Mario Ramón Duarte
Al analizar las cuestiones atinentes a esta nueva era de la historia de la humanidad conocida como “cuarta revolución industrial” o “industria 4.0”, una de las más sobresalientes y sobre la que se pone mayor énfasis en su estudio es, sin dudas, la Inteligencia Artificial (IA); y otro elemento que juega un rol clave en esta era de la digitalización es el Ciberespacio, ese famoso entorno donde todos estamos inmersos. No obstante, el Ciberespacio, al igual que la Inteligencia Artificial, aún no cuenta con una regulación global, a pesar de que estos elementos esenciales, propios de esta Nueva Normalidad, deben estar sin dudas adecuadamente regulados, porque ante el avance vertiginoso de éstos, hay un solo paso para cruzar la frontera hacia lo desconocido, que entre otras cosas podría cambiar la esencia de la humanidad para siempre, tal cual la conocemos; y es a raíz de ello la importancia vital de su estudio y regulación urgente.En palabras del Dr. Ing. Roberto Uzal (Director de maestría de Ciberseguridad y Ciberdefensa de la Universidad de Buenos Aires), quien realizó el prólogo a mi libro: “Cuarta Revolución Industrial: análisis estratégico”, el experto en la materia expresa contundentemente:… “al respecto se cita la expresión singularidad tecnológica, la que se refiere a un punto en el eje del tiempo, a una fecha en la cual la humanidad percibirá y admitirá que el efecto Kasparov (Campeón mundial de ajedrez derrotado serialmente por el computador Deep Blue), se ha extendido a ingenieros, a los médicos, a los comandantes militares y otras profesiones y quehaceres”, agregando:… “la Inteligencia Artificial habrá superado claramente a la Inteligencia Humana”. Prosiguiendo: “El genial matemático Jhon Von Neumann anticipó en la década de los 50, la convergencia hacia la Singularidad Tecnológica”. En la actualidad, gobiernos y corporaciones empresariales preparan a sus ingenieros a negociar con los computadores; la programación de computadoras será uno de los ámbitos en los que la Inteligencia Artificial reemplazará a la Inteligencia Humana. En la 4ta Revolución Industrial desaparecerán las interfaces humanas, entre el entorno Ciber y los artefactos computacionales asociados a cada uno de los nodos de los procesos productivos.
Los programas tendrán un nivel de complejidad tal que difícilmente podrán ser elaborados por “programadores seres humanos”. Conceptos como la Ley de Moore y Tecnologías Exponenciales son ya de aplicación cotidiana. Las relaciones tecnológicas lineales – tecnologías exponenciales constituyen una herramienta definitoria para evaluar la economía y posibilidades de crecimiento de los estados naciones; por eso, cuanto mayor sea el aporte relativo de las tecnologías exponenciales a su producto bruto interno, mayor será el bienestar de los habitantes del estado nación considerado.
Sin dudas que, ante contundentes afirmaciones de un futuro, en el cual ya estamos transitando, sin la falta de regulación ética-normativa, una de las grandes falencias y deudas de los organismos multilaterales internacionales es sobre el aumento cualitativo y cuantitativo de las amenazas y contramedidas basadas en la IA que nacen del Ciberespacio, a la espera de la regulación global, lo que provoca más que incertidumbre en lo que nos espera en un breve lapso de tiempo. Por eso creemos desde nuestra óptica como analistas especialistas en estas cuestiones atinentes al momento de la historia en que vivimos, que es un imperante elaborar un Contrato Social Tecnológico a los efectos de advertir esa frontera de la discusión, donde repetimos, está en juego la condición del género humano tal cual lo conocemos sin una regulación ética-normativa.
Por un lado, quiero dejar presente que la IA en nuestra cotidianeidad está sin dudas cada vez más omnipresente, no solo en los Smartphones o asistentes de voz, sino también como impulsora de gran parte de los procesos de automatización, de procesos robóticos, que han permitido aligerar las cargas de trabajo en los departamentos de administración, logística, contabilidad y recursos humanos. Prácticamente vemos soluciones impulsadas por la IA en todos los sectores que podamos hacer alusión y que seguirá en pleno crecimiento con el correr del tiempo.
Por otro lado, debemos saber y tener en cuenta que el insistente reclamo que hacemos desde nuestros centros de estudios, bregando por una regulación inmediata tanto de la IA como del Ciberespacio, obedece a que en este 2022, las problemáticas que se suscitan día a día principalmente a los usuarios de la internet, van en pleno ascenso, llegando a constituir una pandemia pero en el ámbito virtual, con los ciberdelitos como: El grooming, el sexting, el ciberacoso, el mobbing, la deep web, la dark net, las estafas, fraudes, falsificaciones y fake news entre otras, agravando aún más el tremendo momento que estamos pasando en medio de una pandemia que no da tregua.
Repito, creemos que es necesario una debida regulación ética-normativa, tanto de la IA como del Ciberespacio, donde participen todos los estamentos civiles que conforman nuestra sociedad, como ser: el ámbito social, cultural, educativo, económico, político, religioso, donde todos seamos participes de este Contrato Social Tecnológico donde entendamos que la IA está en la raíz del cambio epocal en que estamos viviendo y que creemos que se pueden realizar cambios sumamente provechosos para la humanidad, si va de la mano con el Bien Común; es decir que para que el progreso tecnológico se dé en serio debe estar orientado primeramente respetando la dignidad humana y de la creación, es decir al servicio de éstos. En esta línea de pensamiento el hoy miembro de la pontificia academia de ciencias sociales vaticana Dr. Gustavo Beliz expresa con total atino que: una igualdad 4.0 no solo significa discutir la macroeconomía sino también la provisión de micro políticas sociales para combatir las nuevas formas de esclavitud. El mismo autor advirtió sobre un calentamiento global tecnológico con luces y sombras de cara a que existe un abuso en el uso de la tecnología, y por ende también coincide en la urgencia de su regulación.
Por último, quiero dejar expresamente sentado que el análisis académico precedente de temáticas tan sensibles y ajenas a nuestro futuro próximo debería constituir una Política de Estado Urgente y ser parte explícita de la agenda de nuestros países que conforman la comunidad mundial. Estos temas no admiten más retrasos en los mismos y ameritan un tratamiento urgente, puesto que ante ese universo que constituye el Ciberespacio y donde la ciberseguridad o ciberdefensa, no hacen pie dejando indefenso a simples usuarios, como sin defensa a las ciberfronteras de nuestros países. Por ejemplo, en Latinoamérica, no contamos aún con un ciberejército de personas hiperprofesionalizadas ante posibles amenazas cibernéticas, que suceden cada vez con más normalidad; y un claro ejemplo de ello es nuestro país. Por eso la importancia y el propósito de buscar soluciones estratégicas ante algunos puntos que hoy marcan la agenda mundial, como lo es la lucha por la supremacía tecnológica, por ejemplo en el ámbito de la IA y el Ciberespacio.
– Dr. Mario Ramón Duarte, abogado (UCASAL), miembro Dossier Geopolítico (Cordoba-Argentina). Académico AICTEH (Valencia-España).
Fuentes Consultadas
Cuarta Revolución Industrial: análisis estratégicos. Autor: Dr. Mario Ramón Duarte. Edit: Phillos Academy. (Arg-Bra – 2021).
https://www.muycanal.com/2021/10/28/tendencias-tecnologicas-2022
http://www.realinstitutoelcano.org/wps/portal/rielcano_es/contenido?WCM_GLOBAL_CONTEXT=/elcano/elcano_es/zonas_es/ciberseguridad/ari50-2019-alonsolecuit-implicaciones-uso-inteligencia-artificial-campo-ciberseguridad
https://www.telam.com.ar/notas/201910/399894-reaparecio-gustavo-beliz-en-un-seminario-en-la-santa-sede.html
ALAI, América Latina en Movimiento