Sin ser un comunicado del partido, es la opinión de dos de sus dirigentes más connotados.
Jose María Villalta
Sobre lo acontecido en Venezuela y la vía democrática:
En Costa Rica el político más parecido a Nicolás Maduro se llama Rodrigo Chaves. Eso todo mundo lo sabe. Por esa razón no comparto la deriva autoritaria ni el deterioro de la democracia propiciados por Maduro, ni los que intenta hacer en nuestro país su copia barata a la tica.
Esto no significa que simpatice con la oposición venezolana, la cual tiene unos liderazgos que parecen una fusión entre Milei, Fabricio Alvarado y la reina María Antonieta y, además, ha promovido invasiones militares extranjeras contra su propio país.
Si votara en Venezuela, probablemente buscaría una opción alternativa en alguna de las fuerzas minoritarias o tendría que reconocer que, a veces, ninguna opción me representa, como también nos ha pasado en Costa Rica.
Lo que sí está absolutamente claro es que es el pueblo venezolano el que tiene derecho a decidir quién quiere que le gobierne. Por eso. comparto las dudas y preocupaciones que han expresado gobiernos como los de Brasil o Colombia u observadores internacionales, como el Centro Cárter. Mientras estas dudas como la obligada transparencia en la presentación de las actas de las votaciones, mesa por mesa* no sean aclaradas, no es posible reconocer el resultado de estas elecciones.
Es necesario esperar, seguir exigiendo transparencia a las autoridades venezolanas y promover una resolución pacífica de las diferencias. Respetar la soberanía de Venezuela, pero sin olvidar que ella reside en el pueblo, y que el respeto a su voluntad expresada en el proceso electoral es un principio fundamental, no negociable.
oOo
Ariel Robles Barrantes
Sobre Venezuela:
El Frente Amplio es un partido diverso y formo parte de esa diversidad, formo parte de las diversas sensibilidades de este proyecto político. ¿Sobre Venezuela? No comparto ni un centímetro de lo que está sucediendo ahí, ni me identifican los caudillismos, ni soy cercano en ninguna medida las prácticas de ese gobierno. La alianza de Nicolás Maduro con los sectores pentecostales sacrificando derechos humanos, el evidente discurso agresivo, la necesidad de expulsar la crítica, me resultan prácticas autoritarias muy lejanos y señalables desde la idea de política que tengo.
Ante los resultados electorales, al igual que lo han dicho gobiernos progresistas de Brasil, Chile y Colombia debe tenerse claridad en ese proceso. El Centro Cárter, definido por el mismo Gobierno de Venezuela como un centro de alto prestigio para la democracia, participó de observador invitado por la CNE y señaló en un informe del 30 de Julio que “La elección presidencial de Venezuela de 2024 no se adecuó a parámetros y estándares internacionales de integridad electoral y no puede ser considerada como democrática.» Por supuesto que tengo muchas dudas de lo que sucede.
¿Por qué tanta resistencia a demostrar acta por acta el resultado electoral de forma transparente y visible a toda la opinión tanto del pueblo de Venezuela como la mirada internacional? En mi caso, no existe justificación alguna para no hacerlo más que la pretensión de ocultar resultados electorales En tanto esto no exista, los señalamientos por un posible fraude electoral son válidos y quienes tenemos dudas del proceso no podremos reconocerlo como uno claro, transparente y democrático.