De pronto, se abre la puerta del despacho y un ayudante militar (Edecán), le dice al Presidente:
—“Don Ricardo: Jesús Bonilla desea verlo”.
Una vez frente al Licenciado Jiménez, el señor Bonilla, después de saludar al señor Presidente, pasó a expresarle sus deseos, pero el señor Casorla que conocía a don Jesús y era su amigo, le dice:
—“Dígame, Jesús, ¿cuántos hijos tiene usted ahora?”.
—“Nueve hijos”.
El Licenciado Casorla, no satisfecho con la respuesta, vuelve de nuevo a preguntarle:
—“¿Y por fuera, Bonilla?”.
—¡NINGUNO!…
Entonces, interviene el señor Presidente de la República y dice, sonriendo maliciosamente:
—“Es que la señora, sin duda alguna, no le dio tiempo a Jesús” …
Tomado del Anecdotario Nacional de Carlos Fernández Mora. Dibujos de Noé Solano. Usado con autorización.