Semana del 27 de ENERO al 02 de FEBRERO del 2025
Por Arturo Fournier
En el Mundo
27 de enero de 1945 (hace 80 años), en su gran avance hacia la Alemania nazista, las fuerzas soviéticas, conocidas popularmente como “el Ejército Rojo”, llegaron a encontrarse con uno de los más fuertes horrores de la IIª guerra mundial: los campos de concentración.
Ese día liberaron a 7600 prisioneros de Auschwitz (el más grande de su tipo, con 3 campos y un centro especializado en exterminio), gran parte de los cuales estaban confinados en la enfermería, en las más inhumanas, deprimentes y nefastas condiciones higiénicas y sanitarias, condenados a ser explotados en trabajos forzados o bien a ser asesinados en las cámaras de gas.
Formaba parte de un complejo enjambre (Konzentrationslager, ideados por Himmler y las SS), de lo que luego se supo que constituía un sistema de tortura, experimentación y exterminio, iniciado desde 1933 en Dachau (que sirvió de modelo) y sobre todo de 1940 a 1942, donde primero internaron a los judíos a quienes aplicaban “la solución final” (genocidio), después a comunistas, liberales, sindicalistas, integrantes de los partidos políticos opositores, a los gitanos, a los homosexuales, en fin, a cualquier persona que fuera mal vista por el régimen de Hitler.
Algo se había oído hablar en el mundo, pero ahora se llegó a descubrir la verdadera dimensión de la máquina de exterminio, de asesinato y robo, de la que Auschwitz y Birkenau eran unos de los más importantes eslabones, en donde recluyeron a miles de personas, para experimentar con ellos, despojarlos de todos sus bienes y pertenencias, liquidando la más elemental dignidad humana, para luego matarlos en masa, mediante crematorios y cámaras de gas, llegando a ejecutar impunemente hasta a 5.000 personas por día, ultimando así a más de un millón de personas, SÓLO EN ESTE LUGAR.
Hoy en día hay un espeluznante museo que nos recuerda dicho horror, para no olvidarlo jamás, localizado en Oświęcim, Polonia, a cuya entrada resalta el cínico rótulo de “la verdad os hará libres”.
Esta fecha se evoca ahora como el Día internacional en memoria a las víctimas del holocausto.
28 de enero de 1853 (hace 172 años) nace José Martí Pérez, prolífico ciudadano cubano que había estudiado en las Universidades Complutense de Madrid y en la de Zaragoza. Incursionó en los campos de la política, en la cual se destacó notablemente por ser el gran líder de la lucha por la independencia de su país, la diplomacia, escribió versos libres y poesía considerada modernista, ensayo, fue periodista y filósofo.
En Cuba ha sido considerado el héroe nacional por excelencia, por impulsar la revolución democrática y popular, en aras de independizar a las islas de Cuba, Puerto Rico y las Antillas, del dominio del imperio español, para obtener la soberanía y la libertad.
Como parte de esta gesta, también luchó fuertemente por conseguir la libertad y reivindicación de los derechos de los esclavos, de los trabajadores oprimidos, y de todas aquellas personas a las que se consideraba en vulneración de su dignidad, mediante el patriotismo, el humanismo, la justicia social, sentido del deber, del decoro, la honradez, contra el racismo.
Abrazó sus causas con abnegación y entrega. Consideraba que debía trabajarse fuertemente por la unidad y la solidaridad de toda América Latina, especialmente frente al poderoso país de norte al que calificó como “el monstruo”, porque “viví en sus entrañas”, con lo cual sus propuestas mantienen plena vigencia y actualidad.
Cuba: aniversario del Partido Revolucionario Cubano creado por Martí
Encontró la muerte el 19 de mayo de 1895 en Rio Cauto, al frente de tropas que luchaban por el ideal libertario e independentista, víctima de una emboscada, en la que recibió 3 disparos que lo hirieron mortalmente.
La independencia se logró en 1898, 3 años después.
31 de enero de 1797 (hace 228 años) nace Franz Peter Schubert, quien, aunque no es tan famoso como Wolfgang Amadeus Mozart que nació el 27 de enero de 1756, fue un destacado compositor austríaco de los inicios del romanticismo, por lo que introdujo esta importante corriente (que ya analizamos con Lord Byron) a la música, siguiendo las nuevas tendencias con la costumbre de la sonata clásica de Beethoven.
Vivió muy poco, tan sólo 31 años, pero fue tremendamente productivo y creativo, dejándonos la impresionante cantidad (y calidad) de 600 obras vocales seculares llamadas “lieder”, 7 sinfonías completas, música sacra, ópera, música incidental, así como un buen número de obras para piano y música de cámara.
Muchas de sus obras principales son altamente apreciadas; sin embargo, la más renombrada es la Sinfonía inacabada o inconclusa, ya que le sobrevino la muerte a causa de la fiebre tifoidea.
Mendelssohn, Schumann, Liszt, Brahms y otros compositores del siglo XIX, al descubrir sus obras se convirtieron en sus defensores y seguidores, lo que lo ha llevado a ser considerado uno de los mejores compositores de la música clásica.
En Costa Rica
8 de enero de 1931 (hace 94 años) muere el presidente Bernardo Soto Alfaro, quien ocupó la máxima investidura en dos ocasiones, también fue Gobernador de su Alajuela natal y Ministro (Secretario).
Al igual que muchas personas de su época, tuvo múltiples oficios y ocupaciones: finquero (en esos tiempos se denominaba “hacendado”), comerciante, abogado, militar destacado y político liberal.
Benemérito de la Patria desde el 15 mayo de 1885.
Lo recordamos fundamentalmente por haber declarado laica la enseñanza primaria, apoyado en la iniciativa y excelente gestión del gran Ministro de Educación y Hacienda, don Mauro Fernández, luego de eliminar el Concordato con la Santa Sede, a la que siguió la Ley General de Educación, vigente durante muchos años.
Uno de los hechos no muy aplaudido fue que en 1888 suprimió la Universidad de Santo Tomás, el único centro superior de enseñanza, pero, al menos aprovechó las colecciones de obras que aquélla tenía, para fundar la Biblioteca Nacional.
Muy positiva también fue la creación del Museo Nacional, el Liceo de Costa Rica, el Colegio Superior de Señoritas, la Escuela Normal, “el Asilo de Locos», la Cruz Roja, la Lotería Nacional en pro de la caridad, avanzó en la construcción del ferrocarril al Atlántico y construyó el Parque Morazán. Se aprobó el Código Civil.
Se supo rodear de los más brillantes liberales, gente muy talentosa que fue apodada “El Olimpo”.
Enfrentó con éxito la amenaza militar del presidente de Guatemala Justo Rufino Barrios, quien pretendía unificar a Centroamérica por la fuerza.
A pesar del gran poder con que contaba, así como el apoyo del ejército, al ver que el pueblo protestaba y se quejaba, con el fin de evitar enfrentamientos, más violencia y pérdida de vidas humanas, en un acto de gran valía democrática, nos dio un gran ejemplo: renunció y entregó el poder un 7 de noviembre, por lo que ese día se celebra el Día de la Democracia Costarricense.
El 31 de enero de 1938 (hace 87 años) nace un gran poeta costarricense: Jorge Debravo (Jorge Delio Bravo Brenes), en Santa Cruz de Turrialba, hijo de campesinos de muy escasos recursos económicos, lo que lo forzó a tener que trabajar desde niño, para contribuir al sostenimiento familiar.
Fue autodidacta, su padre lo llevó en forma tardía a la escuela, donde por dicha fue apoyado y estimulado por doña Teresita López de Albán, una gran maestra del sistema escolar público, y Directora de la Escuela Mixta de Santa Cruz.
Fue escritor, periodista e inspector de la Caja Costarricense del Seguro Social, después de dejar los estudios por falta de ingresos económicos; la educación la terminó a los 27 años, 2 antes de su trágica muerte, a causa de un accidente de tránsito.
Empezó a publicar sus producciones en el Periódico El Turrialbeño, desde muy joven. Dos de sus obras más renombradas (y recitadas) son: Nosotros los hombres, y Guerrilleros, todas con una honda preocupación por el deterioro social, la pobreza, la marginación, y por la carrera armamentista mundial.
Falleció sumamente joven, el 4 de agosto de 1967, a la cortísima edad de 29 años. ¡Cuántas otras maravillas literarias nos hubiera legado!, de haber llegado a la madurez personal y artística.
Esta fecha de nacimiento se declara en honor a su memoria como: Día Nacional de la Poesía.
El 02 de febrero de 1972 (hace 53 años), el Señor Vladimir Kazimirov, Embajador de la Unión Soviética entrega sus cartas credenciales, y abre la primera Embajada en Costa Rica.
La primera Sede Costarricense se abrió hasta en 1975.
– Abogado jubilado y exdiplomático.