El jefe de la ONU califica de escándalo moral el bloqueo de la ayuda a Gaza

23 Marzo, 2024

Redacción

Guterres
El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, visita el cruce fronterizo de Rafah entre Egipto y la Franja de Gaza, en medio del conflicto en curso entre Israel y el grupo islamista palestino Hamás, el 23 de marzo de 2024. @antonioguterres / X

Antonio Guterres, secretario general de la ONU, dijo el sábado que el bloqueo a la fila de camiones con ayuda para los palestinos en Gaza es un escándalo moral. Sus declaraciones se producen en medio de su visita al paso fronterizo de Gaza y mientras Israel enfrenta presión mundial.

CRUCE DE RAFAH, EGIPTO — Este sábado pasado, Antonio Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas (ONU), realizó una visita al paso fronterizo de Rafah, donde expresó su indignación ante la larga fila de camiones de ayuda humanitaria bloqueados en el lado egipcio de la frontera con la Franja de Gaza, una situación que calificó de escándalo moral debido al hambre que sufre la población.

En su intervención, Guterres instó a Israel a comprometerse firmemente con el acceso sin restricciones a productos humanitarios en toda Gaza, además de solicitar un alto el fuego humanitario inmediato y la liberación de rehenes israelíes detenidos en la región.

El líder de la ONU anunció la continuación del trabajo en colaboración con Egipto para agilizar el flujo de ayuda hacia Gaza desde el paso fronterizo de Rafah, que es un punto crucial de entrada para la asistencia humanitaria.

Durante su visita, Guterres enfatizó la situación desesperada que enfrentan los habitantes de Gaza, destacando la imagen desoladora de camiones de ayuda estancados en un lado de las puertas mientras la sombra del hambre se cierne sobre la región. Calificó esta situación como más que trágica, describiéndola como un escándalo moral.

La presión internacional sobre Israel para permitir una mayor entrada de ayuda humanitaria en Gaza ha ido en aumento, especialmente después de más de cinco meses de conflicto entre Israel y Hamás, que ha dejado la región devastada.

A pesar de los llamados internacionales en contra, Israel ha amenazado con llevar a cabo una operación militar en la ciudad de Rafah, al sur de Gaza, justo al otro lado de la frontera con Egipto.

La mayoría de los habitantes de Gaza se concentran en los alrededores de Rafah, donde las condiciones de vida han empeorado significativamente debido a la prolongación del conflicto.

Previo a su visita al paso fronterizo, Guterres se detuvo en Al Arish, en el norte del Sinaí egipcio, donde se distribuye y almacena gran parte de la ayuda internacional destinada a Gaza. Allí, se reunió con el gobernador regional Mohamed Shusha, quien informó que aproximadamente 7.000 camiones esperaban para entregar ayuda a Gaza, pero los procedimientos de inspección requeridos por Israel habían retrasado el proceso.

Guterres también visitó un hospital en Al Arish, donde se encuentran recibiendo tratamiento los palestinos evacuados de Gaza.

Ante la situación cada vez más desesperada en Gaza y el deterioro de la situación humanitaria, Estados Unidos y otros países han intentado hacer llegar la ayuda mediante lanzamientos aéreos y transporte marítimo.

Sin embargo, los trabajadores humanitarios advierten que solo una quinta parte de la ayuda necesaria ha llegado a Gaza, y la única forma de satisfacer las necesidades es acelerar las entregas por carretera.

Israel ha mantenido cerrados la mayoría de sus pasos terrestres hacia Gaza, alegando temores de que Hamás desvíe la ayuda. A finales de diciembre, abrió el paso fronterizo de Kerem Shalom, cerca de Rafah, pero niega las acusaciones de retrasar la entrega de ayuda humanitaria.

Esta semana, un monitor mundial de alimentos advirtió sobre una inminente hambruna en el norte de Gaza, que podría extenderse a otras partes del territorio si no se logra un alto el fuego.

En conclusión, Guterres hizo un llamado urgente a Israel para que permita el acceso total y sin restricciones de ayuda humanitaria a Gaza, destacando que la elección es clara: aumentar la ayuda o enfrentar la inanición.

Hasta la fecha, más de 32.000 personas han perdido la vida debido a la campaña militar israelí en Gaza, incluyendo a mujeres y niños, en respuesta a ataques de Hamás que provocaron la muerte de al menos 1.200 personas y la toma de más de 250 rehenes, según informes israelíes.

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