San José, 03 de julio, 2020 (CPNews).- Tras varios análisis de viabilidad y como resultado de la entrada en vigencia de los nuevos topes a las tasas de interés para las operaciones financieras, comerciales y de microcréditos, ayer jueves el banco BAC Credomatic anunció la eliminación de 187.526 tarjetas de crédito a 79.789 clientes, cuyas operaciones se vuelven deficitarias para la empresa.
Asimismo informaron el despido de 373 colaboradores directos y al cierre de 11 sucursales durante estos días.
Ante este anuncio, algunos expertos en materia financiera y un expresidente de la República externaron sus puntos de vista, parte de los cuales transcribimos en esta información.
José María Figueres. El exmandatario de la República, José María Figueres Olsen, comentó que leer la noticia sobre el BAC le recordó que “don Pepe”, su padre, nacionalizó los bancos luego de la Revolución del 48. “Me dirá usted: eran otros tiempos. Sí, es cierto, pero pareciera que regresan en más de un sentido”, dijo.
Agregó que en medio de la “peor crisis” que hemos experimentado, con el COVID-19 galopante y 600,000 personas sin trabajo, “el BAC nos muestra su solidaridad despidiendo a 373 de sus colaboradores porque suprimirá 187,526 tarjetas de crédito a 79,789 clientes”.
A su juicio, a las autoridades de esa entidad no les da vergüenza decir que han adoptado estas medidas debido a la aprobación de la ley contra la usura. “En otras palabras debemos interpretar que sólo con intereses de garrotera eran rentables estos clientes. Y si estos 79,789 clientes eran tan riesgosos y malos que ahora hay que quitarlos, ¿por qué les dieron 187,526 tarjetas, o sea más de dos tarjetas por cliente? ¿No será más bien que la ley de usura es la excusa, y la verdadera razón es la crisis misma que obliga al BAC a recoger velas?, se preguntó Figueres al sentenciar que a su criterio “hoy el BAC con su accionar, se apuntó al lado equivocado de la historia”.
Bernal Jiménez Monge. El economista Bernal Jiménez Monge , quien fungiera como ex presidente de la Junta Directiva del Banco Central en la segunda presidencia de José Figueres Ferrer y continuó en el cargo bajo la administración de Daniel Oduber Quirós, manifestó coincidir con las apreciaciones del expresidente José María Figueres admitiendo que la decisión del BAC “prueba que no se tiene el menor sentido de solidaridad por parte del banco, y que solo funciona con las tarjetas de crédito, cuando cobra intereses agiotistas del 60%”
Agregó Jiménez que no está siguiendo el BAC el ejemplo de importantes Bancos del mundo, que ante la pandemia han puesto en práctica programas de alivio para sus clientes, con bajas tasas en los préstamos, haciendo readecuaciones y programando cero utilidades, u obteniendo muy pequeños resultados.
“Es inaceptable que el más grande banco privado del país, que por años ha aprovechado el negocio de tarjetas, proceda de una manera tan insensible y sin la menor solidaridad con la sociedad costarricense en momentos de crisis nacional” puntualizó Jiménez Monge.
Gerardo Corrales Brenes. El economista Gerardo Corrales, quien ha sido banquero por más de 25 años y ex gerente general del BAC comentó a la prensa que esta ha sido la crónica de una muerte anunciada “donde algunos, incluyendo al Banco Central, al Conassif y la Sugef, advertimos que la fijación o control de tasas de intereses genera exclusión financiera, o sea que iba a sacar del mercado formal a 150.000 clientes de tarjetas y van a tenerse que financiar a la informalidad con tasas de interés más alta”.
William Hayden Quintero. El economista, administrador, matemático y estadístico William Hayden Quintero, quien fuera Gerente del Banco Nacional de Costa Rica, aseguró que en el futuro los bancos privados que han descansado en las tarjetas de crédito como su fuente principal de negocios se verán seriamente afectados pues ya no podrán cobrar a sus clientes tasas de más del 50%.
“Estos bancos, como es el caso específico del BAC Credomatic, tendrán que reinventarse y buscar otros nichos de negocios que no les serán tan rentables. Es decir, perderán rentabilidad y tendrán que achicarse, despidiendo empleados, cerrar sucursales, uso de tecnologías digitales, desechar líneas de negocios poco rentables y reducir salarios)
A su juicio, los efectos de la pandemia y las medidas insensatas del gobierno en lo económico los están afectando seriamente “por lo que podríamos estar a las puertas en este segundo semestre del año de entrar en una crisis global del sector financiero”.
Para Hayden lo sucedido en el BAC San José “es una peligrosa señal de alerta”.