Desde mi perspectiva
José Francisco Bolaños Arquín
Hace unos días publiqué el artículo: La urgencia de implementar el Gobierno Digital, cuyo propósito es aprovechar al máximo el uso de las tecnologías de información y comunicación, con el fin de mejorar el funcionamiento de las entidades públicas; agilizar los trámites que realizan los ciudadanos e incrementar la calidad y transparencia de los servicios públicos. Los primeros pasos, se dieron en el 2.000 y 17 años después no se ha logrado obtener los resultados esperados.
Paralelo a lo anterior y como complemento necesario, me refiero en esta oportunidad a la reestructuración y modernización del Estado costarricense. Este proyecto inició en 1988 con el fin de mejorar y agilizar el funcionamiento de la administración pública, al brindar servicios públicos de una mayor calidad y cuyos objetivos eran promover el desarrollo regional y disminuir la excesiva centralización de los servicios públicos en el Área Metropolitana.
Se creó La Comisión Consultiva para la Reforma del Estado Costarricense (COREC) ante las negociaciones que se estaban efectuando con el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, en relación con el Programa de Ajuste Estructural, requisito exigido por estos Organismos y cuyo propósito era el de orientar las reestructuración de nuestra economía, ante una Reforma del Estado.
Esto con el fin de lograr una mejora sustancial en los servicios que brinda el Estado, al promover y facilitar un acelerado crecimiento de nuestra economía. Las dos siguientes administraciones lo asumieron en sus programas de Gobierno y en 1995, la responsabilidad fue delegada al Ministerio de Reforma del Estado, organización creada con ese propósito, con pocos avances; ya para mediados de 1996, se tomó la decisión que el Ministerio de Planificación Nacional y Política Económica (MIDEPLAN), continuara con el proyecto.
Tiempo después, MIDEPLAN tomó la determinación de no continuar con el programa, porque concluyeron entre otras razones: Insuficiente capacidad del Estado para enfrentar las nuevas dinámicas de un entorno internacional caracterizado por la globalización, la formación de nuevos bloques políticos y un acelerado cambio en el conocimiento científico y tecnológico aplicado a los procesos productivos y sociales.
Además, argumentaron que existe una excesiva concentración del poder en el ámbito central del Estado, (Poder Ejecutivo, Legislativo, Judicial y Tribunal Supremo de Elecciones) y con los años se fue creando una cultura de Estado en perjuicio del desarrollo de las instituciones municipales, regionales y comunales. También consideraron que no era el momento para impulsar reformas legales y constitucionales.
Costa Rica, ha perdido un tiempo muy valioso tanto en la implementación del Gobierno Digital como en la Modernización y Reestructuración del Estado Costarricense, necesarios para convertirnos en un país ordenado, ágil, transparente, desarrollado y más competitivo.
No podemos continuar postergando la implementación de estos programas por más tiempo, nos hemos convertido en un país lento en la toma de decisiones; acciones que son vitales para nuestro desarrollo y así agilizar las gestiones ciudadanas y empresariales.
En algunos campos, se han dado importantes avances en la trámites de servicios, con el uso efectivo de la tecnología y una notoria reducción de los plazos. Sin embargo, en algunas Instituciones públicas, las mejoras son muy reducidas, donde prevalecen en la actualidad, los trámites lentos, engorrosos y una marcada duplicidad de funciones.
Administrador de Negocios