Lección de historia

Cuaderno de Vida

Gustavo Elizondo Fallas

Gustavo Elizondo

El diputado chavista Jorge Arturo Rojas López se presenta como educador pensionado, deducimos que era docente en alguna especialidad como artes plásticas, manualidades, orientación o similares, conste, importantes en la formación de los estudiantes, pero que no incluyen por ningún lado historia ni cívica; esa sería la explicación para justificar su ignorancia en ramas tan importantes en la formación de los párvulos.

Considerando esa falencia, nos vamos a tomar el atrevimiento de hacerle un repaso a este padre de la patria, me disculpan, me quedó en minúscula no entiendo porque, sobre Historia de Costa Rica y de principios básicos de la materia conocida como Cívica.
Le comento, don Jorge, que si bien en el logro de la independencia no hubo un enfrentamiento fratricida entre los pocos costarricenses de entonces, también es cierto que ese mismo año de la separación del Imperio Español, por medio de una Junta de Legados de los distantes pueblos del empobrecido Estado de Costa Rica, se estableció la primera constitución conocida como Pacto de Concordia, porque precisamente incluía principios que permitían los acuerdos ante las diferencias que podían surgir y en pocos años, se nombra el primer jefe de estado, por cierto, un colega suyo, el maestro Juan Mora Fernández. No se me distraiga don Jorge, que la historia sigue.

En los años 1856-57, el pueblo de Costa Rica, bajo el liderazgo de Juan Mora Porras, se organizó y expulsó de Centro América las huestes filibusteras con la desgracia que los enemigos de este caudillo, al igual que usted, tuvieron la idea de expulsarlo del territorio y luego fusilarlo cuando quiso regresar. Aclaro, usted todavía no ha hablado de fusilar a nadie, espero que no se le ocurra.

El próximo 7 de noviembre, para que lo tenga presente y a lo mejor quiera participar en su espacio de control político, se celebra el día de la democracia costarricense, porque para esa fecha, pero del año 1889, centenares de costarricenses rodearon San José para garantizar que el poder fuese entregado a quien lo había ganado en los comicios y vieras que ni a los sublevados ni a los del gobierno, los mandaron fuera del país, a pesar de sus diferencias.

Para inicios del siglo XX al presidente Ascensión Esquivel se le ocurrió que para garantizar el triunfo de don Cleto González Víquez lo mejor era mandar al exilio a sus contrincantes en una parte de la historia que a usted posiblemente le suena bonita. Unos años después la dictadura de los Tinoco, persiguió a muchos costarricense que tuvieron que huir a Panamá y a Nicaragua hasta que el régimen que posiblemente añoran ustedes los chavistas, cayó ante fuerzas internas encabezadas por los educadores, si don Jorge, por colegas suyos.

El destierro más sonado y que vino a cambiar la historia de este país fue la ocurrida en 1942 cuando don Pepe Figueres es expulsado por el gobierno de Calderón Guardia, por el mismo motivo que usted nos quiere sacar, por oponerse al gobierno. Luego de la guerra civil del 48 salieron otros distinguidos costarricenses y varios de ellos murieron lejos de la patria. Por esos lamentables hechos don Jorge, los constituyentes del 49, verdaderos Padres de la Patria, por cierto, en el artículo 32 de la Constitución dejaron claro: Ningún costarricense podrá ser compelido a abandonar el territorio nacional y desde entonces no hay un solo nacional que lo haya tenido que pasar, aunque vocifere en contra del gobierno de turno o manifieste su posición en cualquier lugar donde se encuentre.

Por eso don Jorge, no temo decir que “no más chavismo”, manifestar mis dudas de cuál es la continuidad que pretenden si no han sido capaces ni siquiera de concluir con éxito las obras que dejaron financiadas anteriores gobiernos que tanto critican, por ejemplo, su provincia, donde el proyecto Agua para Guanacaste quedó listo para ejecutar y tres años después no han dado ni una palada, decir también que su “dios” lo único que ha hecho es destilar odio entre los costarricenses. ¿Me va a expulsar del país por eso que digo?, lo reto a intentarlo y ahí veremos quien le “jala más duro el rabo a la ternera”.

PD: La lección de historia es gratis, no debe solicitar a ningún actor que la pague, con mucho gusto la asumimos.

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