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Carlos Revilla Maroto
Después de un pequeño problema con Cambio Político a finales del año pasado, tuvimos que usar uno de los respaldos de la base de datos. Rápidamente todo volvió a la normalidad, pero uno de los pocos inconvenientes, fue que no pude recuperar una de mis columnas de esos días. De casualidad buscando otras cosas, apareció medio escondida entre otros documentos. El tema era de una serie de películas de esas que uno siempre recuerda, y que se dejan ver de nuevo sin ningún problema. Por eso, decidí revisarla y publicarla otra vez, que para todos los efectos es como si fuera nueva.En estos días vi por Netflix una de las películas de la Pantera Rosa, con el actor Peter Sellers interpretando al inspector Clouseau. Verla me hizo recordar esta saga de películas, que son de mis favoritas, especialmente en las que actuó Sellers, y que son verdaderos clásicos del género de comedia. También está la serie animada para TV de «El Show de la Pantera Rosa», que a mi juicio ha sido una de las mejores de todos los tiempos.
Ver la cinta de nuevo, me decidió a escribir y hacer una especie de homenaje a la Pantera Rosa, hablando un poco sobre las películas y Sellers.
El cuento de la Pantera Rosa empezó en 1963, con la película de Blake Edwards del mismo título, y actuada por Sellers en el papel del inspector Clouseau. En la cinta la Pantera Rosa era un diamante que fue robado y comisionaron a Clouseau para que investigara el robo.
En esa primera película se recurrió a una animación para ilustrar el título y los créditos iniciales y finales de la película. Blake Edwards encargó al prestigioso animador Friz Freleng (1906-1995, creador de Porky Pig, Piolín, El gato Silvestre, Sam Bigotes y Speedy Gonzales, entre otros) que hiciera un dibujo animado y sólo le pidió tres cosas: que fuera gracioso, mudo y de color rosa. Así nació la Pantera Rosa.
Mención especial merece la música del título y sus créditos, que quizás se volvió tan famosa como las propias películas. Compuesta por Henry Mancini para la película original, y desarrollada con diversas variaciones en el resto de las series y películas. Se trata de un tema de jazz, con el saxo tenor como principal elemento instrumental.
El éxito de las películas es el personaje de Clouseau, que es un torpe e incompetente inspector de la Sûreté francesa (algo así como el OIJ de aquí), cuyas investigaciones siempre están marcadas por el caos, la destrucción, los desastres y accidentes causados en gran medida por él mismo. Sus torpes intentos de resolver los casos conducen con frecuencia a la desgracia para él y para los demás. En la película de 1976 La Pantera Rosa ataca de nuevo, ni siquiera puede entrevistar a los testigos de un crimen sin caerse por unas escaleras, atraparse la mano en un guantelete medieval y en un florero, golpear a un testigo dejándolo sin sentido (y sin voz), destruir un piano de gran valor y disparar a otro oficial en el trasero. Clouseau tampoco es muy inteligente, y suele seguir una teoría completamente estúpida del crimen, resolviendo el caso sólo por casualidad. Su incompetencia, torpeza y estupidez, el hecho de que normalmente tiene razón y su extraordinaria habilidad para escapar de situaciones peligrosas son suficientes para acabar transformando a su superior (el Inspector Jefe Dreyfus) en un psicópata homicida, hasta el punto de que llega a crear una poderosa máquina y amenaza con destruir el mundo en un desesperado intento de acabar con Clouseau.
Independientemente de su limitada capacidad, resuelve sus casos con éxito y descubre a los auténticos culpables, aunque este éxito, como ya dije, se produzca completamente por casualidad. Por ello, es ascendido a Inspector Jefe a lo largo de la serie, y es considerado por otros personajes que no lo conocen bien, como el mejor detective de Francia, mientras que los personajes con los que se encuentra se dan cuenta rápidamente de su incompetencia y limitaciones. Es tremendamente egocéntrico y presuntuoso; a pesar de sus numerosos fallos, parece estar convencido de ser un brillante policía destinado a tener éxito y ascender a lo largo del escalafón de la Sûreté. A pesar de ello, Clouseau parece también darse cuenta de que no es la persona más brillante y competente, ya que se avergüenza notablemente y se da prisa en dejar de lado sus actos de torpeza más extremos con frases como «Ya lo sé», y trata de mantenerse elegante y refinado independientemente de la calamidad que haya acabado de causar.
El Inspector Jefe Clouseau es un patriota francés, siendo su país su mayor prioridad. Las películas posteriores revelan que había luchado en la Resistencia francesa durante la Segunda Guerra Mundial. Es propenso al enamoramiento (algo que a menudo es recíproco) desde que fue engañado por Sir Charles Lytton. Se siente confundido por los travestis, a los que se refiere como «Señor o señora».
Las peleas de Closeua contra su mayordomo Cato, experto en artes marciales, son épicas, y de lo más hilarantes. El actor británico Burt Kwouk, que interpretaba ese personaje, murió hace poco a las 85 años de edad, y se hizo tan famoso que en vida se le otorgó la Orden de la concesión del Imperio Británico, uno de los máximos honores que confiere ese país a sus súbditos.
Sellers dijo en varias entrevistas que el secreto del personaje de Clouseau es su enorme ego. Su ejemplo favorito del ego de Clouseau es que, cada vez que alguien decía: «Llamada telefónica para el Inspector Clouseau», Clouseau respondía: «Ah, sí, es para MÍ». Sellers mantuvo que el ego de Clouseau es lo que hizo al personaje más divertido, debido a su afán por seguir permaneciendo elegante y refinado al mismo tiempo que provocaba el caos a cualquier lugar donde iba.
Las películas de la Pantera Rosa, poseen algunas de las escenas de humor más divertidas de la historia del cine.
En total, Sellers filmó cinco de la saga, bajo el mismo director y con las que generalmente se le asocia más en su carrera. Él se distinguió como actor y comediante, fue nominado varias veces al Oscar. Murió relativamente joven, a los 54 años de edad, luego de padecer problemas cardíacos durante varios años.
Después de su muerte se hicieron otras versiones de la Pantera Rosa y Clouseau, pero ninguna —para mi gusto— ha logrado superar las de Sellers. Incluso en años recientes se relanza la franquicia con el actor y comediante estadounidense Steve Martin, pero se le ve muy acartonado y un poco fingido el papel. Con Sellers, Clouseau era totalmente natural, no se sentía para nada como una actuación. A veces hay personajes hechos para un actor, este es uno de esos casos.
Youtube tiene cientos de videos y clips sobre Sellers y la saga de películas de la Pantera Rosa, y como decía, en Netflix se pueden ver casi todas, por el momento.
Si quieren pasar un buen domingo en familia y reírse como nunca, la mesa está servida.