Vía costarricense
Johnny Soto Zúñiga
En estos días en París, Francia se está llevando la Cumbre Mundial sobre Cambio Climático COP 21, con el objetivo de que se dé un definitivo compromiso para la reducción de emisiones contaminantes a la atmosfera a partir del año 2020. La participación de 40.000 delegados de alrededor de 195 países debaten en esta 21° Conferencia Climática de Naciones Unidas, lo que ha convertido a París en la atención del mundo, a tres semanas después de los terribles atentados terroristas que dejaron 130 muertos y muchos heridos. La solidaridad de la mayoría de países con Francia ha sido determinante y a pesar de estos atentados, la participación a esta conferencia ha tenido todo el apoyo de las organizaciones y han llegado 150 Jefes de Estado a un centro de conferencias cerca del aeropuerto de La Bourget en las afueras de París. Al inicio de la conferencia se guardó un minuto de silencio en solidaridad por las víctimas.
Son dos semanas de intenso debate sobre el cambio climático, el medio ambiente y el desarrollo sostenible, y el fin es: “El Acuerdo Universal sobre el cambio climático, que se pretende cerrar en París tiene como objetivo principal limitar el aumento de la temperatura global en menos de 2°C.”; anteriormente esto se ha malogrado por que las grandes potencias y algunos países desarrollados causantes de la mayoría de las emisiones contaminantes no han ratificado la Conferencia de Copenhague del 2009 , por lo que siguió vigente el Protocolo de Kioto que venció en el 2012; todo esto marcaba un recorte de las emisiones de CO2 del 15% para los países que firmaran y ratificaran. Desde 1972 en la Conferencia sobre el Medio Ambiente en Estocolmo y la Conferencia sobre el Medio Ambiente y el desarrollo en Río de Janeiro del 3 al 4 de junio de 1992; las Naciones Unidas han tenido preocupación por el tema ambiental.
La Declaración de Río de 1992 establecía lo siguiente: “Con el objetivo de establecer una coparticipación mundial sobre una base nueva y equitativa creando niveles de cooperación nuevos entre los Estados, los sectores claves de la sociedad y los pueblos. Obrando con miras a acuerdos internacionales que respeten los intereses de todos y protejan la integridad del sistema mundial del medio ambiente y el desarrollo.” El planeta Tierra es de todos, es el hogar de la humanidad, y con el desarrollo sostenible todos tenemos derecho a una vida sana y productiva en armonía con la naturaleza (Recordemos la Encíclica Laudato Sí del Papa Francisco de que el planeta tierra es nuestra “Casa Común”). El resultado final de cualquier cumbre o conferencia debe hacerse a favor del ser humano y por supuesto los Estados deben acercarse a todos los actores de la sociedad civil, la participación ciudadana, organizaciones privadas en conjunto con las instituciones públicas. Todos debemos colaborar en la lucha por preservar un medio ambiente con desarrollo sostenible.
Para el 11 de diciembre se dará la clausura de esta “Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP 21” (CMNUCC) en París; y los ojos del mundo están a la espera de que esta vez sí sea la definitiva y se logre el tan esperado acuerdo o tratado universal de reducción de gases de efecto invernadero y así evitar que siga el recalentamiento en todo el planeta. Este acuerdo global entraría en vigencia en el año 2020. En todo el mundo se han efectuado marchas en contra del calentamiento global y la contaminación en todos los países; en alrededor de 2300 ciudades y más de 700.000 personas han marchado para exigir acuerdos de frenar el cambio climático y hacer conciencia en las sociedades de que se apruebe un acuerdo mundial por parte de los 195 países miembros de la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático COP21.
Por su parte, S. Fitzgerarld Haney embajador de Estados Unidos en nuestro país afirma que: “Costa Rica ha sido líder en la conservación del ambiente y Estados Unidos se enorgullece de ser su aliado en varias iniciativas para preservar su biodiversidad. Aplaudimos la protección que da a su riqueza paisajística y su estatus de líder mundial en ecoturismo, atrayendo así millones de visitantes y generando miles de empleos. Hemos aprendido del sistema de pago por servicios ambientales, del cual Costa Rica fue pionera, para financiar la conservación y contribuir al crecimiento económico. Compartimos las lecciones aprendidas para disminuir las emisiones de carbono al colaborar con organizaciones no gubernamentales y comunidades locales en temas de adaptación al cambio climático, y al ayudar al Gobierno y al sector privado con estrategias para reducir las emisiones de los sectores agrícolas y de transporte, promoviendo la reforestación y fomentando el crecimiento verde.” (Artículo publicado en la Nación. 4-12-2015)
Dos costarricenses y hermanos están participando de forma destacada en la Cumbre en París: Christiana Figueres Olsen quién funge como Secretaria Ejecutiva de la Convención sobre Cambio Climático desde el año 2010, y el Ex Presidente de la República José María Figueres Olsen, actual Presidente del Partido Liberación Nacional y un líder mundial destacado en materia de desarrollo sostenible y medio ambiente. En el caso de Christiana Figueres ha afirmado que tiene la esperanza de que esta Cumbre no sea un fracaso como la de Copenhague y que efectivamente ésta venga a sustituir el Protocolo de Kioto y señala que: “Se está definiendo la transformación de la economía mundial y esta va a tener un efecto directo sobre la calidad de vida de cada ciudadano en cada país, en esta generación, y sobre todo, en las generaciones futuras.”
El Ex Presidente de la República José María Figueres Olsen tiene una larga trayectoria a favor de las políticas ambientales, incluso durante su gobierno (1994-1998), se ratificó el Protocolo de Kioto y se aprobaron las Convenciones Internacionales de Biodiversidad y de Cambio Climático, así como las limitaciones a las emisiones de CO2. José María es un experto reconocido mundialmente en materia de desarrollo sostenible y estas causas ambientales, lo que lo hace una voz autorizada en los organismos en que ha participado, así como en las distintas cumbres y conferencias a nivel internacional; ésta en París no podía ser la excepción y participo en la firma de la Declaración Because The Ocean, en el Marco de COP21 señala que: “El océano nos brinda el 50% del oxígeno y absorbe el 25% de las emisiones de dióxido de carbono. Sin su protección, no hay soluciones para el cambio climático.”
Finalmente, considero que no es por casualidad que dos hijos del Caudillo costarricense don José Figueres Ferrer, sean personajes destacados a nivel mundial, cuando don Pepe fue visionario en la protección del ambiente, como agricultor creía en la naturaleza y la calidad de vida; los gobiernos liberacionistas siguieron su visión sobre arboricultura, la reforestación y paisajismo. Expresaba que: “Para convertirnos en un país arboricultor eficiente, necesitamos todo un nuevo enfoque del cultivo del árbol y del ambiente. Nuestra actividad de producir madera, repito debe ser agrícola, y no forestal.” La protección de parques y reservas nacionales ha sido una constante; y el ex Presidente Daniel Oduber (1974-1978) impulsó la política de protección de los parques nacionales y actualmente, un gran porcentaje de nuestro territorio está protegido y aportamos oxigeno al mundo. Estamos con la Costa Rica Verde y con la esperanza de que la Cumbre de París adopte y ratifique las medidas globales (avance aprobando el CO1.5) contra el cambio climático, la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y frenar el recalentamiento del planeta y sus consecuencias: sobre el ambiente, la calidad de vida, la salud y los ciudadanos de todos los países del mundo.