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El puente Rialto
Cruze un monumento emblemático que conecta la ciudad flotante de Italia
| Información esencial | Visítelo al atardecer para ver el canal en la puesta de sol. |
| Localización | Venecia, Italia. |
| Zona de tiempo | UTC+1 |
| Sabía que… | Tomó tres años y 250 mil ducados para construir el puente de Antonio Ponte. Antes que el Rialto fuera construido, la vía principal para cruzar el Gran Canal era en góndola. |
| Moneda | Euro |
Hoy en día, la hermosa estructura del siglo XVI de da Ponte sigue en pie y está repleta de gente que se dedica a mirar escaparates, con tiendas diseñadas para ayudar a pagar el mantenimiento del puente que venden una selección de recuerdos y joyas.
Al atardecer, el Rialto es un lugar ideal para contemplar el Gran Canal: serpenteando hacia la zona de Dorsoduro y la Giudecca por un lado, y Santa Croce y Cannaregio por el otro. Ver a los gondoleros maniobrar hábilmente con sus pasajeros entre las lanchas motoras que se acercan, con el telón de fondo de las grandiosas pero ligeramente descoloridas casas de Venecia, es una forma discreta pero satisfactoria de pasar el tiempo.
El Rialto también es espectacular desde la distancia, con su característica piedra caliza blanca que se eleva sobre el punto más estrecho del canal para conectar dos de los distritos de Venecia (San Marco y San Polo). Si se mira de cerca, se pueden ver elaboradas tallas de San Marcos, San Teodoro y el ángel Gabriel. El Rialto también está cerca de San Giacomo di Rialto, la iglesia más antigua de la ciudad, que se dice que fue consagrada en el año 421.
El puente está hecho de un solo arco de piedra sostenido por troncos clavados en el suelo. La versión de Da Ponte sustituyó al puente flotante de madera como principal punto de cruce sobre el Gran Canal y facilitó el acceso al centro financiero de la ciudad. Más cómodo que una góndola, aunque con un coste de 250 000 ducados de oro no era precisamente barato y no parece gran cosa si se compara con maravillas modernas como el puente colgante de Caanakkale en Turquía (el más largo del mundo, con 4608 metros).
Una vez que hayas admirado el Rialto, dirígete al cercano mercado de Rialto para ver la pesca veneciana del día en todo su esplendor: pulpo, calamar, gamberi y pescado de todas las formas y tamaños. Está repleto de puestos que venden fruta y verdura fresca de todo tipo a los lugareños y a los restaurantes. Si quieres llevarte la comida para llevar, vale la pena hablar con los tenderos, ya que estarán encantados de ayudarte a preparar un picnic. Hay tours gastronómicos y clases de cocina que se pueden reservar con antelación a través de agencias como tastevenice.it.
Los restaurantes alrededor del Rialto suelen ser turísticos. En su lugar, dirígete a Acqua e Mais, un local de comida callejera donde puedes comprar un cucurucho de calamares, gambas y sardinas frescas, o unas croquetas de sepia y patata a la parrilla. Sepa es una osteria de calidad con una selección de marisco, risotto y vinos y cervezas locales.
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