La Haya, 30 abr (dpa) – La Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya rechazó hoy un procedimiento de urgencia presentado por Nicaragua que buscaba impedir que Alemania siguiera vendiendo armas a Israel en el contexto de la guerra en la Franja de Gaza.
Al hacerlo, los jueces del tribunal de la ONU dejaron claro que no hay motivos para imponer las medidas inmediatas exigidas por Nicaragua contra Alemania «sobre la base de la información fáctica y los argumentos jurídicos».
Sin embargo, los jueces no estuvieron de acuerdo con la petición de Alemania de que la demanda de Nicaragua fuera desestimada en su totalidad. Solo se pronunciaron sobre la cuestión de urgencia.
El procedimiento principal puede prolongarse durante años, y las decisiones del tribunal son vinculantes.
Nicaragua acusó a Alemania ante la CIJ de complicidad por suministrar armas a Israel en el que el país centroamericano considera genocidio de la Franja de Gaza.
En su demanda presentada el 1 de marzo, Nicaragua argumentó que, al proporcionar apoyo político, financiero y militar a Israel y en cambio retirar su apoyo a la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), «Alemania está facilitando que se cometa genocidio y, en cualquier caso, ha incumplido su obligación de hacer todo lo posible para impedir que se cometa genocidio».
Los representantes legales alemanes acogieron con satisfacción la decisión de hoy. «Nos alegramos de que nuestros argumentos hayan podido convencer al tribunal», declaró Tania von Uslar-Gleichen, jefa de la delegación germana.
Nicaragua había llevado a Alemania ante el tribunal por complicidad para cometer genocidio y, al mismo tiempo, había presentado el recurso urgente. Berlín rechaza la denuncia, que califica de infundada.
Este es ya el segundo caso por presunto genocidio en la guerra de Gaza que se presenta ante la CIJ. A finales de 2023, Sudáfrica demandó a Israel y exigió un alto el fuego inmediato. Los jueces no estuvieron de acuerdo, pero amonestaron a Israel y le pidieron hacer todo lo posible para evitar un genocidio.
Israel ha rechazado reiteradamente las acusaciones. Tras las matanzas perpetradas por la organización islamista Hamás y otras organizaciones extremistas palestinas el 7 de octubre de 2023, el país invocó el derecho a la legítima defensa.
Nicaragua había alegado que Alemania autorizó el año pasado entregas de armas a Israel por valor de 326,5 millones de euros (350 millones de dólares), diez veces más que el año anterior. Sin embargo, según los jueces, la parte alemana explicó de forma plausible que el 98 por ciento de esa cantidad correspondía únicamente a armamento general, como cascos o chalecos protectores, y no a armas de guerra.
La CIJ también rechazó la acusación de que Alemania había dejado en suspenso la ayuda a la UNRWA, violando así el derecho humanitario. Hace unos días, el Gobierno alemán informó que planea reanudar su cooperación con la agencia tras la publicación de un informe sobre la gestión del organismo.
El país centroamericano, que a su vez está sometido a escrutinio internacional por violaciones de los derechos humanos, invoca la Convención sobre el Genocidio de 1948, en virtud de la cual los Estados firmantes se comprometen a hacer todo lo que esté en sus manos para impedir este crimen. Esto significa que terceros países también pueden exigir responsabilidades a otros.
A principios de mes, Nicaragua cerró su embajada en Berlín debido a la demanda.
Alrededor de 1.200 personas murieron en las masacres del 7 de octubre y más de 250 fueron tomadas como rehenes en la Franja de Gaza. Según las autoridades sanitarias controladas por Hamás, unas 34.500 personas murieron hasta el momento en los ataques israelíes posteriores.