Lugares místicos

Cadair Idris

¿Dónde?	Snowdonia, Gales
¿Qué?	Un trono gigante, envuelto en mitos y nieblas

ESTE NO un gigante entre montañas. Una escarpada elevación de roca ígnea, que se alza entre bosques, praderas, brezales húmedos y ciénagas, Cadair Idris es solo la octava cumbre más alta de Gales, un estatus poco impresionante en un país que apenas cuenta con picos del Everest. Sin embargo, hay algo… un peso, una cualidad, una atmósfera que hace que esta pequeña colina parezca más grande que la suma de sus partes físicas. Porque si bien Cadair ldris es insignificante en el mundo de la realidad, se impone en el mundo de la leyenda…

Situado en el extremo sur del Parque Nacional de Snowdonia, cerca de la ciudad de Dolgellau, Cadair Idris está compuesto por el mismo tipo de rocas que el pico más alto de Gales, el monte Snowdon, de 1085 metros, pero es significativamente menos alto, con una altura de 893 metros. A pesar de ello, es una de las cumbres más emblemáticas del país y ha logrado colarse en numerosas historias, algunas ciertas y otras no.

Incluso su origen geológico ha sido objeto de controversia durante mucho tiempo. Algunos afirman que es el vestigio de un enorme volcán extinto, quizás el más grande de Europa en su día. Y tiene algo de eso: las rocas de Cadair Idris no solo son volcánicas, sino que se curvan y descienden, creando lo que parece una antigua caldera, rellenada por lo que parece ser un clásico lago de cráter. Pero no se trata de un supervolcán extinto. Es un paisaje erosionado durante la última Edad de Hielo; características como los circos glaciares (cuencas o hondonadas glaciares) y las rocas moutonnées (rocas de oveja) son un guiño al deslizamiento y la escultura glacial de hace milenios.

Pero quizás lo más curioso es el nombre, que se cree que significa «Silla de Idris». La montaña, con sus tres picos Pen y Gadair (Cabeza de la Silla), Cyfrwy (la Silla de Montar) y Mynydd Moel (la Montaña Desnuda), tiene un aspecto similar a un trono. Sin embargo, no se sabe exactamente quién era Idris. Hay historias que lo relacionan con un príncipe heroico de Meirionydd, que murió en batalla contra los sajones alrededor del año 630 d. C. y era considerado un «gigante» metafórico entre los hombres. Otros creen que Idris era un gigante real, uno de los cuatro que merodeaban por allí, de proporciones tan enormes que podía sentarse en la cima de esta montaña y observar todo su reino e incluso mirar hacia el cielo. Se dice que en la cima del pico hay una plataforma larga y ancha de losas de piedra que es la cama de Idris y que quien duerma en ella sufrirá uno de dos destinos: despertará como el poeta más profundo o completamente loco.

Las historias de Idris y el rey Arturo también se entrelazan. Según algunas leyendas, Arturo utilizó una vez una cadena mágica para capturar a un problemático afane (un monstruo acuático galés) y lo liberó en el remoto lago Llyn Cau, en Cadair Idris. Otras leyendas sitúan aquí figuras más temibles: dicen que Cadair ldris es el coto de caza de Gwy ap Nudd, señor de Annwn, el otro mundo celta, que lidera una jauría de fantasmales sabuesos blancos de orejas rojas en una caza salvaje para recoger almas humanas.

Hay varios senderos que suben a la montaña, para aquellos que se atreven a enfrentarse a sus oscuros misterios. El más impresionante es sin duda el sendero Minffordd, que comienza en el sur de la montaña y asciende abruptamente a través del desfiladero de Nant Cadair, donde los robles centenarios se retuercen y entrelazan, y las cascadas acarician las escarpadas paredes rocosas. El sendero rodea parcialmente el lago Llyn Cau; desde él, los visitantes pueden contemplar este profundo y oscuro abismo, supuestamente sin fondo, antes de trepar por las rocas sueltas de Craig Cau y realizar el último tramo hasta Pen y Gadair, la cima de la montaña. Desde allí, la vista puede hacerte sentir como un gigante. El resto de Snowdonia, y el propio Snowdon, se encuentran al norte; el mar de Irlanda burbujea al oeste; los Brecon Beacons se elevan al sur; y abajo hay una dispersión de grandes rocas, supuestamente arrojadas allí por el propio Idris.

Basado en Lugares Místicos de la Guía del viajero inspirado de Sarah Baxter