Dino Starcevic
El Plan de Gobierno 2.0 de Restauración Nacional (cuya sola denominación debería enfurecernos, y si no al menos alarmarnos) sirve quizá para que nuevamente prestemos atención al peligro que se cierne sobre Costa Rica.
En términos generales, nos indica que la libertad, en casi todas sus formas, dejará de existir. Esto no es una exageración. Es complicado que lo logren de entrada, pero el proyecto teocrático es absolutamente claro.
El plan de RN busca que tanto la vida pública como la vida privada se rijan según el cristianismo. Pero no cualquier cristianismo, sino solamente el de este grupo religioso en particular. Es decir, adiós a la libertad de culto y la vida personal.
El plan de RN indica que no existe la diversidad sexual. No la van a aceptar y quienes sean diferentes deberán ser “restaurados”. Adiós a la libertad del propio cuerpo y de nuevo a la vida privada.
El plan de RN supone que la mujer puede acceder a la equidad siempre y cuando lo haga dentro de una familia tradicional y no busque reivindicaciones mayores. Adiós a la libertad de las mujeres y a sus derechos.
El plan de RN propone crear un departamento especial, junto con la DIS, dirigido por el presidente, donde los funcionarios pueden denunciar anónimamente a sus compañeros. Nada más parecido a los regímenes totalitarios, donde se presiona al ciudadano para que acuse a su vecino cuando este no sigue la doctrina del partido. Adiós a la libertad individual y al derecho a la paz y a no ser acosados en el trabajo.
El plan de RN establecerá mecanismos para censurar las obras artísticas o limitar la libertad de cátedra en las universidades. Adiós a la libertad de expresión.
Estos son solo algunos puntos, pero suficientes para mostrar la oscura amenaza que vivimos hoy. La retórica de la “restauración” y de “guerra espiritual” permean todo el discurso. La única libertad que no se verá limitada sino más bien incentivada será la libertad de mercado, para que cada quien se lance a buscar las migajas sin que le importen los demás. El gobierno de RN será solo para hombres y siervas heterosexuales y neopentecostales y dejará por fuera al resto de la población.
Si no despertamos antes del 1 de abril, ya luego será muy tarde. La libertad está en peligro. El fundamentalismo religioso y las posturas más reaccionarias intentarán adueñarse de todos los espacios de nuestra vida. Las peores distopías se harían realidad.
Gente, estamos a tiempo. Somos muchas. Somos muchos. Es por Costa Rica. Es por la libertad.