De la patria por nuestra voluntad

Efrén Arauz C.

Se celebra en estos días el 193 aniversario de la Anexión del Partido de Nicoya, territorio libre e independiente, a Costa Rica.

Días de reflexión, días de proyección futura, días de esperanza… ¿qué hemos sido y que no, qué hemos hecho y que no…? desde las polvorientas y pastoriles pampas de los años cuarenta hemos mejorado, hemos crecido, hemos prosperado, gracias al apoyo del Gobierno Central, pero hoy por hoy sin no empujamos la carreta hacia adelante los logros alcanzados se nos puede venir abajo. El desarrollo se ha concentrado nuevamente en la meseta central y se ha olvidado de las zonas rurales, de las regiones periféricas del país, siendo todos parte de ella y por ende iguales ante la ley, esto no puede seguir así…

Tres problemas y tres soluciones, sin considerar los problemas de desempleo, salud, vivienda y educación, que conllevan a pobreza e inseguridad: Llevamos cuarenta años, al igual que las carreteras de este país, que el problema del agua no se atiende, por ahora tenemos lluvia por las ondas tropicales, no por la regularidad del invierno, los canales de irrigación del embalse del Arenal están inconclusos, se desperdicia el agua al igual que los cauces de los ríos grandes que desembocan en el Golfo y no se aprovechan, como lo hacen los países ricos, y el problema de la desalinización del agua marina sigue siendo una ilusión futura… sin agua permanente no hay siembras, no hay cosechas, no hay comida…por eso y por otros factores como los costos de producción la estamos importando sin considerar a miles de pequeños y medianos productores que no tienen otras opciones. Esto, genera desempleo y pobreza. Esto no puede seguir así….

El problema de la ganadería tampoco se ha resuelto, seguimos viviendo la edad media con ganadería extensiva en vez de pasar a la ganadería intensiva y estabulada, urgen técnicas, asesorías, créditos con bajos intereses y es menester incorporar a la producción a los pequeños propietarios de fincas con el desarrollo de especies menores, con esto se reduce el desempleo y la pobreza… Esto tampoco puede seguir así.

Finalmente, tenemos la materia prima para ser una potencia en materia turística a nivel latinoamericano, mas no tenemos la infraestructura adecuada, la atención es mala, urge la capacitación- con INAS, diurnos y nocturnos- los precios son los más elevados de toda el área y solo se han beneficiado los grandes hoteles. ¿Y el turismo náutico, el agroturismo y el turismo minero? ¿Qué pasa con el turismo nacional, acaso no tenemos derecho todos a disfrutar de nuestras playas y montañas, las más preciosas de la región, a precios razonables?

Si, todo esto no puede seguir así, si no hay apoyo del Gobierno Central y los guanacastecos no escogemos a nuestros mejores hombres y mujeres para dirigir nuestros destinos a todo nivel, muy pronto no podremos decir con orgullo y patriotismo… De la patria por nuestra voluntad…

– Abogado