Don Pepe estaba callado, y en un momento dado, se vuelve y les dice,
-Está muy bien que dialoguemos muchachos. Dialoguemos, dialoguemos. Pero al final, ¿la opinión de quién es la que manda?
Anécdota de Rodolfo Cerdas
Tomado del Anecdotario del elespiritudel48.org
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