Vía Costarricense
Johnny Soto Zúñiga
Conmemorando el 70 aniversario de la Guerra de Liberación Nacional, me voy a referir a un personaje insigne, quien con sus acciones y escritos extraordinarios quedó para siempre en las páginas de oro de la historia de la República, y que es parte de los antecedentes y orígenes del pensamiento socialdemócrata costarricense y el Partido Liberación Nacional.
El Caudillo don José Figueres Ferrer, nació el 25 de setiembre de 1906.Autodidacta, ideólogo, estadista, visionario, héroe, tres veces presidente de la República y un verdadero demócrata en todo el sentido de la palabra.
Como líder histórico es querido por sus seguidores y odiado por sus detractores; por ser un hombre de armas tomar y lo demostró cuando lideró el Movimiento de Liberación Nacional en la guerra civil de 1948.
Desde muy joven estableció su empresa agrícola-industrial en su hacienda “La Lucha sin fin”, en San Cristóbal Sur en Desamparados y las montañas de Tarrazú, por lo que aprendió a trabajar la tierra, rodearse de campesinos y saber lo que es ayudar a la producción del país. Luego, a los 35 años irrumpe a la vida pública, cuando el 8 de julio de 1942 en la radioemisora América Latina da un discurso radial cuestionando y denunciando valientemente lo que sucedía con el gobierno de turno, irregularidades y actos corruptos (Calderón Guardia 1940-1944); ahí mismo en la radio lo detienen y lo sacan a la fuerza, lo encarcelan y cuatro días después lo expulsan rumbo a El Salvador, pasa luego a Guatemala y por último se establece en México, es un destierro de su propio país, y una violación a su libertad de expresión y derechos fundamentales.
Regresa al país en 1944, luego de pasar unos años en el exilio, donde establece lazos con la Legión Caribe, que luchaba contra las dictaduras militares, se constituye en un líder y es uno de los fundadores del Partido Social demócrata (fusión del Centro para el Estudio de los Problemas Nacionales y el Partido Acción demócrata), antecedentes directos del Partido Liberación Nacional fundado en 1951.
Antes de 1948, nuestro país era pobre, la mitad de los costarricenses andaban descalzos, el 77% de los trabajadores carecían de zapatos, el 80% de los maestros no habían concluido sus estudios. La explotación de la electricidad, las telecomunicaciones, los ferrocarriles, la tierra estaba en manos de monopolios privados (La Electric Bond and Share, la Northern Railway Company y la United Fruit Company).
Don José Figueres, luego de triunfar como Comandante en Jefe del Movimiento de Liberación Nacional en la guerra civil de 1948, funda y preside la Junta Fundadora de la Segunda República durante 18 meses, e inicia el camino de un fortalecimiento de nuestra democracia republicana sin precedentes, posteriormente entrega el poder a don Otilio Ulate Blanco, electo presidente en las elecciones irrespetadas de 1948 (Pacto Ulate-Figueres).
Figueres Ferrer, forma un Estado Benefactor fuerte, decreta la nacionalización bancaria, la abolición del ejército (primer comandante triunfante de una Guerra Civil que elimina el ejército como institución pública castrense), fortalece la libertad, moderniza la economía, la industria, cooperativas, crea y fortalece el Tribunal Supremo de Elecciones como institución imparcial que verdaderamente garantice los procesos elecciones en forma democrática.
En 1949, crea el Instituto Costarricense de Electricidad; se decreta el estatuto de Servicio Civil y se decide la incorporación de Costa Rica a la UNESCO.
Se sentaron las bases jurídicas e institucionales de una nueva Costa Rica, más de 800 decretos-ley, luego fueron ratificados en su mayoría por la Asamblea Nacional Constituyente de 1949, lo que se puede considerar una verdadera transformación democrática impulsada por don Pepe Figueres. Una Asamblea Constituyente conservadora impidió una más moderna y gran transformación como lo querían los miembros de la Junta Fundadora y los diputados socialdemócratas, siendo el más destacado el Lic. Rodrigo Facio Brenes.
El 12 de octubre de 1951, en la finca La Paz de San Ramón de Alajuela, se funda el Partido Liberación Nacional, siendo sus principales fundadores cuatro personajes que todos llegaron a ser presidentes de la República (José Figueres, Francisco J.Orlich, Daniel Oduber y Luis Alberto Monge). Su Carta Fundamental aspira a construir una democracia fundamentada en la justicia social, libertad política, respeto al derecho de propiedad como “un hecho social generalizado”, erogaciones destinadas a educación, salud y seguridad social.
En 1953, Don José Figueres, es elegido Presidente de la República por 123.444 votos, contra a Fernando Castro Cervantes, obtiene 67.324 votos. En su gobierno, establece relaciones con una serie de movimientos socialdemócratas de América Latina y fortalece sus relaciones con gobiernos afines a este pensamiento político. Es muy condecorado a nivel internacional y se convierte en un personaje continental, muy reconocido a nivel mundial. Crea el Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo, el Instituto Costarricense de Turismo, se promulga la nueva ley fundamental de Educación.
En 1955, enfrenta y rechaza la segunda contrarrevolución calderonista, apoyada por el dictador nicaragüense General Anastasio Somoza García y otros dictadores del Caribe.
Para 1970, vuelve a ser electo Presidente de la República, con 64 años de edad. Inicia la universalización de las relaciones exteriores del país (pasa de tener relaciones con 45 Estados en 1970 a tener relaciones diplomáticas con 81 Estados en 1974), creación de la Guardia de Asistencia Rural, se funda el Instituto de Fomento y Asesoría Municipal, se crea el Instituto Mixto de Ayuda Social, se crea la Dirección General de Adaptación Social. Reforma del artículo 9 constitucional, para establecer la edad mínima de 18 años para obtener la ciudadanía. Se crea el Instituto Tecnológico de Costa Rica. Se crea el Ministerio de Cultura, Juventud y Deportes.
Se crea además, la Asociación Bananera Nacional. Se decreta la nacionalización de la Northern Railway Company. Se crea el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas. Creación de la Corporación Costarricense de Desarrollo S.A., creación de la Universidad Nacional de Costa Rica, creación del Instituto de Fomento Cooperativo, de la Comisión Nacional de Asuntos Indígenas. Creación de ley que promueve la universalización de los seguros sociales. Se funda la Orquesta Sinfónica Juvenil y profesionalización de la Orquesta Sinfónica Nacional. Se da el Código de Familia. Se crea la Refinadora Costarricense de Petróleo. Se crea el Instituto Nacional sobre Alcoholismo.
Por otra parte, el pensamiento de Figueres Ferrer, sus ideas están impresas en muchas publicaciones, lo que consolida su pensamiento socialdemócrata, fiel creyente del sistema democrático, la libertad de expresión, el sufragio y el respeto al sistema de partidos políticos y la división de los tres poderes (Ejecutivo, Legislativo y Judicial).
Sus libros son: Palabras gastadas. Cartas a un ciudadano en 1956. La pobreza de las naciones en 1973. Así nacen las palabras y los cuentos en 1976, Franjas de luz: arboricultura en el paralelo 10 en 1979. Cubaces tiernos en abril en 1975, su último libro “el espíritu del 48” en 1987.
También existen múltiples artículos y publicaciones suyos, sobre su vida y pensamiento escritos por costarricenses y extranjeros.
Fallece en 1990, y como homenaje póstumo, la Asamblea Legislativa lo declara Benemérito de la Patria, el 13 de noviembre de 1990.También, una encuesta organizada por el diario La Nación, lo declara “el más esclarecido costarricense del siglo XX”. Su influencia y legado ha continuado en el siglo XXI.
Es el Arquitecto de la Segunda República, constructor de la Costa Rica contemporánea, figura política del siglo XX y en realidad un Héroe Nacional de toda la historia costarricense. No obstante, lo grave, es que sus enemigos de siempre, siguen sin reconocer su grandeza, en forma mezquina, tratando de endilgarle epítetos como que destruyó nuestra democracia, nada más lejano de la realidad, cuando don José Figueres, ha sido el estadista y líder que más ha fortalecido la democracia de Costa Rica, como arriba lo he señalado, con sus acciones y decisiones ha quedado bastamente demostrado.
Estos “enemigos de siempre”, han expresado que la corrupción del país inició desde la venida del norteamericano Robert Vesco, y otros inversionistas extranjeros, debo decir que estos extranjeros vinieron a invertir en forma privada, como lo hacen muchos en la actualidad, desarrollando empresas y generando empleo, (el orígen de los dineros de estos inversionistas, si son producto de actividades ilícitas o no, deben ser en su oportunidad investigados y determinados por los tribunales internacionales y nacionales, ya que en Costa Rica está establecida la división e independencia de los poderes).
Es injusto e inverosímil, endilgarle a Don José Figueres Ferrer, y al Partido Liberación Nacional, ser los iniciadores de la corrupción en Costa Rica, o peor aún afirmar que son los destructores de nuestra democracia, cuando ésta es un mal social, que debe atacarse con leyes duras y acciones fuertes dentro de la sociedad y el ordenamiento jurídico, como lo ha venido realizando el Poder Judicial en los últimos 60 años.
Don Pepe Figueres nunca eliminó las reformas legales importantes (garantías sociales, CCSS, Código de Trabajo, Universidad de Costa Rica) del gobierno de Calderón Guardia de 1940-1944, todo lo contrario las fortaleció a través de sus acciones. “Los enemigos de siempre” de don Pepe Figueres, en forma soez, mezquina y hasta troglodita, siguen sin reconocer el fortalecimiento a la democracia y las acciones realizadas en la búsqueda “del bienestar del mayor número de ciudadanos” y sigue vigente la proclama: “el día en que terminemos la guerra contra la mala fe, iniciaremos una nueva guerra: la guerra contra la pobreza”. (Segunda Proclama de Santa María de Dota, 1 de abril de 1948)