¿En verdad existen las Sirenas?

Carlos Vílchez Navamuel

Por Carlos Vilchez Navamuel

En estos días han aparecido en Internet una serie de videos y fotografías fantásticas sobre unas aparentes sirenas, lo mismo sucedió meses atrás con la divulgación de unos documentales de sirenas. ¿Qué tan ciertas son las imágenes, los videos y los documentales que se han divulgado? A continuación una breve pincelada a este tema y lo que nos encontramos.

El mito sobre las sirenas es muy viejo, Wikipedia nos informa que “Las sirenas (en griego antiguo, Σειρήν Seirến, ‘encadenado’, relacionado quizá con el sánscrito Kimera, ‘quimera’) son criaturas legendarias pertenecientes al folclore y las leyendas”.

La misma fuente nos dice que “Las primeras historias conocidas sobre sirenas aparecieron en Asiria, antes del 1000 AC. El hecho de representarlas con medio cuerpo de pez se debe a la leyenda referida por Diodoro Sículo en la que Derceto ofendió a Venus y entonces la diosa le inspiró amor hacia un pastor. De este amor nació una niña, Semíramis, que llegaría a ser reina de Babilonia. Después de nacer su hija, también por obra de Venus, acabó el amor. Derceto, llena de ira, abandonó a su hija, hizo matar al hombre a quien había amado y se arrojó al agua dispuesta a suicidarse, lo que los dioses no permitieron. Así dio origen a su morfología anfibia. Esta diosa Derceto es muy similar a la figura de Atargatis la diosa siria con forma de sirena a la cual los peces le eran consagrados. La diosa fue adorada en templos en los que había grandes estanques, y, puesto que era la deidad que gobernaba los mares, sus sacerdotes solían vender licencias de pesca a los marineros”.

Sirenas falsas
Sirenas falsas

Y esta enciclopedia digita añade “En la mitología griega eran ninfas o deidades marinas, y se las describe como mujeres hermosas con una cola de pez; hechizaban a los marineros con sus hermosos cantos.” Agrega la enciclopedia digital que “en la mitología griega, las sirenas son criaturas ligeramente difusas debido al remoto y rico trasfondo de su origen, probablemente ligado al mundo de los muertos. Según los mitos originales se trataba de seres con cuerpo de pájaro y rostro o torso de mujer, que inequívocamente se distinguen siempre por el hecho de tener una voz musical, prodigiosamente atractiva e hipnótica. La tradición las hacía habitar en una isla del Mediterráneo frente a Sorrento, en la costa de la Italia meridional (en ocasiones se alude concretamente a Capri). Nos dice también que “El primer testimonio escrito que se tiene de ellas es su mención en la Odisea de Homero. Algunas representaciones las muestran como híbridos de mujer y ave, posteriormente la representación más común las describe como hermosas mujeres con cola de pez en lugar de piernas, como el Tritón, la contraparte masculina de una sirena. Es por ello que muchas lenguas no latinas distinguen la sirena original clásica (inglés siren, alemán Sirene) de la sirena con cola de pez (inglés mermaid, alemán Meerjungfrau).

En marzo del 2012 Alejandro Agostinelli, en un artículo titulado; El extraordinario caso de las «sirenas reales» nos dice que “En pleno siglo XXI las sirenas han vuelto a reclamar el derecho a la existencia, pero no a través de los medios masivos (que se atienen a una lógica curiosa, ya que le dan más crédito a las apariciones de hadas o vírgenes que a las visiones de sirenas), sino a través de testimonios virales, propagados a través de las redes sociales. Estas sirenas carecen de carisma, no están en el océano agitando sus brazos o canturreando al capitán del barco con una voz hipnótica, pero tampoco son mutantes de pescadería”.

Agostinelli añade que en ese año “Un equipo de estudiantes y docentes de la Universidad de Lincoln, Gran Bretaña, está ahora mismo trabajando afanosamente en la identificación de una pieza que parece ser una sirena momificada hallada en el Museo de Arte Buxton en Derbyshire. Se cree que la sirena en cuestión llegó al museo desde el Lejano Oriente a mediados del siglo XIX. Anita Hollinshead, estudiante de conservación y restauración, responsable del casual hallazgo, precisó que su cabello es humano. «Gran cantidad de este tipo de sirenas procedía de Japón y fueron elaboradas por pescadores, quienes complementaban sus ingresos con la venta de sirenas falsas», señaló la re descubridora de la insólita reliquia”.

Años atrás se encontraron en playas de Pajapan, Veracruz, México lo que se afirmaba eran una sirena. Las fotos son tan buenas que al mirarlas uno se pregunta si en verdad son reales, pero no lo son, estos muñecos de “sirenas” fueron hechos a base de silicón y alambre en un taller especializado para efectos especiales y utilizados para la filmación de una escena de la película Piratas del Caribe, como lo pueden observar en este video.

Tampoco los documentales ¿Sirenas Mito o realidad? Y La nueva evidencia, representan la verdad, son documentales ficción y no son ciertos. El supuesto doctor Roberston es un actor.

Sin embargo, el mito de las sirenas seguirá intacto, de la misma forma que el mito de los dioses griegos lo son, lo que es una realidad es que ignoramos el verdadero origen del mito porque la historia como la conocemos no está completa, ignoramos por ejemplo si existió la Atlántida, Lemuria o otras civilizaciones anteriores que se habrían perdido con el tiempo, ignoramos también si nosostros somos el último experimento de algunos dioses o extraterrestres, y si estos mitos sobre sirenas son producto del agún conocimiento perdido sobre otro experimento realizado miles de alños anterior a la era adámica por estos arquitectos creadores que existen en el universo.

Fuente: http://wp.me/p2elI2-12W

Revise también

Yayo Vicente

Tambores de guerra

Circunloquio Yayo Vicente Nuestro país descansa su seguridad externa en la institucionalidad internacional. La última …

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Cambio Político
Este sitio usa cookies. Leer las políticas de privacidad.