El Sistema Político Chino

Vía costarricense

Johnny Soto Zúñiga

La costarricense Patricia Rodríguez Holkemeyer nos regala un interesante libro: “Sistema político Chino. Más allá de los estereotipos”, que se refiere a la reforma política e institucional que se ha venido desarrollando en el proceso de la República Popular de China y su apertura económica, y que prácticamente ha sido ignorada por Occidente, con algunas excepciones. Se afirma también que el Partido Comunista Chino (PCC), ha sido flexible, adaptable y pragmático y ha venido cediendo a las demandas de mayor democratización; y tampoco China está muy interesada en difundir sus reformas internas en su sistema. La autora es MPA de la Universidad de Harvard y MBA de la Universidad de Costa Rica. Catedrática e investigadora en la Escuela de Ciencias Políticas de la UCR y ex ministra concejera de la Embajada de Costa Rica en la República Popular de China (2008-2010) y ha viajado muchas veces a este país para poder conocer, investigar y hacer entrevistas con diversos actores.

La autora nos señala que durante los últimos 30 años se ha dado una modernización sin precedentes en este gigante asiático; una serie de cambios bastaron para que un país campesino se pasara a una sociedad urbana que hasta compite en la carrera espacial; con urbes como Shanghai y Pekín; con ciudades llenas de rascacielos y complejo de edificios con una arquitectura futurista. Dice la autora: “Lo deja a uno atónito que un país que, en 1978, carecía de infraestructura vial, con callejuelas recorridas por campesinos con carretas jaladas por mulas, casi en el centro mismo de Pekín (lo digo como testigo privilegiado, pues viví en Pekín dos años, de 1976 a 1978),con una industria y agricultura deficientes y empobrecedoras, así como altos índices de analfabetismo, pasara a reconstruir desde sus bases todo un país, con índices de crecimiento que incluso en el 2008,con un mundo en recesión, creció casi un 8%, mientras el resto del mundo se alegraba si lograba crecer un 0,5%.” (Op.Cit. Pág.xiii)

El protagonismo mundial de China es indudable; en todos los países del mundo se habla del potencial económico de esta República; muchos países comercian y tiene Tratados internacionales con este país. Los proyectos de cooperación de China con África, Asia y América Latina son innumerables y no lo hace ningún otro país del lado occidental. China entendió que el mundo avanzó hacia la globalización y por eso desarrolló una rápida estrategia de de apertura política y económica; y lo paradójico siendo un país comunista y proteccionista en sus viejos tiempos. No obstante en China sigue gobernando un partido político único dentro de toda la estructura del Estado. China se deshizo de su antiguo sistemas de comunas, donde se distribuyó la tierra desde 1949 implantada por Mao-Zedong; bajo un sistema marxista y se terminó en 1979, y cambió a una convivencia de sistemas, que llaman “apertura y modernización”; pero siempre bajo el control y planificación estatal.

Lo interesante que toda acción empresarial sea pública o privada, todo emprendimiento debe ser parte del “proyecto nacional chino”; en el cual el Partido Comunista dicta todas las políticas a seguir y esto les ha dado positivos y exitosos resultados. Para los chinos es su forma de democracia bajo un partido político único; muy diferente a la mayoría de los países occidentales donde conviven varios partidos políticos en el juego electoral y democrático. La autora señala que estudiar el sistema político chino a la fecha se considera desconocido e incomprendido; y dejado de lado por el mundo occidental. Si es difícil estudiar la historia milenaria de más de 5000 años de este país; su diversa cultura, su filosofía de vida, su especie de religión laica, el confucionismo, sus consultas regionales que sirven como mecanismos de alimentación y retroalimentación en la toma de las decisiones por parte del Estado, etc.

La autora señala que: “Deng Xioping (1904-1997), al inicio de la reforma económica enfatizaba en la necesidad de que el pueblo liberara su mente, de manera que se pusiera atención a los hechos y no a los dictados ideológicos. Desde entonces se podría visualizar, en la intención del Gobierno chino, el deseo de otorgarle a los ciudadanos cada vez más libertad de pensamiento y de expresión de la que tenían durante la historia imperial y bajo el gobierno de Mao (aunque se han dado retrocesos en la libertad de expresión en algunas oportunidades), pues el éxito de la reforma económica basada en la economía de mercado requería de un pueblo que fuera capaz de pensar de manera creativa para superar el precario estado en que se encontraba, en ese entonces, la economía china.” (Op. Cit. Pág. 9)

Todo este proceso de reforma y de institucionalización china no ha sido lineal, sino un proceso abierto donde ha entrado una serie de actores y se conoce que el gobierno chino no está muy interesado en dar a conocer sus reformas al sistema político; lo consideran un tema interno; que no debe trascender más allá de sus fronteras; diferente a sus operaciones económicas e intercambio con los países del mundo que tienen relación con ellos. La historia china es muy rica en todo el sentido de la palabra; incluso fue unos de los países más desarrollados del mundo (Durante las dinastías Han (206 a.C) y Tang, hasta la Era Dorada “Kang-Yong-Quian” de la Dinastía Qing). La autora concluye que ya en la época contemporánea: “El siglo de humillaciones, el enojo popular causado por el apoyo recibido por Japón en el Tratado de Versalles al concluir la Primera Guerra Mundial y la incapacidad de la República de unificar al país y establecer un programa de desarrollo económico, facilitó la rápida difusión del pensamiento marxista en todo el territorio y el consecuente triunfo del ejército popular liderado por Mao Tse Dong, en 1949.” (Op. Cit. Pág. 222)

También la autora concluye que: “El pueblo chino, pese a las dificultades, hoy día está conforme con el paso en que el Gobierno ha llevado a cabo el proceso de desarrollo institucional y político del país. El pueblo sabe que en materia institucional y política no se deben tomar decisiones precipitadas como establecer de un día a otro un sistema electoral al estilo occidental, pues aún está vivo el espectro de la inestabilidad política del pasado. Pero la autoridad y la legitimidad del gobierno del PCC, no dependerá en el futuro solamente de sus logros económicos o militares, sino de la percepción que el pueblo tenga sobre la calidad moral de sus líderes. Esta exigencia de la sociedad está clara en la mentalidad de la jerarquía del Partido y sus acciones se encaminan a colmar ese anhelo de la población, aunque la transformación moral de la sociedad requiere la acción concertada de todos y el proceso de reforma institucional en esa dirección, toma tiempo.” (Op.Cit. Pág. 238)

El gobierno chino ha venido atacando la corrupción entre los funcionarios públicos y otros actores y de ahí que ha tomando fuertes acciones en esta dirección. Además el PCC ha creado instancias como las encuestas, debates y deliberaciones; donde se permite que los ciudadanos se manifiesten y se pueda conocer la voluntad de las mayorías (estas son formas democráticas más parecidas a las que el mundo occidental conoce). China ha comprendido que sus mejores acciones deben ir en desarrollo del bienestar de las mayorías y de la sociedad en general; ha enmendado errores y siempre avanzando hacia adelante; ha venido aprendiendo de otras culturas y sistemas políticos extranjeros. Se reitera que desde que Den Xiaopin se constituyó en el padre de la reforma económica aperturista o “socialismo de mercado o economía de mercado”, abriendo a China al capitalismo y a los mercados mundiales; y expresó una frase clásica: “No importa que el gato sea blanco o negro, mientras pueda cazar ratones, es un buen gato”. Con esto lanzó a China hacia el pragmatismo y hoy se convirtió en la segunda economía mundial, y sigue sin parar la marcha hacia el gran desarrollo social y económico.

Finalmente, invito a leer este profundo e interesante libro de la costarricense Patricia Rodríguez; que nos ayuda a comprender el complejo sistema político de este gigante asiático, la República Popular China; que hoy día nuestro país goza de tener relaciones diplomáticas y económicas, siendo que el intercambio comercial con China perdurará y crecerá con el tiempo; y que por lo tanto se hace necesario conocer todo de este hermoso y más poblado país del mundo.