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Carlos Revilla Maroto
En estos días se ha estado hablando del gobierno de Rodrigo Carazo (1978-1982) en Facebook. He leído comentarios muy diversos, y curiosamente la defensa de esa administración es de parte de quienes parecen ser jóvenes. En cambio las personas mayores que vivieron en esa época, son los que narran de forma negativa, lo que fue vivir en esos años.El fenómeno de un grupo de jóvenes apoyando a Carazo, tiene que ver con la idealización que se hizo de él, posterior a su paso por el Gobierno. Y también con la ideología, pues por haber expulsado del país a la misión del FMI (Fondo Monetario Internacional), se ganó un lugar entre los que creen que ejerció un acto de soberanía, y se enfrentó a uno de los instrumentos de dominación del imperio. Por eso los llamados “chancletudos” (jóvenes de izquierda, usualmente ligados al Frente Amplio) lo defienden y veneran tanto.
Ante la desinformación tan atroz, que hay entre los jóvenes, de lo que fue la administración Carazo; me pareció importante hablar un poco del tema, para tratar de poner las cosas en su lugar o verdadera dimensión; más que soy, como dice Rolando Araya, “testigo de excepción”, es decir no me lo tienen que contar, porque lo viví. En mi caso yo era apenas un muchacho saliendo de la adolescencia, en 1978 tenía 18 años, y por cierto, voté por primera vez.
En esa época mi hermano mayor estudiaba en el extranjero, y todos los meses había que enviarle dinero. No se imaginan la odisea que era conseguir los dólares necesarios. En teoría, el Banco Central daba las divisas necesarias a un tipo de cambio preferencial, pero que va, era un calvario obtenerlas, y duraban días o incluso semanas, autorizando los dólares, lo que hacía que se terminara recurriendo al mercado negro, que significaba un enorme incremento en el costo de las divisas.
Y las empresas ni se diga, conseguir dólares era casi imposible. Muchas terminaron quebrando al no poder importar la materia prima necesaria o porque sus préstamos eran en dólares. Simplemente no habían divisas. Aunque sobre esto hay historias de historias, no me voy a extender más.
Aunado a lo anterior, una inflación en el tercer año del 80%, con un aumento considerable en la pobreza y el desempleo.
Pero bueno, ante el desconocimiento, decidí hacer un «Top Ten«, una especie de lista con los más importantes factores internos negativos, que incidieron para llegar a catalogar la administración Carazo, como la peor de todos los tiempos que ha tenido Costa Rica. Si, aunque Vd. no lo crea, peor que la de Laura Chinchilla y la actual Luis Guillermo Solís, incluso hasta juntas. Para elaborarla cotejé algunos de los datos contra fuentes originales, para ser lo más preciso posible.
Factores Internos (Top Ten)
- Mantener durante dos años un tipo de cambio artificial (8,60 colones por dólar, llegó a cerca de 100 colones por dólar al final del gobierno, es decir alrededor de un ¡1.000 % de devaluación en cuatro años!). Esto no obstante haber recibido su gobierno la mayor cantidad de reservas internacionales en caja de ese momento (más de tres mil millones de dólares, dos años después las había dilapidado). Los primeros meses la cotización en el «mercado negro» del dólar llegó rápidamente a unos 60 colones, este fenómeno hizo que de la noche a la mañana muchos allegados al Gobierno se hicieran millonarios, debido a la necesidad de divisas. Las industrias prácticamente se paralizaron y muchas quebraron, especialmente la que tenía deudas en dólares o importaban materia prima. El desempleo aumentó a cerca del 10%. Hasta se vendieron las «joyas de la abuela», como se llamó irónicamente en aquel entonces, a la venta de las reservas de oro por parte del Banco Central.
- Una inflación anual cercana a los tres dígitos (80 %)
- Cesación de pagos de la deuda externa (default) y rompimiento con los organismos internacionales (FMI, BM); imposibilitando una salida a la crisis.
- Asfixia de las empresas estatales (desmantelamiento de CODESA), siguiendo una política de partido (ideológica). Dentro de esta, la casi desaparición del ICE y la Caja por la crisis.
- Un enfrentamiento social como nunca antes visto en sus primeros dos años de gobierno. La Ministra de Trabajo era la señora Estela Quesada, conocida reaccionaria y representante de la ultraderecha de este país; lo único que hizo fue volarle garrote a los trabajadores; por ejemplo una huelga bananera en el sur del país duro más de tres meses ante la intransigencia del gobierno a negociar. Esto a la postre hizo que la empresa bananera se fuera de la zona sur, con las consecuencias sociales que eso produjo, y que aún persisten en alguna medida.
- Coalición «multicolor» que armó para las elecciones de 1978, con claro tinte neoliberal, para oponerse al PLN. Como recordatorio de esto, Rafael Angel Calderón Fournier fue su Ministro de Relaciones Exteriores los dos primeros años de su gobierno. Se alió con lo más repudiable de la derecha y extrema derecha del país en ese entonces.
- Se peleó con todo mundo incluida la Asamblea Legislativa (donde tenía mayoría), lo que hizo que posibles leyes para ayudar a salir de la crisis no «pasaran».
- Varios escándalos de corrupción (venta de la Finca La Verbena en Alajuelita, por ejemplo). Aunado a esto el negar su firma en un documento (las pruebas grafoscópicas demostraron que era su firma). El trasiego de armas que denunció Fernando Trejos. Ridículo internacional de Costa Rica por negar la ayuda al movimiento sandinista y luego vanagloriarse de la ayuda dada; Costa Rica dejó de ser tomada con seriedad en el ámbito internacional. En el Gobierno de Luis Alberto se tuvo que hacer la «Misión Verdad» en Europa, para contrarrestar los efectos negativos de las mentiras del Gobierno de Carazo.
- El índice de pobreza creció a más del 50%.
- Sus colaboradores cercanos le decían «Maestro». Recuerdo la aventura de las perforaciones petroleras, donde el Vicepresidente dijo que tenía certeza moral de que había petróleo. ¡Lo increíble es que de Expresidente se opuso a las perforaciones petroleras!
También, sobre este mismo tema, recomiendo el libro “Evitemos que nos devuelvan un país en escombros” de Daniel Oduber Quirós, que recoge una serie de artículos que el Expresidente publicó en el año 1980. Son consideraciones y análisis de tipo económico y político a la gestión de gobierno del presidente Carazo, señalando las causas del deterioro económico como una amenaza institucional, es decir, como una amenaza para la democracia costarricense. El libro desmitifica la creencia de que los problemas económicos de esa época se debieron a factores externos, y que fueron simplemente errores garrafales, cometidos únicamente por Carazo y sus allegados, que aunados con otros factores, hicieron algo así como un cóctel molotov económico, que casi nos lleva a la ruina. El libro mencionado se puede conseguir aquí, en formato pdf.
Y podría seguir escribiendo mucho más del tema, pero por el momento lo dejo aquí.
Poco parecido al segundo mandato de Oscar Arias Sánchez,