CORRIDOS Y SINFONÍAS
LAS Las versiones sobre los gustos musicales de don Pepe son contradictorias. Algunos, como don Guido Sáenz, aseguran que la música clásica era su preferida. Otros más bien se inclinan por las canciones populares y hasta por la música ranchera.En ocasiones, Figueres recordaba una tonada ranchera que había aprendido en 1920 y que aún lo hacía vibrar «Un tímido pajarillo una noche, llegose a refugiar en mi ventana…».
Otra vez, don Pepe confesó que había visto incontables veces la película «Allá en el Rancho Grande» y que se sabía completa la pieza «Tu ya no soplas como mujer».
«Yo estoy seguro que entre un buen corrido de la Revolución mexicana y las Cuatro Estaciones de Vivaldi, don Pepe se quedaría con el corrido», insiste Guillermo Villegas.
Anécdota de Alberto Cañas
Tomado del Anecdotario del elespiritudel48.org