Recopilación Carlos Revilla
El 6 de mayo es el 126.º (centésimo vigésimo sexto) día del año. Quedan 239 días para finalizar el año.
La vida es muy peligrosa. No por las personas que hacen el mal, sino por las que se sientan a ver lo que pasa.
Albert Einstein (1879-1955) Científico alemán nacionalizado
DÍA MUNDIAL DE LA FILATELIA
DÍA INTERNACIONAL DE LA OSTEOGÉNESIS IMPERFECTA
DÍA DEL PSICOANALISTA
Federación Psicoanalítica de América Latina.
DÍA MUNDIAL DEL ACORDEÓN
BRAULIO CARRILLO
1842 – Por iniciativa de Alejandro Escalante, se levantará una información para comprobar los daños y perjuicios causados al país por el dictador Braulio Carrillo.
https://guiascostarica.info/gobernantes/presi03/
CARLOS MARÍA ULLOA
1856 – Es ordenado sacerdote Carlos María Ulloa.
CAMPAÑA NACIONAL
1857 – Llega a San José la noticia de la rendición de Walker en la ciudad de Rivas, el 1 de mayo. Las campanas de los templos tocaron largos repiques y se recorrieron las calles alegremente, dirigiéndose a la iglesia principal los vecinos, a dar gracias a Dios por la terminación de la guerra.
JESÚS JIMÉNEZ
1869 – Se nombra a Jesús Jiménez como designado a la Presidencia.
https://guiascostarica.info/gobernantes/presi11/
JULIO ACOSTA
1919 – Fuerzas revolucionarias comandadas por Julio Acosta G., procedentes de Nicaragua, invaden el territorio nacional y ocupan varios pueblos.
RICARDO JIMÉNEZ OREAMUNO
1936 – El Gobierno de México rindió honores al presidente Ricardo Jiménez Oreamuno, al imponerle al mandatario la Banda del Águila Azteca. El distintivo le fue colocado por el embajador de México en Costa Rica, Salvador Martínez.
CANAL 7
1960 – Se inaugura Canal 7, el primer canal de televisión abierta.
ARCHIVOS NACIONALES
1991 – En Zapote, San José, se efectuó el acto oficial de colocación de la primera piedra del edificio de Archivos Nacionales, presidido por la Ministra de Cultura, Licda. Aída de Fishman.
AEROPUERTO SANTAMARÍA
2001 – La administración del aeropuerto internacional Juan Santamaría pasó a manos privadas con el inicio de labores del gestor interesado Alterra Partners.
PALACIO DE VERSALLES
1682 – Se inaugura el Palacio de Versalles, en Francia.
SIMÓN BOLÍVAR
1816 – El Libertador Simón Bolívar es proclamado «Jefe Supremo de la República y sus Ejércitos».
PRIMERAS ESTAMPILLAS
1840 – El Reino Unido efectúa la primera emisión de sellos de correos del mundo.
SIGMUN FREUD
1856 – Nació Sigmund Freud, médico neurólogo austriaco de origen judío, padre del psicoanálisis y una de las mayores figuras intelectuales del siglo xx. Falleció en 1939.
HUMBOLDT
1859 – Murió Alexander von Humboldt, naturalista alemán. Había nacido en 1769.
ESTALLA HEINDENBURG
1937 – En Lakehurst (Nueva Jersey) estalla el dirigible Hindenburg, matando a decenas de personas.
LAS UVAS DE LA IRA
1940 – John Steinbeck recibe el premio Pulitzer por su novela Las uvas de la ira.
MARIANNE BACHMEIER
1981 – En Lübeck, Alemania, Marianne Bachmeier entró en la sala donde juzgaban a Klaus Grabowski, el violador y asesino de su hija de 7 años y le disparó en ocho ocasiones con una Beretta M1934, provocándole la muerte de forma inmediata. Fue condenada a 7 años de prisión. Gran parte de la gente estuvo en contra de que encarcelaran a Marianne Bachmeier. Finalmente la condena se redujo a 3 años de cárcel.
EUROTUNEL
1994 – Inauguración del Eurotúnel por parte de la reina Isabel II del Reino Unido y el presidente francés François Mitterrand.
FRIENDS
2004 – En Estados Unidos se transmite el último episodio de la exitosa serie de comedia Friends, que tuvo diez temporadas.
TITANIC
2006 – Lillian Gertrud Asplund, falleció a los 99 años de edad. Ella era la última sobreviviente del hundimiento del Titanic, en 1912.
FRANCIA
2012 – En Francia, el socialista François Hollande es elegido en segunda vuelta presidente de la República tras imponerse con el 51,7 % de los votos al candidato de la derecha Nicolas Sarkozy.
La expresión «coger la cabra de alguien» se basa en la costumbre de tener una cabra en el establo con un caballo de carreras como compañera del caballo. La cabra se convierte en una influencia asentadora para el purasangre. Si eras dueño de un caballo competidor y no te importaban los negocios sucios, podías robar la cabra de tu rival (en serio, se ha hecho) para molestar al otro caballo y hacerle correr mal. De las cabras y los caballos se pasó lingüísticamente a las personas: para molestar a alguien, «cógele la cabra».
o
A pesar de tener más de mil millones de habitantes, China sólo tiene unos 200 apellidos.
Días malos en la historia
6 DE MAYO DE 1983
Los «Diarios» de Dummkopf
Del diario de un loco: «Por deseo de Eva, mis médicos me examinan a fondo. A causa de las nuevas píldoras tengo flatulencias violentas, y- dice Eva mal aliento». Ciertamente, se trataba de una entrada bastante anodina, pero no por ello menos tentadora, parte de lo que prometía ser una bonanza histórica de información sobre uno de los hombres más malvados del mundo.El 22 de abril de 1983, la revista alemana de noticias Stern anunció que tenía en su poder el diario personal de Adolf Hitler, un conjunto de unos 60 volúmenes ocultos durante mucho tiempo, que abarcaban los años 1932 a 1945, por el que la revista había pagado millones. Era una suma asombrosa, pero el prestigio que se derivaría de semejante primicia no tenía precio.
El magnate australiano de los medios de comunicación Rupert Murdoch fue uno de los que vio en los diarios un enorme potencial de beneficio y quiso publicarlos por entregas en su Times de Londres. Para autentificar los documentos, envió al historiador británico Hugh Trevor-Roper, un especialista en los siglos XVI y XVII que apenas sabía leer alemán. Tras escuchar a los editores de Stern relatar la historia de cómo los diarios habían sido recuperados de un accidente aéreo en 1945 y escondidos en secreto por un oficial de alto rango de Alemania Oriental, y después de revisar la enorme pila de volúmenes, Tievor-Roper quedó «satisfecho de que los documentos son auténticos».
Incluso cuando el mundo esperaba ansioso leer los pensamientos privados de este monstruo inescrutable, los escépticos tenían sus reservas. El biógrafo de Hitler, Werner Maser, declaró entonces a Reuters que «todo habla en contra. Huele a puro sensacionalismo». El coro de dudas se hizo más fuerte cuando Stern publicó un fastuoso número especial anunciando los diarios el 25 de abril, y celebró una rueda de prensa para cacarearlo.
Sin embargo, en lugar de las esperadas alabanzas, los editores se enfrentaron a preguntas inoportunas sobre la autenticidad de los diarios. Y Trevor-Roper no ayudó en absoluto con su repentino e inesperado cambio de postura cuando se le pidió que se dirigiera a la prensa desconfiada: «Como historiador, lamento que el método normal de verificación histórica se haya sacrificado en cierta medida a las exigencias de una primicia periodística».
Se estaba gestando un desastre, cuyo golpe culminante tuvo lugar el 6 de mayo, cuando los Archivos Federales alemanes declararon que los diarios eran «una burda falsificación y la invención «grotescamente superficial» de un falsificador con «capacidad intelectual limitada».
Stern había sido engañado por un imbécil llamado Konrad Kujau, una «figura alegre y farsesca», como lo describió el escritor Robert Harris, que al parecer dedicó muy poco tiempo y esfuerzo a su obra. Los indicios de falsificación eran obvios, desde el papel, la tinta y el pegamento utilizados por Kujau, todos ellos fabricados mucho después de la muerte de Hitler en 1945, hasta los pasajes extraídos directamente, aunque a menudo de forma incorrecta, de un libro de discursos y proclamas del führer. Kujau incluso se equivocó con las iniciales góticas grabadas en cada volumen de imitación de cuero, en una de las cuales se leía «FH», no «AH».
«Tenemos motivos de sobra para avergonzarnos de que nos haya podido pasar algo así», anunció el editor de Stern, Henri Nannen, tras el fiasco del diario. Y así fue. Los editores de la revista habían permitido que su reportero Gerd Heidemann se desbocara con la historia, sin siquiera insistir en que nombrara su fuente. También ignoraron las numerosas señales de fraude que precedieron a la publicación. Pero al menos Nannen y sus colegas pudieron consolarse sabiendo que parte de lo que estaba escrito en los «diarios» era realmente cierto. El Führer realmente tenía lo que su médico describió como «flatulencias colosales… en una escala que rara vez había encontrado antes». Y también un aliento horriblemente malo.
Tomado del libro «Bad Days in History»