EL MAESTRO Ornar Dengo, la figura más interesante de la pedagogía costarricense, dedicó la mayor parte de su vida a educar jóvenes.
Fue Director de la Escuela Normal de Heredia y allí desarrolló su gran labor cultural y pedagógica.
En alguna oportunidad, nuestro brillante escritor, que fuera Director de «La Información», don Modesto Martínez, se encuentra incidentalmente con el Maestro Dengo, y al saludarlo con cariño y admiración, le hizo la siguiente pregunta:
—»Don Ornar: ¿cómo definiría usted el humor y la imaginación?»
Y el gran pensador, acostumbrado a recibir esta clase de interesantes preguntas de sus discípulos, le responde a su amigo Martínez:
—»La imaginación consuela a los hombres de lo que no pueden ser; y el humor los consuela de lo que son»…