Jefe de Fracción del Partido Liberación Nacional
01 Mayo 2023
Señoras y señores Diputados:
Frente a la crisis seremos inquebrantables con nuestros principios, hoy, en el día de las personas trabajadoras quiero manifestarles que el Partido Liberación Nacional continuará a su lado. Trabajaremos arduamente por garantizar que las conquistas de los derechos laborales no se toquen. Anuncio que me comprometo a hacer un alto en el camino, para revisar la posición sobre el proyecto de jornadas extraordinarias, de manera que garantice que existirán beneficios reales, especialmente para las mujeres. Las personas trabajadoras son la columna vertebral de cualquier economía. Eso significa garantizar salarios justos, proteger sus derechos e invertir en la red de seguridad social para garantizar que cada costarricense tenga la oportunidad de progresar. Nuestra búsqueda del progreso y de la prosperidad debe ser solidaria, democrática e igualitaria, para que nadie se quede atrás.
Por esto, no vamos a votar nada que vaya en contra de las personas trabajadoras. También, estamos absolutamente en contra de privatizar el Banco de Costa Rica y de cualquier acción que afecte la seguridad social.
Hace mucho conocemos las grandes necesidades que tiene la Caja Costarricense del Seguro Social que deben atenderse con sentido de urgencia. El fortalecimiento de las finanzas, la mejora en los regímenes de pensiones y desde luego, la eficiencia en los servicios que brinda. Es injustificable e inadmisible la forma en que este gobierno ha conducido a esta gran institución.
No vamos a permitir que a fuerza de discursos vacíos para sembrar dudas pretendan debilitar a nuestro buque insignia en el campo social. Eso no va a pasar, a la Caja la defendemos y no permitiremos que la desarmen, ni la lapiden, y mucho menos que la privaticen.
Hoy le digo a los costarricenses, aquí estamos para defender la institucionalidad, nuestra seguridad social y para exigirle al gobierno que pague la deuda que el Estado tiene con la Caja.
También vamos a trabajar a la par del sector agropecuario, el de los medianos y pequeños productores, buscaremos nuevos mecanismos de financiamiento, apoyo técnico y acceso a tecnología que les permita salir de la crisis en que están sumergidos.
Sabemos sobre la ausencia de una política pública consistente de mediano y largo plazo, que brinde incentivos a la diversificación productiva y combata los aumentos de hasta más del 100% en algunos insumos y materias primas, derivando un encarecimiento en los precios de los bienes agropecuarios y una desmejora en la competitividad del sector. Ciertamente, no se valoran los más de 500.000 empleos directos e indirectos que genera el sector agropecuario. La ausencia de un brazo robusto que les acuerpe y les ayude a producir, hace pensar que lo que se quiere es la desaparición de este sector.
Con preocupación vemos que el enfoque del gobierno no es apoyarles, sino establecer medidas para ayudar a unos pocos amigos, como ha pasado con el arroz, donde el esfuerzo del gobierno se ha centrado básicamente en bajar los aranceles con la promesa de disminuir el costo de la vida. Esta medida hasta hoy solo ha reflejado ganancias a los importadores, porque la disminución del precio de venta ha sido ínfima. Mientras tanto, tenemos muchos agricultores golpeados, sin posibilidad de producir con la certeza que su producto tendrá cabida en el mercado nacional. Igual ha sido en el caso de los medicamentos y la supuesta destrucción de los monopolios de importación, campo en el cual tampoco han disminuido los precios.
Anuncio con fuerza que vamos a exigir acciones reales y no poses demagógicas en escenarios teatrales para que se frene la inseguridad, que está provocando lágrimas en muchas familias costarricenses. Este gobierno tiene el lamentable honor de ostentar los índices más altos de violencia en la historia Patria. Ya hemos dado señales con la presentación de los proyectos a la corriente legislativa y otros que presentaremos en los próximos meses. Pero más importante que las leyes es que los responsables asuman el trabajo y den resultados concretos. Con vehemencia apoyaremos el combate al crimen organizado, en beneficio de la paz social que requiere el país.
Desde la bancada del PLN exigiremos al gobierno que en vez de estar señalando y montando shows para el público, se dediquen a proponer una agenda económica que genere las posibilidades al sector empresarial para aumentar su inversión, que de posibilidades reales de crecimiento económico y social a las personas trabajadoras, porque Liberación Nacional nació para proponer y defender la movilidad social fortaleciendo a la clase media, que ha sido el motor del desarrollo de este país.
Trabajaremos en apoyar la creación de empleo como elemento transversal para brindar alivio y estabilidad a los costarricenses. Señalamos que este es uno de los grandes vacíos que ha dejado el primer año de gobierno, donde la propuesta de una agenda de reactivación económica ha sido el gran ausente. Queremos que la gente tenga trabajos dignos, bien remunerados, que pueda ir al supermercado con la tranquilidad de comprar lo necesario para su familia, que pueda desarrollar proyectos de vida y de felicidad.
Nos preocupan las más de 260 mil personas que están desempleadas; las mujeres y las personas jóvenes que buscan, pero no encuentran oportunidades laborales; el rezago en la construcción de al menos 170.000 viviendas, el anhelo de una mejor educación o al menos, contar con un plan serio y concreto para superar el “apagón educativo” es decir, retrocedemos en la promesa democrática y en el cumplimiento de derechos humanos que antes teníamos garantizados.
Iniciamos esta nueva legislatura demostrando con los proyectos de ley que hemos presentado que pasamos del dicho al hecho, proponiendo respuestas puntuales para mejorar el acceso a vivienda, para apoyar las pymes, para tener una gestión eficiente de las juntas de educación y las juntas administrativas, regular el resguardo y la protección de la seguridad cibernética de la administración pública; para prevenir, detectar de forma temprana y dar una respuesta oportuna contra la violencia de la niñez y la adolescencia, zonas económicas especiales, en temas de medio ambiente y cambio climático, eliminando toda forma de violencia étnica y racial, en la prevención y atención de personas con enfermedades raras, para armonizar la normativa del arbitraje costarricense.
Impulsaremos una reforma a la gestión integrada del recurso hídrico, en apoyo al derecho constitucional de acceso al agua, una actualización que no se ha hecho en los últimos 70 años. También tenemos propuestas en la corriente legislativa para mejorar la red vial, apoyar al deporte. Trabajaremos a la par de la juventud costarricense y de los educadores para hacer los cambios necesarios y defender los logros existentes, que algunos pretenden socavar desde el gobierno.
La Administración actual queda debiendo en la entrega de resultados concretos y por el contrario, vemos el letargo de un gobierno que llegó sin conocer y sin estudiar los principales problemas nacionales; con soluciones aventuradas, improvisadas y discurso populista que se escucha fuerte y disimula yerros, que planifica muy poco y resuelve casi nada. ¿En qué estamos mejor que hace un año? Es una pregunta válida para reflexionar.
No podemos patrocinar que el primer año de Gobierno sea para aprender y pensar qué hacer. No podemos patrocinar una curva de aprendizaje de ese calibre, un año es demasiado tiempo en un país urgido de soluciones, de rumbo, y coherencia. Queremos un gobierno que deje a un lado los discursos vacíos, la prepotencia y la polarización.
En esta nueva legislatura no dejaremos de señalar las faltas o las posibles desviaciones éticas o legales. No haremos concesiones de ningún tipo frente a abusos, corruptelas o excesos que debamos investigar. Queremos caminar de la mano con un gobierno que trabaje más y hable menos, enfocados en objetivos claros y sin renunciar a la búsqueda de acuerdos y a tender puentes.
Debemos avanzar con paso firme, tomando en cuenta que no actuamos solos. Debemos considerar que nuestro país forma parte de un contexto global marcado tanto por desafíos significativos como por oportunidades prometedoras, y requerirá la colaboración, la innovación y el compromiso continuo de personas, organizaciones y gobiernos de todo el mundo para navegar y superar los problemas complejos que enfrentamos a nivel internacional.
Sin duda la importancia de la cooperación y la solidaridad globales para enfrentar los retos compartidos, así como el papel fundamental de la ciencia, la tecnología y la innovación para abordar las dificultades de rápida evolución.
En el marco de esta sesión solemne, quiero felicitar a nuestro compañero de la bancada liberacionista, Rodrigo Arias Sánchez, por su elección como Presidente de la Asamblea Legislativa. Confiamos en sus habilidades políticas, en su mística, en su liderazgo y su experiencia para concertar acuerdos. Sus virtudes serán clave para mantener los equilibrios entre poderes, y sacar adelante una agenda para recuperar el rumbo y la confianza del país.
Quiero felicitar también a mi compañera Alejandra Larios Trejos por su elección como subjefa de fracción.
Adicionalmente, quiero felicitar al nuevo Directorio de la Asamblea Legislativa, integrado por compañeros y compañeras de diversos partidos políticos.
Agradezco a Dios, a mis compañeras y compañeros de la bancada liberacionista por otorgarme su confianza para representarlos. Asumo este nombramiento con humildad y con la claridad de la enorme responsabilidad que implica liderar la bancada más grande, con más historia y con mayores logros de este parlamento. Por ello, me comprometo a propiciar el diálogo y a tender puentes para alcanzar acuerdos sobre los temas nacionales que nos unen. Mi labor, estará enfocada en escuchar, en sumar voluntades, en ser un nexo que facilite el trabajo interno de esta Asamblea Legislativa y también, con los otros Poderes de la República, con quienes tenemos el mandato ético de conversar, alcanzar acuerdos y lograr los equilibrios necesarios para el bienestar de la sociedad.
Por ello, fieles a la vocación de gobierno de mi partido, continuaremos haciendo propuestas de mejora. Buscaremos coincidencias antes que discordias. Costa Rica se construyó con diálogo, no dinamitando los puentes que facilitan acuerdos.
Esto no implica que dejaremos de lado el ejercicio de una oposición política responsable y vehemente. Continuaremos señalando faltas y exigiendo rendición de cuentas, cada vez que sea necesario.
Tenemos claro que no es posible la construcción de una sociedad próspera, libre e igualitaria bajo la amenaza del látigo, la incapacidad de dialogar, la ofensa como arma de encuentro, así como de la inseguridad, la violencia y el despojo que vivimos. Por eso, le digo al gobierno que deje de lado las poses populistas y pasemos del discurso a las acciones. Solo con el apoyo de todos y todas podemos avanzar hacia una Costa Rica mejor. En ese trascendental camino Liberación Nacional siempre estará presente.