Plazoleta de la Soledad

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Carlos Revilla Maroto

Carlos Revilla

Continúo con los espacios públicos en San José. En esta oportunidad se trata de un lugar muy especial, y con mucha historia, aunque por su tamaño no se le considera una plaza o parque, más bien es una plazoleta, es decir lo que se considera una plaza pequeña. Me refiero por supuesto, a la Plazoleta de la Soledad, que ahora le pusieron el nombre de Plaza de las Artes.

En la plazoleta es donde nace la avenida 4, ahora convertida en el bulevar peatonal de la “Unión Europea”, la entidad que en buena parte lo financió, que llega hasta el final de la avenida en el parque de la Merced y el Hospital San Juan de Dios, al otro lado de la ciudad. Por supuesto, como muchos lugares en tiquicia, nadie lo llama así y solo le dicen el bulevar de la avenida 4. En el lugar destaca una placa que menciona el bulevar.

También a solo unos 50 m al norte, en la avenida segunda está ahora lo que se conoce como la entrada principal al Barrio Chino, en la avenida 2, en intersección con calle 9, donde se localiza el famoso Arco Tang, donde inicia otro bulevar peatonal, que termina en avenida 14, y que otrora se llamaba Paseo de los Estudiantes, aunque muchas personas lo siguen llamando así. Incluso al final del bulevar —en la bomba de gasolina— hay un monumento, inaugurado en abril del 2016, en homenaje al movimiento cívico estudiantil de 1919, en contra de la dictadura de los Tinoco; liderado por el Liceo de Costa Rica, el Colegio Superior de Señoritas y el Colegio Seminario, y que fue el motivo que dio origen al nombre de “Paseo de los Estudiantes”, que parece ahora es de solo 200 m de extensión, que es la distancia que resta hacia el Liceo de Costa Rica en avenida 18.

El denominado barrio chino, en realidad se ubica en los barrios de Soledad y González Víquez, en una franja con extensión de 12 cuadras: entre calles 7 y 11 y desde la avenida 2 hasta la avenida 14.

A través del tiempo la plazoleta ha sufrido muchas transformaciones. En 1993 el espacio fue remodelado siguiendo un diseño del Ing. Franklin Amén Chen. Se procedió a eliminar las calles y la rotonda, que separaban los espacios, instalándose algunos monumentos y bancas de hierro fundido de estilo barroco. Lamentablemente eliminaron el enorme árbol de Guanacaste que por muchos años estuvo allí, conocido como El Árbol de la Confraternidad Latinoamericana, pues al sembrarlo se incluyó tierra de 21 países de la región, que había sido plantado en 1948. En 1999 plantaron otro, que en la actualidad luce esplendoroso. En el 2005 se produjo una nueva remodelación del sitio que incluyó unos anillos metálicos, que la verdad desentonan bastante, y fue cuando se le cambió el nombre a “Plaza de las Artes”, aunque por supuesto, nadie la llama así y siguen diciéndole “Plazoleta de la Soledad”.

La plazoleta incluye un área de juegos infantiles y un pequeño anfiteatro para presentaciones musicales.

Rodeando los anillos metálicos hay una colección de mosaicos, creados en el 2004 por diferentes personas, cuyo nombre es ya casi ininteligible, que se han deteriorando mucho con el paso del tiempo, y que en sus inicios debieron representar algo o tener algún propósito, pero que ahora no sabemos de que se trata.

Con el cambio de nombre se incluyeron algunas artes, representadas por esculturas, como los anteriormente mencionados anillos metálicos o la estatua de John Lennon, aquel famoso cantante de los Beatles, una escultura en bronce, de 2,46 m de alto, elaborada por el artista cubano José Ramón Villa, inaugurada por la municipalidad de San José, el 25 de Noviembre del 2011.

Dentro de estas, destaca una obra de bronce de una voluptuosa mujer con una guitarra entre sus brazos, creada por el cubano naturalizado costarricense Alexy Palenzuela. La escultura se llama “Gracias” y fue traída desde Bogotá, Colombia, donde fue modelada y fundida. Mide 1,80 m de alto, 2 m de ancho y 1,80 m de profundidad. Según su creador lleva ese título no solo como un agradecimiento a los costarricenses, sino también como un reconocimiento a los buenos modales de los ticos, que siempre damos las gracias.

Recientemente fue pintado un minimural en la parte del pretil central de la plaza con la descripción de todas las artes, mostrando personajes y obras de cada una de las partes, incluidos algunos costarricenses (se puede ver completo en la galería).

Por muchos años estuvo en este lugar un busto de Carlos Gardel, el más conocido representante del género en la historia del tango; llamado “el zorzal criollo”, que reubicaron en el “Paseo de la República Argentina”, al costado oeste de la Casa Amarilla. También hasta hace poco, estuvo el busto de José Gervasio Artigas, el héroe de la independencia de Uruguay, que fue trasladado al Parque Morazán.

A finales del 2022 develaron en el lado sureste de la plazoleta, una estatua del argentino Gustavo Cerati, el líder, vocalista, compositor y guitarrista de la banda de rock Soda Stereo; todo un referente del rock en español. La escultura es una donación de la República Argentina con motivo del Bicentenario de la Independencia, conmemorado el año anterior. Fue elaborada por el escultor Martín Di Girolamo y lleva por nombre “Siempre es hoy”. Está construida con una base de arcilla sobre una estructura metálica, y cuenta con una altura de 2,30 m. El pedestal es muy alto, lo que hace se destaque bastante.

El entorno de la plazoleta es muy bonito, destacándose varias casas, especialmente la Casa San Pancracio, que fue declarada patrimonio histórico arquitectónico o la del Hotel Colonial en calle 11, detrás de la iglesia.

La plazoleta está directamente ligada a la Iglesia Nuestra Señora de La Soledad, por lo que a continuación les transcribo un breve repaso de su historia, que tomé de las publicaciones de Circuitos Culturales de la ciudad de San José, a cargo del Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural del Ministerio de Cultura y Juventud.

En 1845 existía en el sitio un modesto oratorio, creado por la familia Pacheco Zamora y dedicado a la Virgen de la Soledad. En 1851, el Obispo Anselmo Llorente y La Fuente ordenó la construcción de una iglesia para el naciente barrio de la zona. Los planos arquitectónicos fueron encargados al Arq. Hugo G. Tonkin. La construcción propiamente dicha inició en la década de 1870 y todavía a fines de la década de 1880 no se había terminado. Estilísticamente posee una influencia del neoclásico, tiene tres naves y sus paredes fueron levantadas en ladrillo y calicanto. Cuenta con un amplio atrio y un pórtico flanqueado por dos torres.

El templo surgió a la vera del Camino Real que conducía a Desamparados. En 1909 se convirtió en parroquia para cubrir los nacientes barrios que empezaban a consolidarse hacia el sector Sureste de la ciudad, en lo que antiguamente fueron los potreros de los Gallegos. En su interior se puede apreciar una imagen de la Virgen de la Soledad, obra del escultor guatemalteco Pedro Gallardo, encargada por una vecina llamada María Soledad Esquivel. El órgano de tubos procede de la casa Cavaillé Coll de Francia. En 1930, siendo cura párroco del templo Carlos Borge, el Obispo Rafael Otón Castro dispuso la adquisición en Europa de cuatro campanas a la casa Paccard en Annecy, ubicada en Altos de los Alpes, Francia. Fueron consagradas y bautizadas como “Fe”, “Esperanza”, “Caridad” y “Ave María. Fue declarada patrimonio histórico arquitectónico el 8 de Diciembre de 1999.

De la misma publicación tomé la historia de la plazoleta:

Antes de 1885, el espacio localizado frente a la Iglesia de la Soledad era un descampado sin ninguna utilidad pública. En 1890, la Municipalidad de San José dispuso construir en el sitio los llamados “Mercaditos Municipales de La Soledad”, para la venta de frutas, legumbres y verduras, que eran traídas en carretas desde Aserrí, Desamparados y otras poblaciones del Sur de la ciudad. El diseño de los mercaditos correspondió al Arq. Lorenzo Durini. Estos eran dos amplios galerones de madera, techados con láminas de hierro galvanizado y provisto de estantes, pero sin paredes exteriores. La protección la daba una simple verja de hierro. Subsistieron hasta 1908, cuando dejaron de funcionar por la poca afluencia de clientes. Se desmontaron los galerones y se dejaron los dos espacios con las rejas de hierro, ahora convertidos en jardines. En 1910 se procedió a sembrar algunos árboles y posteriormente, cuando se consolidó el Paseo de los Estudiantes, se instalaron unos bancos.

Posiblemente la eliminación de los “mercaditos” también tuvo que ver con la idea de convertir las plazas existentes frente a los templos, en parques, fenómeno que ocurrió en toda la ciudad. En 1937, la Iglesia de La Soledad traspasó el espacio al dominio municipal a cambio de que se procedieran a pavimentar las calles alrededor del templo.

Por ser la cantidad de imágenes muy grande, hice un álbum de Facebook, que incluye todo lo que les he mencionado, y algunas imágenes antiguas, de las que hay muchas, así que escogí las que creo son las mejores.


 
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Actualizada 06-12-2022

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