temperaturas moderadas dentro de este paisaje desértico, y son el hogar de osos negros, pumas, aves poco comunes y muchas plantas y animales endémicos. Toda la región se halla en el desierto de Chihuahua, y cubre la mayor parte del norte de México, el oeste de Texas y sectores de Nuevo México. Las temperaturas en el desierto por encima de la cuenca superan los 38 °C en verano, pero dentro de la hondonada a menudo es 10° C más fresca por estar por debajo del suelo del desierto.

Es una de los lugares más remotos de Texas, pero merece la pena viajar hasta allí para contemplar su belleza, sus montañas y el desierto con sus cielos estrellados. Una de las mayores atracciones es la puesta de sol desde la «ventana le la cuenca de Chisos», una impresionante vista a través de elevadas colinas butte hacia el pico Casa Grande, una montaña en la parte este de la hondonada. Allí, la puesta de sol en ocasiones resulta tan violenta que tiñe la montaña y el desierto de un intenso color rojo y los transforma en un paisaje casi extraterrestre.

La depresión y sus montañas forman parte del Parque Nacional de Big Bend, donde el río Grande da una amplia curva a través del desierto de Chihuahua. El parque abarca 3 108 km2 de una de las partes más áridas de Norteamérica.

El mejor momento para visitarla es entre noviembre y enero, cuando las temperaturas son más frescas. Por el gran número de pistas que recorren el parque, es un paraíso para los excursionistas.

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