Las Ruinas de Ujarrás

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Carlos Revilla Maroto

Carlos Revilla

Cuando éramos pequeños, el paseo de rigor era al Valle de Orosí, y las Ruinas de Ujarrás. Por llamarlo así, el “circuito turístico” era muy bonito e interesante, especialmente porque la inauguración de la represa de Cachí, permitía hacer la vuelta completa Paraíso-Orosi-Palomo-Ujarrás-Paraíso.

La parada obligatoria era en el restaurante de Palomo, que todavía existe, justo saliendo del puente de hamaca sobre el río Grande de Orosi, a la izquierda, aunque bastante descuidado, sin pintar, la piscina convertida en criadero de tilapias, y bastante caro. Prefiero quedarme con el recuerdo que tenía.

En realidad lo que realmente me interesaba era ir a las Ruinas de Ujarrás, para sacar algunas fotos del templo “Nuestra Señora de Limpia Concepción del Rescate de Ujarrás”, y ojalá poder hacer una crónica con su historia. La última vez que había estado en el lugar fue en 1998, para la boda de un muy buen amigo, con la especialidad que la ceremonia fue de noche. Con la iluminación nocturna las ruinas se veían espectaculares.

Al lugar se puede llegar saliendo de una vez de Paraíso, hacia la población de Ujarrás, con lo que el trayecto se reduce mucho, si lo comparamos con el circuito que les describí. Eso sí, se pierden de una vuelta muy bonita por el Valle de Orosi, y además podrían ir a ver la iglesia del lugar, famosa por ser de las pocas de estilo colonial que aún nos quedan.


 
Las ruinas del templo están localizadas en el distrito de Cachí, cantón de Paraíso, provincia de Cartago, a 1 kilómetro de la orilla noroeste del Lago o Embalse de Cachí.

Repasemos la historia:

En tiempos prehispánicos el lugar fue de cierta importancia, donde existía un asentamiento de los indígenas huetares. Su nombre es una castellanización del nombre del rey huetar Uxarrací. A principios de 1563 reinaba en Ujarrás un monarca llamado Tuxustí, que junto con otros reyes indígenas visitó el 1º de enero de ese año al Alcalde Mayor Juan Vázquez de Coronado en la ciudad de Garcimuñoz.

Entre 1561 y 1569 se erigió una ermita de paja, que se dedicó a la Santísima Virgen María con el titulo de Limpia Concepción de Ujarrás, una de las primeras edificaciones que se levantó en honor de la Virgen María en nuestro país.

Alrededor de 1575, posiblemente durante la gobernación de Alonso Anguciana de Gamboa, se estableció en Ujarrás una reducción indígena, a cargo de un cura doctrinero franciscano. El pueblo adquirió celebridad por la presencia en su iglesia de una imagen de la Inmaculada Concepción, al parecer obsequiada por Felipe II, que se conoció desde 1666 con el nombre de la Virgen del Rescate, por atribuirse a su intercesión la inexplicable retirada de una invasión pirata encabezada por Eduard Mansvelt y Henry Morgan.

Luego se construyó una Iglesia de adobes con horcones y teja entre 1575 y 1580, la cual fue reparada por el gobernador don Gregorio de Sandoval entre 1638 y 1640.

Entre 1681 y 1693, siendo gobernador don Miguel Gómez de Lara, se construyó el templo actual de calicanto en este valle de Ujarras. Los padres Franciscanos de Cartago al final del siglo XVIII le agregaron la denominación de Rescate que aparece en la fachada del templo, debido a que en 1822 fue muy afectado por un terremoto.

Durante el gobierno de don José Rafael de Gallegos y Alvarado. se promulgó la ley Nº 50, de 23 de mayo de 1832, que dispuso el traslado de toda la villa Ujarrás, al lugar llamado Los Riachuelos, Lucia, la cual en lo sucesivo se llamaría la villa del Paraíso. Esto debido al peligro constante de inundación de los ríos aledaños, la inestabilidad de los terrenos y las enfermedades que asolaban al lugar, la villa de Ujarrás fue abandonada entre 1832 y 1833, y sus vecinos se trasladaron al territorio conocido como Llanos de Santa Lucía, hoy Paraíso, aunque estudios recientes del presbítero e historiador Manuel Benavides sugieren que el traslado se debió a motivos políticos.

La población indígena de Ujarrás se extinguió a principios del siglo XVIII, por lo que la reducción se convirtió en un pueblo de mestizos. En ella nació el célebre presbítero Florencio del Castillo, quien fue presidente de las Cortes de Cádiz. Gracias a sus gestiones, Ujarrás fue erigido en villa en 1813.

Incluso hay una placa que atestigua el hecho:

Al hijo ilustre de Ujarrás, primer parlamentario de Costa Rica y representante intelectual y moral de la nueva América ante las Cortes de Cádiz. (1811-12)

Presbitero:

Florencio Del Castillo

(1778-1834)

Por sus méritos personales tiene ganado el respeto y la gratitud de la patria.

Comisión Nacional de Conmemoraciones Históricas
Octubre 1978

Si quieren conocer en detalle sobre la vida de este patricio, pueden leer una extensa reseña biográfica sobre él, que tengo en mi sitio web de historia de Costa Rica.

​Del templo de Ujarrás, no queda hoy más vestigio que las ruinas, donde se sigue celebrando en abril de cada año una romería y una fiesta en honor de la venerada imagen, convirtiéndose en un importante centro de peregrinaciones.

Declarada Monumento Nacional por decreto Nº 35 del 13 de abril de 1920, confirmado por el decreto Ejecutivo Nº 16713-C, publicado en La Gaceta Nº 237 del 11 de diciembre de 1985. Las ruinas fueron consolidadas en 1975 por el Ministerio de Cultura y el ICT, con la ayuda de la Embajada de España, MOPT, MAG, municipalidad de Paraíso, Kativo, Ladrillera La Uruca, Sr. Primo Coghi, Junta Edificadora la Iglesia de Paraíso, ICE y el INVU.

El lugar está muy bien cuidado y la entrada es gratuita. Tiene parqueo, instalaciones administrativas, vigilancia, servicios sanitarios, área de mesas, y juegos infantiles; así que sin problemas pueden ir de paseo.

Preparé un bonito álbum de las ruinas y sus alrededores, en Google Photos, que también incluye fotos de la Iglesia de Orosi y lugares cercanos; que espero lo disfruten, son cerca de 50 imágenes tomadas en alta resolución, con mi cámara profesional. Les comparto una preciosa imagen estilizada de las ruinas que hizo la IA de Google Fotos.

Ruinas de Ujarrás

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