Recope; la labor de adoctrinamiento en su contra está hecha

Joaquin B. Martínez Ramírez

Hace unos diez años, a raíz de una simple conversación sobre Recope con un joven, me externó “yo odio Recope, odio a sus trabajadores, odio las convenciones colectivas, odio sus obusos, porque ellos se llevan la mejor tajada en el precio de la gasolina”, dicho esto procedí a explicarle la estructura de costos de dicha empresa pública y me replicó “a mi no me importa saber nada de eso, y si fuera fuera una compañía extranjera la proveedora de combustibles, con gusto pagaría los mismos precios”.

En estos leí una nota de la pagina de FB “Plataforma crítica”, donde y según se expone si elimináramos a todos los trabajadores de Recope, que no quede ninguno, el posible rebajo en el litro de combustible apenas sería de ₡10,00 (diez colones). Si tomamos de referencia el precio actual del litro de gasolina súper apenas sería apenas un 1,0438413% del valor total; la gran mayoría asintió como ridículo, pero también emergieron muchas personas que dijeron, los trabajadores son unos ladrones y toda la perorata de siempre, algunos de manera tendenciosa compararon costos laborales con costos de operación, que hoy son un 4,49% del precio total, si siquiera investigar cuáles son los costos de otras empresas en la región, eso no importa. Y aún así, persistieron en su molestia. Esa falta de estudio y análisis crítico, es penosa, porque a cambio de esos datos, su decir es que si fuese una compañía privada o extranjera los precios habrían de ser mucho menores.

La fobia o animosidad contra Recope es tal, que no importan las cifras o realidades, ya que escuchar a alguien decir que esta empresa nos engaña con eso de los precios internacionales y que lo de la guerra en Ucrania es un invento del gobierno para hacerse de más ingresos, para “pagar pensiones de lujo”, sin conocer sus leyes. Si supiera que Costa Rica representa alrededor del 0,2% del consumo de hidrocarburos en el mundo. Bueno con sarcasmo agregaría, que Recope debería parar la guerra y poner en su lugar a la OPEB, no hay otra. No, el pleito es contra Recope, sea a como sea, aún contra la realidad.

Por otro lado algunas personas más versadas agregan, la convención colectiva de Recope a sido renegociada a la baja ya tres veces, por vía judicial se han hecho recortes, la planilla de Recope es mucho menor a la que existía hace tan solo doce años. Recope no refina y tampoco tiene cientos de empleados que antes refinaban, sentados en un salón, sólo esperando sus salarios y beneficios, -eso no existe, sólo quedan algunos profesionales en él área de control de calidad, son químicos y no están sentados, pero la gente sigue tragando veneno y mentiras. Pero cuando se les piden a los detractores de Recope cifras correctas, verificables, el silencio es su testigo.

Finalmente, que dice Recope tenga competencia, qué bueno, —si que tenga competencia, qué bueno, pero que esas empresas privadas tengan también sus propios puertos de atraque, sus tanques de almacenamiento y de reservas, sus propios oleoductos y sistemas de distribución empresarial, así si.

Otros dirán que vendan Recope, de paso la empresa más grande Centroamérica, con altísimas calificaciones internacionales y si esta empresa valiera 100 unidades, muchos de los grandes tagarotes la querrían a menor precio, a precio de quema, así cualquiera. Y sino que se les alquilen barato las instalaciones de Recope, etc.

La trama contra Recope es enorme, gigantesca y su objetivo ha sido bien calculado y ejecutado, demeritar la empresa, se crean mentiras, falacias sin sustento, aunque tirios y romanos digan que aunque sea una empresa privada, los precios no cambiarían (seguro pensando en las utilidades), entonces lo que se quiere con demeritar Recope no es otra cosa que hacérsela suya, no que pertenezca al estado, como entidad estratégica, aunque ello signifique la pérdida de un patrimonio de todos los costarricenses, ¿o no…?

Algunos prefieren mentiras incompletas qué verdades demostradas.

Fuente: FB