Lewis Carroll y Jack el Destripador

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Carlos Revilla Maroto

Carlos Revilla

En esta oportunidad quiero hablarles de algunos personajes y datos curiosos, un poco basado en el interés que siempre he tenido por el cuento -no tan infantil- de las Aventuras de Alicia en el país de las maravillas y su autor Lewis Carroll. Lo de Jack el Destripador, no es que me interese mucho la verdad, pero de una manera retorcida y especial se le ha querido relacionar con el autor de Alicia.

Mi interés en el cuento de Alicia viene desde joven y se debe a la fascinación que siempre he tenido por lo fantástico y la ciencia ficción o como algunos quisieron llamarle “ficción especulativa”, que incluso creo que describe mejor al género, pero que no tuvo aceptación. Bueno, desde ya entrando a mi adolescencia pasaba leyendo todo el día libros de esos géneros, y un poco de clásicos también, como el Conde de Montecristo y de ese tipo.

Mis compañeros inseparables fueron Julio Verne y Emilio Salgari inicialmente, y posteriormente Isaac Asimov, Arthur C. Clark, Ray Bradbury, solo para mencionar algunos pocos de la gran cantidad de autores que leía en esa época. También iba mucho a leer a la Biblioteca Nacional, que tuve la suerte de tener cerca de mi casa.

Otro aspecto de mis preferencias de lectura han sido las matemáticas y todo lo que tenga que ver con eso, desde la Historia de las Matemáticas, hasta geometrías no Euclidianas como las de Reimann y Lobachesky, o personajes como el matemático francés Galois, que murió muy joven en un duelo de faldas y cuya vida se puede resumir en la frase “entre el genio y la estupidez”.

Bueno, entre todas esas lecturas, casi siempre se menciona a Lewis Carroll y su cuento más famoso, por supuesto, el de las Aventuras de Alicia en el país de las maravillas. Este cuento siempre me había gustado, sin embargo lo consideraba un cuento infantil, para niños.

Como ya dije su autor era una constante como referencia en los trabajos sobre literatura fantástica y curiosamente -pensé en un inicio- en matemáticas. Esta curiosidad me llevó a investigar a Lewis Carroll, tanto es así, que terminé montando un sitio completo en Internet sobre él, e incluí —entre muchas otras cosas— su biografía completa y la mayoría de sus cuentos de forma digital(1).

Sobre Lewis Carroll, hay que decir que era un seudónimo, su verdadero nombre era Charles Lutwidge Dodgson. Se ordenó de Reverendo, aunque nunca ejerció, y estudio matemáticas y lógica en la Universidad de Oxford, donde, después de graduarse, trabajó como profesor por el resto de su vida.

Carroll era de una personalidad podría decirse bastante peculiar. Él era misógino, es decir sentía aversión hacia las mujeres y en general a las relaciones con los adultos. Las únicas relaciones que realmente disfrutaba y soportaba eran con niños, especialmente si eran niñas.

De hecho Alicia realmente existió y era una niña llamada Alice Liddell, a la cual Carroll llevaba junto a sus hermanas en el verano, a pasear por el río Támesis, y fue en uno de esos memorables paseos donde les empezó a contar a las niñas Liddell un cuento, que terminó siendo el de las Aventuras de Alicia en el país de las maravillas.

Sobre Carroll se puede escribir mucho, dado lo interesante que fue su vida. Uno de los primeros fotógrafos profesionales de Inglaterra, se le considera uno de los mejores de su época. En matemáticas escribió varios libros de valor, especialmente sobre lógica matemática y geometría, siendo el más destacado «Euclides y sus rivales modernos«.

Hay una anécdota con la Reina Victoria, que había leido el cuento de Alicia en el país de las maravillas y le gustó tanto que pidió otras publicaciones del autor, su gran sorpresa fue que le llevaron libros de matemáticas y lógica. Me parece que es importante mencionar que el cuento de Alicia desde su primera edición fue un total éxito editorial.

También es importante mencionar que Carroll es el mayor exponente de lo que en la literatura anglosajona se conoce como el nonsense, que se puede traducir algo así como el sinsentido. En Alicia y especialmente en su segunda parte “A través del espejo” es donde el nonsense llega a su máxima expresión, especialmente en palabras y poemas como el Jabberwocky o la Caza del Snark, ambos materia de estudio en lengua inglesa.

Bueno, y ya se deben estar preguntando ¿y qué tiene que ver Jack el Destripador en todo esto?

Antes de entrar a eso, creo oportuno mencionar quien fue este tétrico personaje conocido como Jack el Destripador (Jack the Ripper en inglés), pues seguramente muchos no habrán oído o conocen muy poco sobre él.

Jack el Destripador es el más conocido de los seudónimos que se le dieron a un asesino en serie no identificado que cometió varios crímenes en 1888, en Londres. El apodo se originó de una carta escrita por alguien que se adjudicaba los asesinatos bajo este seudónimo, y como resultado de su difusión por los medios de comunicación, ese nombre pasó a ser conocido por la sociedad en general.

Ahora, al asunto con Carroll, pues bien, él y Jack el Destripador fueron contemporáneos y como ya dije nunca se supo la identidad del asesino. Tras la muerte de Carroll en 1898, todas sus pertenencias las heredó un sobrino. Muchos años después la familia hizo público su diario personal. El llevar un diario era algo que se usaba mucho en esas épocas.

Y esto es lo interesante, el diario tiene referencias de gran valor, fechas de reuniones, datos para los libros etc. incluso habla sobre la reunión de Carroll con Alicia Liddel, ya mayor y casada. Pero, y aquí lo extraordinario, al diario le faltaban varias páginas, como si hubieran sido arrancadas, y curiosamente las fechas que faltaban en el diario coincidían con las de los asesinatos de Jack el Destripador.

Interesante ¿no creen? Junten este hecho del diario mas la personalidad de Carroll, y por lo menos da que pensar. Incluso hay varios artículos en Internet sobre esto, especialmente en inglés, aunque hay algunos en español(2).

Termino con lo que decía siempre el Monje Loco, aquel tétrico personaje de los comics mejicanos, junto a Hermelinda Linda y Memín Pingüin: “Nadie sabe, nadie supo…

Notas:

1. Sitio de Lewis Carroll.
2. ¿Lewis Carroll fue Jack el destripador?

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Un comentario

  1. Resulta que Carlos Revilla comparte mi pasión por la ciencia ficción,lo que es muy satisfactorio para mi, que leo y releo a Clarke aunque le echo en falta sus errores en biología. Me gusta mucho también Asimov cuyas historias de amor me parecen patéticas.Pero a quien encuentro incomparable a Phillip José Farmer, que hace sátira en sus historias como hacía Swift. Lo que me parece mas útil de la presencia de Carlos en Cambio Político es, primero que lo haya organizado cuando el gran capital trató de ahogarlo en su primer intento (Ay Lalo),y segundo, también sus aclaraciones sobre la terminología de la tecnología de la comunicación, que se ha vuelto una jungla impenetrable.

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