Cuando el siempre recordado don Cleto González Víquez, justamente llamado el «padre de la democracia» gobernó a Costa Rica en su primer periodo, el cuerpo diplomático en asocio de nuestro mundo social, le ofreció al gobernante un pic nic en la hacienda Herrán propiedad de don Juanito Montealegre. A esta fiesta campestre asistieron los señores miembros del gabinete, los diplomáticos y cónsules, los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, altas autoridades de la República y elementos de la sociedad.
Después del refrigerio que lo sirvieron a la orilla de un río, a uno de los señores diplomáticos se le ocurrió que los allí presentes practicaran el tiro al blanco. La idea fue bien acogida por todos.
Pero es lo cierto que cuando se disponían a salir, alguien preguntó:
«¿Quién de ustedes tiene revólver?»
-«¡¡¡NINGUNO!!!»
Tomado del Anecdotario Nacional de Carlos Fernández Mora.
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