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Carlos Revilla Maroto
Este año se recordó a Carlos Eduardo Cortés Serrano quien falleció el pasado 16 de julio. Cortés murió cuando la unidad policial en la que viajaba colisionó contra un vehículo sobre la ruta 10 en la entrada al centro de la provincia de Cartago. En memoria de Cortés, compañeros y jefes se mantuvieron firmes durante los actos simbólicos que se resaltan en esta ceremonia; como lo son, los disparos al aire de las salvas de honor, el toque del silencio, el encendido del pebetero que se mantiene en en el lugar, y el ingreso de los tributos florales. La ceremonia llamada “Homenaje a Nuestros Héroes”, culmina con la develación de la placa que permanecerá junto a una lista de otros miembros de la Fuerza Pública, que se recuerdan en ese mismo muro. Realmente algo muy emotivo.
La pequeña plaza, está en el costado norte del complejo, y a pesar de su tamaño, tiene varios elementos muy significativos, que además de los ya mencionados, como lo son el muro con el nombre de los caídos, y el pebetero (casi nunca encendido); también tiene una estatua muy bonita que hace honor a los integrantes de la fuerza pública.
A la par de la plaza, en el costado que da a la ruta que se enfila a la antigua Y Griega, que era el viejo camino real a Desamparados, está la Escuela Nacional de Policía “Franciso J. Orlich”. A la entrada hay un busto del expresidente Orlich, que siempre se distinguió por el apoyo a la fuerza pública, y en cuyo Gobierno, en 1965, se creó la escuela. Vale la pena leer una breve reseña de don Chico, como cariñosamente se le llamaba:
“Nació en San Ramón de Alajuela, el 10 de marzo de 1907. Pasó unos años en los Estados Unidos, donde estudió y trabajó por un tiempo.
Combatió durante la Guerra Civil de 1948 como comandante del ejército de Liberación Nacional. Una Vez que fue derrocado el gobierno de Teodoro Picado y Figueres tomó el poder, don “Chico” trabajó en la cartera de Obras Públicas.
Fue candidato a la presidencia para el período 1958–1962 y fue derrotado por Mario Echandi. Lo intentó de nuevo en 1962, donde logró el apoyo de la mayoría y fue electo Presidente.
Durante su administración hizo que Costa Rica ingresara al Mercado Común Centroamericano. Construyó el Hospital Nacional de Niños y la Corte Suprema de Justicia.
Finalizó la construcción del Banco Central y completó la Autopista General Cañas, que conecta la ciudad de San José con el aeropuerto Juan Santamaría.
Aceleró el desarrollo hidroeléctrico del país, construyendo la represa sobre el río Macho e iniciando la de Cachí. Creó la Oficina de Planificación Nacional, el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) y la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo de la Vertiente Atlántica (JAPDEVA).
Durante su gobierno, el volcán Irazú lanzó cenizas, causando grandes prejuicios a la economía nacional, lo que requirió grandes esfuerzo por parte de su administración.
Se estableció la Oficina de Defensa Civil, para proteger a la población del volcán y las inundaciones.
Impulsó la vida del país sin lastimar sus estructuras ni tradiciones. Murió el 29 de octubre de 1969 en San José. Sus restos están en el cementerio general en San José, y su corazón reposa en los Jardines de la Catedral de San Ramón.
Fue declarado Benemérito de la Patria el 25 de abril de 1977”.
En los jardines del ministerio de seguridad pública, cerca de la plaza hay un monumento en honor de Francisca (Pancha) Carrasco, heroína que acompañó al ejército costarricense en la campaña contra los filibusteros en 1856, y que fuera condecorada por su importante participación en esa gesta.
La plaza es de paso, y es utilizada mucho por los estudiantes del cercano liceo y escuela Dr. Castro Madriz, en la ciudadela Calderón Muñoz y Barrio Córdoba. No tiene poyos, pero si algunas bancas unipersonales muy curiosas, alineadas una a la par de la otra. La arborización es muy pobre, seis árboles nada más, y predomina el arreglo tipo jardín. Se nota bien cuidada.
La plaza tiene un desnivel, que se compensa con unas gradas de acceso en los costados norte y oeste. En el lado noreste, donde hay otro acceso, no hay necesidad de gradas. En la esquina de ese costado del complejo, aunque no directamente en la plaza, hay un pequeño espacio verde, con un precioso pabellón nacional.
No puedo terminar, sin dejar de hablar del edificio del Liceo Dr. Castro Madriz, que está al costado norte de la plaza, hacia el este. El inmueble es de ladrillo del año 1930. La edificación fue construida para ser la sede del Reformatorio San Dimas. Comenzó a construirse en la administración de Ricardo Jiménez (1932-1936) y se concluyó en la de don León Cortés (1936-1940). Este lugar estuvo bajo el cuidado de las religiosas de la Orden de La Salle hasta la década de 1970, cuando el reformatorio se traslada a San Luis de Santo Domingo de Heredia, bajo el nombre de Luis Felipe González Flores. La institución educativa empezó a funcionar en este sitio a partir de 1974. Como anécdota, los jóvenes privados de libertad solían vestirse de colegiales para escapar del sistema. El edificio fue declarado de interés histórico arquitectónico, según decreto ejecutivo No. 22314-C, publicado en La Gaceta No. 137 del 20 de mayo de 1993, de carácter estatal. También hay que mencionar que parte del complejo policial fue en algún momento la Casa de Refugio de Mujeres.
Como de costumbre, preparé una bonita galería de imágenes, que también subí a un álbum de Facebook.
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Cargando...Muchas gracias a la oficina de prensa del MSP, por su ayuda con las imágenes de la ceremonia y algunos datos que me ayudaron a escribir la columna. La breve reseña de don Chico la tome de mi sitio de historia guiscostarica.info
