Siempre estuvo actuando en los Gobiernos de don Cleto, don Ricardo, don León, don Mario y don Francisco. Fue persona de confianza de estas gentes, pues llegó a ocupar altas posiciones oficiales, contándose entre ellas la de Gobernador de la provincia de San José.
En cierta oportunidad, cuando ejercía funciones de Gobernador, llegó a su despacho a visitarlo un personaje de la política de Colombia. Manolo, como era su costumbre, lo hizo pasar inmediatamente y lo prodigó de atenciones.
Nos cuenta el propio señor Rodó que, cuando estaban los dos, el colombiano y él conversando animadamente, se introduce a su despacho un limpiabotas y gritando hasta más no poder, le dice:
—»MANOLO, LE LIMPIO!!!»…