Anecdotario Nacional

Anecdotario Nacional

DURANTE la Administración del Generar don Tomás Guardia, un militar de su confianza e intimidad y cariño toma uno de sus caballos de la cuadra del señor Presidente de la República, lo monta y desafortunadamente al sufrir una caída lo mancó.

A su regreso a la Caballeriza Nacional, busca al General Guardia y le dice:

—“Quiero hablar con el caballero, con el hombre bondadoso, con el amigo de todo mi aprecio, para explicarle el percance ocurrido y pedirle perdón”.

Después de haberlo escuchado, don Tomás, bastante molesto, le responde:

—“Lleve inmediatamente a curar el caballo y que no lo sepa el señor Presidente de la República porque lo manda a fusilar enseguida”…

Tomado del Anecdotario Nacional de Carlos Fernández Mora. Dibujos de Noé Solano. Usado con autorización.

Revise también

Abidos

Lugares sagrados

Abidos │ Abidos, Egipto El templo de Osiris, amo del juicio de los difuntos, convirtió …

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *