El presidente Carlos Alvarado y sus malos consejeros

Saúl Weisleder

En extrañas y sorprendentes declaraciones de hoy, el presidente Alvarado intenta atizar la campaña electoral, cuando aún los que legítimamente pueden contender en ella se han mostrado cautos. Esto me ha sorprendido. Considero a don Carlos una persona que inició su gobierno con grandes deficiencias, pero ha ido aprendiendo a ejercer su alto cargo. De manera que inmiscuirse donde no debe; es seria torpeza. No logro ver qué beneficios pueda traerle en su ejercicio de primer mandatario ni tampoco en su imagen general. Los únicos que aplaudirán esta búsqueda de camorra contra el principal partido de Costa Rica, contra la mayor Fracción Parlamentaria de la Asamblea Legislativa y contra todo el Partido Liberación Nacional en sí, sean quizá algunos recalcitrantes del PAC. Lo que dijo, es error de bulto. Divide en vez de unir, que es lo que le toca hacer.

Dijo don Carlos “El PLN perdió la vocación de gobernar”. Discúlpeme, porque tengo por usted, su familia y su investidura un gran respeto, pero como dice el pueblo “¿quién lo mete a usted a opinar sobre eso? Además de que ese dicho contradice de manera flagrante la historia, incluida la de los 3 años y 4 meses en que usted ha ejercido la presidencia; usted es un calificado testigo de la capacidad y vocación de gobierno del PLN. Sin esa vocación de gobernar, el PLN no habría sido factor central en salvar fiscalmente al país y a su gobierno. Lo hizo por responsabilidad con el pueblo que representa. Ahora usted parece llamar a que vayamos a la batalla unos contra otros. ¿Es esa la manera de terminar su gobierno y llevar al país a buen puerto? Por supuesto que no.

El PLN está terminando de organizarse para hacer una campaña para rescatar a Costa Rica y acelerar las soluciones que aquejan al pueblo. Ya tenemos candidato presidencial, un costarricense con experiencia, liderazgo, capacidad de diálogo y de ejecución. Don José María Figueres es la persona que el pueblo elegirá en febrero, porque sabe gobernar. Fue electo en consulta con una cantidad de ciudadanos 30 veces mayor que la que escogió al candidato de su partido.

El PLN está a punto de nombrar su nómina completa de candidaturas a las diputaciones, en una Asamblea que involucró decenas de miles de costarricenses y así demostró seguir siendo el partido más democrático y organizado del país. Cuadros técnicos y dirigentes, están a las puertas de presentar al país el Programa de Acción de gobierno que, bajo el liderazgo de las ideas centrales de don José María, han venido preparando por largos meses.

Y ante estas realidades, sale usted con esa muy desafortunada, falsa y provocadora expresión. ¿Quién lo está asesorando ahora don Carlos? ¿Quién o quiénes le han hecho cometer tantos errores en los últimos tiempos, al punto que ha debido echar atrás en decisiones que nunca debió haber tomado, como el nombramiento en la OCDE?

Su gobierno no ha terminado aún. La mayoría de las deficiencias que tiene, son resorte del Poder Ejecutivo y de la administración activa. Aún pueden mejorar cosas que el pueblo añora. Mejorar la educación urge, también arreglar el AyA. Instruya al ICE para que deje de bloquear la generación eléctrica descentralizada y concéntrese en tantas áreas de mejora que nos prometieron y no han cumplido. Todo esto podría ayudar a que el país genere EMPLEO, EMPLEO, que es lo que la gente necesita. Ya verá cuando Figueres sea el presidente, cómo se atacan los problemas y se mejora la vida de la gente.

Termino: mejor no se tiente con política electoral y no desafíe al PLN. Vuelva a la serenidad y al trabajo de ordenar su gobierno. De veras, le deseo lo mejor.

– Ex presidente de la Asamblea Legislativa