Urge una reactivación económica

Desde mi perspectiva

José Francisco Bolaños Arquín

En Costa Rica, el colón en el 2019, tuvo una apreciación de un 6% con respecto al dólar. El 1 de enero de ese año, el tipo de cambio era de ₵610 y para el 31 de diciembre en ₵575 por dólar. Así las cosas, un tipo de cambio apreciado promueve la importación de productos, afecta la producción interna y las exportaciones.

Nuestro país se tiene que endeudar todos los años para poder financiar con altas tasas de interés un creciente déficit fiscal; que en la actualidad es de alrededor al 6% del Producto Interno Bruto (PIB). El Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para nuevas aprobaciones de préstamos, pondrá como condición una correcta aplicación de la regla fiscal y donde no existan excepciones en ninguna institución pública, que se oponen a participar de ella.

El 4 de diciembre de 2019, la Cámara de Comercio, dio a conocer que en este año, 47.497 trabajadores del sector comercial se quedaron sin trabajo y 21.510 se integraron al sector informal del comercio. En la actualidad el desempleo es del 11.4%, con un sector informal del 46% y un bajo crecimiento económico cercano al 2%.

El año pasado por día unas cinco empresas cerraron sus puertas, provocando una desocupación de locales comerciales en un 15%, afectando principalmente a las micros y pequeñas empresas y por supuesto creando un mayor desempleo.

Debemos tener en cuenta que el aumento de algunos bienes y servicios influyen negativamente en el costo de operación de las empresas. La electricidad es la más cara de la zona, donde hace más de un año, la empresa Vidriera Centroamericana, presentó un cese de operaciones, alegando un alto costo de la energía de un 27% en relación con el costo energético en Guatemala, donde trasladó sus operaciones.

Es de vital importancia la modernización y reestructuración del Estado Costarricense, compuesto por unas 330 instituciones, algunas presentan, lentitud en trámites y duplicidad de funciones, con estructuras organizacionales que se han quedado en el tiempo.

Ante esta realidad, las posibilidades de reactivar la economía costarricense y lograr un crecimiento económico del 6%, para generar el empleo y disminuir la pobreza que este país requiere, es bastante difícil.

– Lic. Administración de Negocios