Vía costarricense
Johnny Soto Zúñiga
El día 29 de noviembre del 2016, el pueblo costarricense recibió la triste noticia del fallecimiento de don Luis Alberto Monge Álvarez, quien fuera Presidente de la República de Costa Rica en el período de 1982 a 1986. El Gobierno decretó 3 días de duelo nacional y el funeral de Estado se llevó a cabo el día 1 de diciembre; un día a su vez memorable porque es la fecha histórica de conmemoración del decretó de la Abolición del Ejército en el año de 1949 de parte de la Junta Fundadora de la Segunda República que presidió el Caudillo don José Figueres Ferrer; quién a su vez con los otros tres ex presidentes de la República Daniel Oduber Quirós, Francisco José Orlich Bolmarcich y Luis Alberto Monge Álvarez, fundaron el 12 de octubre de 1951 en la Finca la Paz de San Ramón: el Partido Liberación Nacional (partido político que hasta la fecha se mantiene vigente y que cumplió 65 años de fundado), actualmente en la oposición.
El 2 de diciembre fue enterrado el corazón de don Luis Alberto en su natal Palmares y sus cenizas fueron depositadas el 3 de diciembre en el campus de la Universidad Escuela de Agricultura de la Región Tropical Húmeda (EARTH) en Guácimo de Limón; institución que el ex presidente impulsó a traerla a nuestro país. Don Luis Alberto tiene profundas raíces rurales, nació en el cantón de Palmares de Alajuela el 29 de diciembre de 1925; esto le permitió tener un vínculo de servicio y comprensión de los agricultores y de los trabajadores más humildes del país. Fue un hombre sencillo, con gran sensibilidad social; algunos lo consideraban el típico bonachón; con tono suave, pero firme en sus convicciones; se podría afirmar un social demócrata en todo el sentido de la palabra; además se caracterizaba por tener un humor muy fino, un hombre afable y ser un bohemio; siendo parte fundamental de su propia identidad como ser humano. No hacía alarde de ostentación en su manera de vivir; lo que se le veía como cercano al pueblo común; sin grandes diferencias sociales.
Proviene de una familia humilde y numerosa; lo que a muy temprana edad se ve obligado a trabajar para colaborar con la familia en los cafetales y tabacales de Palmares; tenía un gran amor por la naturaleza; estudia en la Escuela Central desde 1932 hasta 1937 y luego ingresa al Instituto de Alajuela de 1938 hasta 1942. Por lo tanto, se vio obligado a trabajar y estudiar, por lo que su esfuerzo y sus dificultades económicas lo marcan para toda su vida y entiende muy bien al trabajador, al agricultor, al campesino, los problemas y dificultades en el diario vivir; incluso trabaja como empleado de comercio en el Mercado Central para poder seguir sus estudios universitarios; escoge una carrera universitaria que es más de servicio público; que de producir grandes ganancias; entonces estudia servicio social durante cuatro años en la Universidad de Costa Rica. Entra a trabajar a la Cruz Roja y llega a ser Oficial Mayor. Posteriormente ingresa a trabajar a la Central de Sindicatos Rerum Novarum que dirige y preside el Padre Benjamín Núñez, fundada con el beneplácito de la Iglesia Católica que dirigía Monseñor Sanabria; como respuesta a la Confederación de Trabajadores de Costa Rica (CTCR) que controlaba el Partido Comunista.
Si bien, don Luis Alberto no termina una carrera universitaria y obtiene un título de grado; prácticamente al igual que su amigo y compañero don José Figueres Ferrer, se convierte en un autodidacta, lector infatigable, estudia y lee a los grandes próceres latinoamericanos como el apóstol de la Libertad el cubano José Martí, lee sobre la gesta libertaria de Simón Bolívar y estudia la obra de los próceres costarricenses y los aportes de los gobernantes costarricenses del siglo XIX y de la primera mitad del siglo XX. Participa dentro del Partido Acción Demócrata y en el Centro para Estudios de los Problemas Nacionales; y en 1945 cuando ambas organizaciones se fusionan y fundan el Partido Social Demócrata; siendo este partido quién lo pone como candidato a diputado constituyente y es uno de los cuatro diputados electos ante la Asamblea Nacional Constituyente con apenas 23 años de edad, se convierte en el más joven constituyente de 1949. Admira al Lic. Rodrigo Facio; el más prolífico constituyente.
El pensamiento político de don Luis Alberto fue siempre luchar por un mundo de paz, de justicia social y de libertad; en realidad era un demócrata puro en el sentido de la palabra, y su solidaridad con los pueblos oprimidos y marginados de Latinoamérica y del mundo. Desde sus funciones en la Organización Regional Interamericana de Trabajadores (ORIT) con sede en México, aportó mucho en el ámbito internacional y su dimensión clarificada de lucha a favor de la democracia; en los momentos más fuertes de la guerra fría entre EE.UU y la URSS. Criticaba muy duramente a las dictaduras militares lo que se llamaba “la alianza de las espadas” y así se expresaba don Luis Alberto sobre este tema: “Las distintas dictaduras se prestan decidida solidaridad y respaldo. Constituyen una verdadera internacional de las espadas. Sincronizan su intriga y su conspiración contra aquellos gobiernos democráticos que se atreven a brindar asilo a los perseguidos políticos. Cuando se produce un movimiento de pueblo para derrocar a un dictador, de inmediato recibe auxilio diplomático, militar, y a veces hasta hombres que le envían los otros dictadores. Desarrollan toda una intensa propaganda internacional, para exhibir “los progresos” que bajo sus regímenes logra el país que dominan.” (Citado en Libro: Luis Alberto. Alberto Baeza Flores. Pág.100)
Esta posición internacional le permite a don Luis Alberto, empaparse de los acontecimientos internacionales y de poder desarrollar una visión clara de la realidad latinoamericana; y a su vez de poder colaborar con el país en diversos ámbitos; especialmente en su lucha por defender al primer gobierno del recién fundado Partido Liberación Nacional presidido por don José Figueres Ferrer (1953-1958), que tuvo invasiones de los contrarrevolucionarios liderados por Calderón Guardia y con el apoyo del dictador nicaragüense Anastasio Somoza García. Otro acontecimiento significativo que se debe rescatar en el pensamiento latinoamericano y del cual don Luis Alberto es un gran protagonista desde el punto de vista ideológico es cuando en julio de 1958, se lanza el primer número de la revista bimensual “Combate”, publicación del Instituto Internacional de Estudios Político-Sociales, y sus cuatro editores eran grandes ideólogos latinoamericanos: Rómulo Betancourt, Víctor Raúl Haya de la Torre, José Figueres Ferrer y Luis Alberto Monge Álvarez.
Don Luis Alberto, pasa a ser el Director de la Revista y su puesto de editor es llenado por Eduardo Santos. Esta revista es una gran tribuna ideológica. Combate se enfatiza en la democracia social, la dignidad humana y la lucha por la libertad de los pueblos. Afirman lo siguiente: “…Un lazo de solidaridad entre los que avanzan por el camino de la liberación integral del hombre y aquellos a quienes se les pretende cerrar ese camino. Es mensaje de rebeldía contra toda forma de opresión; voz de aliento para aquellos a quienes amenaza la desesperanza; y mano fraterna tendida para todos los que quieran enrumbar su pensamiento, su fuerza y su vida entera por la ruta de la superación humana.”
“Combate recogerá, prístino, el eco de los que protestan contra el yugo colonial. Convertirá en proclama siempre renovada el repudio a las tiranías. Peleará sin tregua el derecho de los pueblos a más pan y a más cultura.” (Op. Cit. Pág. 124)
Hasta aquí vamos a dejar esta primera parte sobre la vida política, de formación y aporte al pensamiento social demócrata costarricense y latinoamericano del ex Presidente Luis Alberto Monge Álvarez. El objetivo es comprender la vida y desarrollo de su visión social, económica y política, su lucha por las nobles causas. Definitivamente don Luis Alberto fue un ilustre pensador, escritor, y líder político; y que se hace necesario profundizar en su visión de conjunto y su gran legado para la historia del pensamiento costarricense y latinoamericano.