Dime de que presumes y te diré de lo que careces

A propósito de Rodrigo Chaves

Jaime Ubilla Carro

Jaime Ubilla

Las expresiones de Rodrigo Chaves sobre su paso por la Universidad de Costa Rica no son de recibo. Contaré mi experiencia.

Estuve en política universitaria, fui miembro del directorio de la Asociación de Estudiantes de Estudios Generales; en el directorio de su Federación de Estudiantes cuando Antonio Álvarez la presidio; para luego ser Presidente de la Asociación de Estudiantes de Ciencias Económicas y de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Costa Rica.

Fue una época riquísima en pensamiento ideológico; la academia vigorosa; la vida social intensa. Mi Universidad enriqueció mi perspectiva de la vida de manera amplia, y aprendí que nuestra sociedad es el resultado de consensos y no de fracturas sociales o políticas como las que promueve el advenedizo candidato. También en esos tiempos trabaje en el Banco Central y en el Ministerio de Cultura. Obtuve el bachillerato y me egresé de la Escuela de Economía de la Universidad de Costa Rica. Luego obtuve mi posgrado en finanzas en el Instituto Tecnológico de Costa Rica, del cual fui profesor por tres años impartiendo finanzas.

Estudie y participé en política estudiantil universitaria; me egrese con mucho esfuerzo porque trabaje siendo estudiante. Decidí graduarme a través de la persistencia, consistencia, dedicación, compromiso.

Recuerdo la expresión que le di a una profesora de la Escuela: me graduare de economía aunque sea lo último que haga en mi vida. Y así fue. Me gradué y el posgrado lo hice con honores. Luego hice una carrera bancaria y bursátil de la que me siento orgulloso.

Tuve en las universidades a las que asistí profesores de primerísimo nivel, muchos de los cuales reconfiguraron la economía de este país luego de las crisis de los años 80. ¡Cualquier Universidad norteamericana se hubiese deseado ese profesorado!

Uno de los aspectos que aprendí también fue la humildad. Ninguno de mis profesores expresaba que era Doctor en esto o aquello. Sus conocimientos revelaban la formación pero sobre todo la madurez intelectual, que en el caso del señor Chaves es imposible encontrar.

No puedo imaginarme como será posible investirlo con la más alta magistratura: la Presidencia de la Republica, pues su bajeza no tiene límites, ya que ha sido el insulto su arma política; el cabreo su mensaje; la ausencia de entendimiento de nuestra realidad su práctica. Cómo construir los consensos sociales en el Ejecutivo cuando en campaña eso ha estado ausente. No entiendo como don Jack Loeb y Arnoldo Andre pudieron brindar apoyo a este individuo. Me da mucha tristeza por ellos.

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