San José, 20 abr 2024 (News).- La fracción del Partido Liberal Progresista ha decidido votar en forma unánime por un Directorio Legislativo de oposición y sin la participación de la fracción del partido de gobierno.
La decisión responde a una enorme reflexión interna dentro de la fracción del PLP en procura de tomar una decisión que garantice agilizar la aprobación de proyectos de ley que son fundamentales para el país en este momento, incidir de manera directa en la agenda legislativa y generar los mecanismos para que esta Asamblea sea más ágil, dinámica y productiva en este tercer año.
Con la decisión de Nueva República de apoyar a Rodrigo Arias, la única forma de elegir a alguien distinto era con los votos de la fracción oficialista, y eso significaba entrar en una negociación que dijimos que no íbamos a aceptar, y menos con las constantes y continuas amenazas del Presidente y de Pilar Cisneros al Estado de Derecho.
Con los anuncios de Gilbert Jiménez, Felipe García y Vanessa Castro, Rodrigo Arias alcanzó los 30 votos para ser reelecto (necesitaba 29). Así las cosas, conversamos con él para generar el compromiso necesario que permita la aprobación de los proyectos presentados por PLP y que representan un cambio profundo y eficaz en materia de reforma del Estado, reducción de impuestos, reactivación económica y seguridad, principalmente. Proyectos como Simple I, la venta de Fanal, el cierre de Recope y el de Alianzas Público-Privadas, el proyecto para el enjuiciamiento de las causas declaradas como narcoactividad y el proyecto de ley de crimen organizado juvenil.
No aspiramos, ni propusimos, ni negociamos como fracción un puesto en el Directorio porque para el PLP lo más importante es que en este tercer año, cambie la operatividad de la Asamblea, con propuestas de las jefaturas que sean escuchadas y aceptadas por la presidencia y el directorio; con el otorgamiento de menos recesos, con la vigilancia del quorum, la activación de las comisiones plenas, y con una agenda más dinámica en las comisiones permanentes. Con el voto de nuestra fracción, tendremos la autoridad necesaria para exigir estos cambios y una mayor productividad de leyes.
Podríamos no haber ofrecido nuestros votos para el Directorio de oposición, eso lo analizamos y discutimos con mucha seriedad a lo interno de la fracción, pero eso hubiese resultado en que nuestros proyectos fueran bloqueados, mocionados y quedaran sin avance en este tercer año; significaría también que no tendríamos el espacio para presionar por el avance de los proyectos que le interesan al PLP y por los cambios que urgen en la conducción del debate legislativo para agilizarlo y minimizar la pérdida de tiempo, y seríamos una fracción sin incidencia en la agenda legislativa y sin visualización.
En esta Asamblea Legislativa, en donde ningún partido ostenta mayoría suficiente para la aprobación de proyectos, con nuestra decisión de apoyar un Directorio de oposición, estaremos facilitando el logro de consensos en temas difíciles y urgentes, porque nos mueve la urgente necesidad de construir una sociedad más justa y moderna para todos.