Las elecciones en EE.UU. escapan a todo pronóstico

Dan La Botz

Kamala Harris

En septiembre y octubre el sureste de los EE UU se vio afectado por los huracanes Helene y Milton, cuyos fuertes vientos y lluvias torrenciales causaron enormes destrozes en viviendas y negocios, autopistas y puentes, y causaron varias víctimas. Se podría haber esperado que la sociedad se uniera ante tal desastre. Pero no.

Los huracanes, en el centro del negacionismo político… y de las teorías conspirativas

Conspiracionistas de derechas, incluida la diputada Marjorie Taylor Green, afirmaron que el gobierno estadounidense, es decir, Biden y Harris, estaba controlando el clima y utilizando la tormenta para atacar a estos Estados mayoritariamente republicanos, perturbar el voto y robarle las elecciones a Trump. Otros afirmaron que el gobierno, después de fabricar o dirigir los huracanes, planeaba apoderarse de las tierras para extraer litio. Estas teorías se han vuelto virales en las redes sociales y han dado lugar a amenazas, incluso de muerte, contra los socorristas federales y los meteorólogos que predicen el tiempo. Mientras tanto, hay gente que está de luto, otras y otros heridos, y mucha gente ya no tienen casa o electricidad, mientras Harris considera no es el momento de hablar del cambio climático.

El propio Trump afirmó que Biden y Harris habían ignorado a los Estados afectados por los huracanes, que sus gobernadores republicanos negaban que existieran, y que el gobierno federal solo daba 750 dólares a las víctimas de los desastres, lo cual es falso. [Esta ayuda] Era simplemente un primer pago de emergencia.

Trump, amenazado, recauda menos dinero que Harris

Luego está la cuestión de la seguridad. En los últimos cuatro meses, Trump ha sufrido dos intentos de asesinato, y los servicios de inteligencia estadounidenses han podido verificar que Irán tenía la intención de asesinar a Trump. Por lo tanto, es comprensible que Trump esté preocupado por su seguridad y haya exigido más protección, especialmente del Ejército estadounidense; incluso ha pedido un avión militar. Peticiones fuera de lo común para la protección de un candidato. Al mismo tiempo, Trump sugirió, y muchos de sus partidarios y partidarias aceptaron la idea, que los demócratas estaban detrás de los intentos de asesinato.

Hay informes que indican que Trump está cabreado porque sus donantes no han aportado más dinero. Harris, por su parte, está desbordante de dinero. Ha recaudado más de mil millones de dólares y parece tener más de 100 millones de dólares que Trump. El dinero se utiliza para financiar la publicidad en televisión, radio y redes sociales, personal y la actividad sobre el terreno, es decir, la captación de voto puerta a puerta.

Erosión del apoyo a Harris entre las y los votantes negros, hispanos y árabe-americanos

Sin embargo, Harris le preocupa ganarse el voto de las comunidades negra e hispana. En las últimas tres elecciones, los demócratas perdieron votantes en esas dos comunidades a favor del Partido Republicano y, en particular, de Donald Trump. Una encuesta del New York Times revela que Harris ha perdido terreno entre las y los votantes negros, en especial entre la juventud, los hombres y entre quienes no tienen un título universitario. A día de hoy, el 15% del electorado negro apoya a Trump. Harris también ha perdido terreno en el electorado hispano, cuyo 37% ahora apoya a Trump. La mayoría de las y los votantes negros e hispanos siguen apoyando a Harris, al igual que todas las organizaciones negras e hispanas importantes; sin embargo, Harris ha sufrido una grave erosión de su apoyo.

También está el problema del electorado árabe-estadounidense que se ha alejado de Harris debido a su apoyo a Israel y a su guerra genocida contra Gaza. Una encuesta realizada hace un mes entre los 206.000 electores y electoras musulmanes y árabes de Michigan reveló que el 40% prefería a la candidata del Partido Verde Jill Stein, el 18% prefería a Trump y solo el 12% prefería a Harris. Los Verdes son un partido de izquierda, pero los votos a favor de Jill Stein podrían dar lugar a que Trump saliera elegido.

Muchos de nosotros y nosotras, gentes de izquierda, tenemos dificultades para apoyar a cualquiera de los candidatos, pero muchos votaremos por Harris para impedir la victoria de Trump.

Dan La Botz, profesor, camionero, historiador y periodista, es el autor, entre otros, de What Went Wrong? The Nicaraguan Revolution: A Marxist Analysis -Qué que salió mal? La revolución nicaragüense, un análisis marxista-, Brill, Leiden 2016 y Haymarket Books, Chicago 2018. Fue cofundador de sindicato Teamsters for a Democratic Union (TDU). Militante de la organización socialista Solidaridad (sección simpatizante de la IV Internacional en Estados Unidos), también es miembro de la sección de Brooklyn de los Socialistas Democráticos de América (DSA).

l’Anticapitaliste

Traducción: F. E. pata vientosur.info

Revise también

Trump

El comunismo pro Trump se abre camino en EE. UU.

La teoría de la herradura sostiene que cuanto más radicales y extremistas sean la extrema …

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa cookies. Leer las políticas de privacidad.