Una vez nos dijo don Fernando: un enfermo, sentado en el jardín del manicomio se reía a carcajadas y otras veces se encogía de hombros en un gesto de aburrimiento. Viendo esto, me le acerqué y le pregunté:
—»¿De qué te ríes?»
El enfermo mental, que no era de esos locos furiosos, le respondió a su médico:
—»Porque me estoy contando chistes» …
El doctor Quirós Madrigal, no satisfecho, le vuelve a preguntar:
—»¿Entonces, por qué otras veces te encogés de hombros?»
Y el loco, que de tonto no tenía un pelo, le contestó:
—»¡Porque esos ya los conocía!»
Tomado del Anecdotario Nacional de Carlos Fernández Mora. Usado con autorización.