Liberación Nacional en crisis (I)

Vía costarricense

Johnny Soto Zúñiga

Johnny Soto Zúñig

El Partido Liberación Nacional fundado en 1951 por el Caudillo don José Figueres Ferrer; y quien ha gobernado desde su primera vez en 1953 y hasta el siglo XXI en muchas ocasiones; recibió la peor paliza de su historia en las pasadas elecciones nacionales del 4 de febrero del 2018, obteniendo apenas alrededor de 378.000 votos válidos decreciendo en comparación con el 2014 en la primera ronda que obtuvo 610.634 votos, que le permitió al menos pasar a la segunda ronda electoral o balotaje. En esta ocasión ni tan siquiera logró colarse y pasar a la segunda ronda electoral. Los partidos Restauración Nacional (RN) y Acción Ciudadana (PAC) oficialista el del gobierno; si lograron pasar y se medirán el próximo 1 de abril. Los porcentajes fueron: RN con el 24,9%; PAC con el 21,6%, PLN con el 18,6%, PUSC con el 16%, PIN con el 9,5% y el resto con porcentajes mínimos.

En esta primera parte expresaré algunos de los factores o causas del decaimiento o crisis del otrora glorioso PLN; y como ha venido mermando su credibilidad y popularidad ante el pueblo costarricense; y más aún desde el rompimiento del bipartidismo en el 2002 y la entronización pareciera para quedarse por muchos años del multipartidismo. Prácticamente la lealtad partidaria se ha venido extinguiendo y los otrora partidos políticos mayoritarios como el PLN y el PUSC, decrecieron y ahora son parte del grupo de los minoritarios. Curiosamente el PLN sigue teniendo la bancada minoritaria mayor en la Asamblea Legislativa con 17 diputados electos del total de 57 diputados que conforman el denominado primer Poder de la República.

A continuación algunos de los factores o causas de la crisis en que cayó el PLN y que para algunos es una marca desgastada a través del tiempo:

1- Falta de disciplina partidaria especialmente de muchos dirigentes y militantes. Cada quien hace lo que le da la gana y no existe un sentimiento de pertenencia hacia la organización política. Si nadie pone orden; el afiliado cree que puede actuar conforme a su leal saber y entender. Y no se trata de limitar la libertad de pensamiento; es que en toda organización deben existir reglas claras y disciplina; de lo contrario se cae en el caos y desorden anárquico.

2- Arrear las banderas más preciadas que defendió desde su fundación; por lo que la clase media del país que siempre fue leal con el PLN; lo ha venido paulatinamente abandonando y no se siente representado por este partido político.

3- Giro hacia una derechización sin precedentes; con el cuento chino de representar ampliamente a diversos sectores; esto produce que pareciera un partido que representa los sectores económicamente más fuertes. A nivel nacional e internacional se le observa como un partido de derecha; que dejó de ser de centro o social demócrata. El abandono de los principios liberacionistas de la Carta Fundamental, han quedado a un lado.

4- Un grave error darle participación en puestos de relevancia a gentes no liberacionistas; ni mucho menos que comulguen con sus principios y en muchos casos en detrimento de profesionales y dirigentes liberacionistas con amplia capacidad; esto molesta a muchos que se consideran utilizados para que suban otros y ocupen las altas posiciones de gobierno.

5- El PLN se ha venido agarrando con amplios sectores de la sociedad como sindicatos, gremios profesionales, sectores agrícolas y productivos; y una serie de grupos de presión; que no se sienten que este partido político los ayude a salir adelante en sus múltiples problemas.

6- Incidencia nula en los colegios de enseñanza media y las universidades; donde los jóvenes estudiantes no consideran al PLN como digno representante de sus inquietudes y preocupaciones.

7- Incongruencia ideológica en muchas decisiones políticas; que ante la opinión pública, se le observa como dubitativo; falta de una hoja de ruta clara; y pareciera que más se pega a las decisiones o lineamientos de otros partidos políticos; caso típico en la Asamblea Legislativa; donde han venido apoyando a otros líderes o actores políticos; generando una falta absoluta de identidad partidaria.

8- Casi siempre en los escándalos de corrupción que salen a la luz pública, están involucrados partidarios liberacionistas; esto genera mucha desconfianza en la opinión pública; que lo generaliza como un partido político lleno de corruptos, poco transparente y que constantemente cometen actos ilícitos. Por eso, se debe revisar con lupa los nombramientos de los funcionarios públicos; y no caer en simples “amiguismos” o familiares de los altos funcionarios nombrados por el Presidente de la República.

9- El PLN debe hacer un análisis exhaustivo de la hoja de ruta ideológica en diversos temas: fiscales, infraestructura, generar empleo, comercio exterior, asuntos ambientales, etc.; si bien el PLN tiene muchos estudios y documentos impresos; no ha logrado calar en la opinión pública, y transmitir de manera positiva sus mensajes en beneficio del desarrollo del país.

10- Sobre los temas internos de la organización política; algunos se han creído el “cuento chino” de realizar convenciones abiertas para elegir a sus candidatos, permitiendo que lleguen a votar gentes no liberacionistas (es decir personas que simpatizan con otros partidos políticos se dan el lujo de elegir al candidato presidencial). Esto no le ha servido para nada al PLN; ni suma nada. Más bien debe hacerse una elección interna entre liberacionistas del candidato y luego presentar su programa al electorado en general en las elecciones nacionales.

11- Una pésima elección de candidatos a diputados; muchos sin ningún arraigo o liderazgo en su cantón o zona electoral; que molesta a la dirigencia de base; que se considera que solamente sirve de trampolín o escalera para trabajar al servicio de algunos “amigos” del candidato o cúpula partidaria.

12- La provincia de San José no debe seguir “poniendo los muertos” y aportando los 4 o 5 primeros candidatos a diputados nombrados a “dedo” “dizque” nacionales (que de nacionales no tienen nada; ni son superiores al resto de candidatos; haciendo en el imaginario partidario una odiosa y estúpida discriminación entre los supuestos candidatos a diputados “nacionales” y “locales”; que nadie entiende; y solamente ha servido para que se metan candidatos hasta de otras provincias por San José; esto “ya es odioso y molesta” constantemente a las dirigencias y militancia cantonales. Ya no son los tiempos del “bipartidismo” que el PLN podía elegir hasta 9 o 10 candidatos a diputados; ahora si acaso 4 o 5 diputados por San José. Al candidato se le podría respetar que elija el primer lugar por las provincias de San José y Alajuela que son las que eligen más plazas en la Asamblea Legislativa (19 y 11 diputados respectivamente).

13- El PLN cayó en una lucha de “egos” sin precedentes entre sus máximos dirigentes; que pareciera que actúan como un partido político compuesto a lo interno por pequeños partidos políticos; donde cada uno jala para su saco. Además se le nota como un partido lleno de intrigantes, odios y arrogancia de algunos de sus dirigentes por tomar el control del PLN; irrespetando los principios y Estatutos partidarios. Los insultos y bajonazos de piso, son constantes; lo que ante la ciudadanía se le ve que existe un total “canibalismo”.

Hasta aquí llego con esta primera parte de los factores y causas de la enorme crisis en que cayó el PLN; una organización que le ha aportado mucho al país; en obras y realizaciones; han existido errores; pero más los aciertos que los desaciertos; y la historia es imborrable; y su legado está ahí; así como el aporte personal de muchos hombres y mujeres que han ocupado diversos cargos públicos y dado sus soluciones. Por ahora lo que cabe es entrar sin “gavetismos”, ni egoísmos en un análisis profundo de estas causas; con el fin de lograr sobrevivir al PLN; y que en realidad pueda seguir siendo una organización al servicio de la sociedad y sus ciudadanos; de lo contrario puede entrar en un estado de coma; y hasta en peligro de extinción; siendo perjudicial para nuestra democracia republicana y soberana.

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