Algunas preguntas y respuestas sobre el ICE

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Carlos Revilla M.
crevilla@cambiopolitico.com

Recientemente tuve un intercambio por correo con un amigo sobre el tema Instituto Costarricense de Electricidad (ICE). Él me hacía varias preguntas, especialmente sobre el sector electricidad, del que no no soy un experto, pero algo se del tema y al contestarle las preguntas, me di cuenta, que el tema que estábamos tratando es muy importante, así que decidí compartirlo con los lectores de mi columna.

El intercambio fue un poco de todo, con preguntas que creo todos nos hemos hecho en algún momento. Me gustaría decir que mis respuestas no necesariamente son «las respuestas». Al fin y al cabo es mi opinión que la baso en algunos datos que conozco.

Esto fue parte del intercambio:

– Carlos, una pregunta: ¿porqué el ICE durante todo este tiempo ha preferido «quemar» combustible, que comprar lo generado por los privados en sus «miniproyectos limpios»?

No es que haya preferido, es que simplemente no tenía opción. Por problemas legales que no tenían nada que ver con el ICE, vencieron la concesiones para el uso del agua de casi todos los generadores privados.  Esto imposibilitó al ICE de poder comprarles la electricidad. Hasta hace poco se solucionó el problema, de ahí que de nuevo el ICE negocia con ellos, y el resultado de ellos son los nuevos contratos de los que se informó hace pocos días.

Las plantas que quedaron funcionando operan a «filo de agua», es decir sin embalse, por lo que una sequía o bajas lluvias como las actuales prácticamente las sacan de poder generar.

Además el tema del precio de compara del ICE es muy importante. Muchos generadores privados hicieron clavos de oro en el pasado a costa del ICE, que estaba obligado contractualmente a pagarles sumas altísimas, claramente ruinosas, y que al final repercutieron negativamente en la finanzas de la institución. Esto no podía podía repetirse.

Así que la «quema» de combustible no ha sido por capricho. Para esto han incidido varios factores, algunos reprochables al propio ICE, pero la mayoría fueron factores externos que no podía controlar. Uno de esos factores fue la sequía que bajo drásticamente el nivel de los embalses y obligó a utilizar las plantas térmicas, y por ende a «quemar» combustible».

– Otra, me dicen que el nuevo Estadio Nacional funciona quemando BUNKER (que es terriblemente más contaminante), en lugar de usar electricidad, porque la electricidad es CARÍSIMA (me citan unos 5 millones de colones por partido o espectáculo, si usaran la electricidad que les vende el ICE; ¿porqué?  No entiendo.

No, el asunto del Estadio Nacional no tiene nada que ver con el precio de la electricidad, que de todas formas es la CNFL quien la vende (esto parece solo un detalle, pero es importante, porque se manejan tarifas diferentes entre la CNFL y el ICE).

El asunto del estadio es (fue) un problema de los chinos, que dejaron los manuales de operación y mantenimiento del estadio ¡en Chino! y créanlo o no, debido a esto no podían entender que había que hacer para conectarse debidamente a la red de distribución eléctrica, por lo que optaban por usar las plantas de bunker para evitar los apagones que se habían vuelto frecuentes. Tengo entendido que un técnico chino está por llegar en las próximas semanas para arreglar definitivamente el problema.

– La industria nacional se desarrolló y ha desarrollado, gracias al acceso a electriciad en las épocas gloriosas del ICE y a precios «razonables»; hoy, muchas están en peligro por las elevadísimas tarifas.

En este tema me parece que los políticos están (estaban) matando a la gallina de los huevos de oro, que es el ICE. Casi la asfixian, la obligaban a comprarle bonos al Estado, con lo que le quitaban margen de acción. También lo obligaron a firmar contratos leoninos con los generadores privados, por lo que le hicieron incurrir en pérdidas multimillonarias, que al final pagamos todos nosotros vía tarifas.

Le negaron por mucho tiempo el acceso al crédito para poder expandirse, le pusieron amarras por todo lado (todavía se mantienen algunas). Lo obligan a entregar bandas para celular y no le pagan el costo de la «limpieza», y un enorme etcétera de zancadillas, las últimas de la flamante Sutel (ver mi columna «Como matar el ICE a pellizcos«).

Todo esto fue minando a la institución, a pesar de los esfuerzos de sus empleados, que hay que reconocer mantienen todavía una gran mística de trabajo y de cumplimiento de los objetivos de desarrollo con la sociedad costarricense. Esto no ha sido nada fácil, pues hay sectores que quieren que la institución desaparezca con quien sabe que oscuras intenciones.

Sin embargo hay señales de una recuperación en sus finanzas (ver De “paciente delicado” a un ICE en la búsqueda de la eficiencia). En el 2011 el ICE tuvo pérdidas operativas por 22 mil millones de colones. Después de ajustes importantes, terminó el 2012 con una ganancia modesta de diez mil millones y con un crecimiento del 3% en el área de telecomunicaciones, que es la parte del negocio más complicada, pues es donde el ICE tiene una feroz competencia.

Los jerarcas del ICE estiman que ya para el 2013 se empezarán a obtener utilidades del orden de los 50 mil millones anuales e incluso podrían ser más. Es importante mencionar que en situación de monopolio el ICE llegó a obtener excedentes de hasta cien mil millones anuales.

¿Qué significa todo esto? Que no van a acabar tan fácilmente con el ICE. Hay una lealtad muy grande hacia la marca (ICE/Kolbi). La gente reconoce el enorme aporte que ha hecho la institución para el desarrollo del país. Así que tendremos ICE para rato.