El árbol de la sabiduría

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Carlos Revilla M.

Carlos Revilla

Tengo muchos años, tantos que ya ni me acuerdo, de ir con cierta regularidad al Balcón Verde (oficialmente Casa Liberacionista José Figueres Ferrer). Aunque me queda al otro lado de la ciudad, por mi trabajo y lugar donde vivo, siempre trato de hacer el esfuerzo por ir, cuando hay alguna actividad de interés. En la época de campaña es casi obligación ir al Balcón, que parece un hormiguero por la gran cantidad de gente y actividad que tiene. Pero fuera de campaña, como ahora, tener que ir es algo especial, porque denota que hay actividad, que el partido está vivo. Y en las últimas semanas me ha tocado ir varias veces.

En realidad no es de esto de lo que quiero escribir, aunque está muy relacionado. Como les decía, tantas veces que he ido al Balcón, y es hasta hace poco, que noté en el pequeño parque a la par (el edificio colinda con el), una especie de árboles de metal muy curiosos, tanto que decidí ir a verlos. Y la verdad me llevé tamaña sorpresa, pues nunca imaginé encontrarme algo así.

Son de metal muy pesado, intenté moverlos y que va, es casi imposible para una sola persona, y por lo que averigüé están ahí más o menos desde el 2004, o sea, ya tienen más de diez años, y a pesar de estar a la intemperie, se conservan casi sin deterioro, lo que habla muy bien de su construcción y materiales. Y curioso, tampoco se los han robado.

Me dijeron que fueron puestos ahí por René Castro, en su época de Secretario General, que por cierto fue muy breve, solo unos pocos meses. Se ve que son muy a su estilo, pues el quiso cambiar el emblema del PLN a un árbol. Tenía algunas ideas sobre conectar al partido, y las ramas del árbol significaban las redes que se pegaban al tronco o algo así. También cuando fue Canciller hablaba de la política exterior como un árbol.

¿Bueno, pero que son estos árboles?

Hay uno, el blanco, que está pintado con lo que parecen dibujos infantiles, que la verdad no se lo que son. Tal vez René Castro en algún momento nos cuente que significa, por el momento, para mi, son jeroglíficos.

En cambio el segundo, el verdiblanco, está lleno de citas de líderes y personajes liberacionistas. La recopilación de frases es algo así como un ideario, que resume el pensamiento liberacionista. Debido a esto lo bauticé «el árbol de la sabiduría liberacionista».

Las citas me parecieron tan buenas, que decidí transcribirlas. Por supuesto una buena parte son de don Pepe (¿de quién si no?) y también hay de don Chico y otros. No pongo la procedencia para no hacer muy largo el texto.

Veamos:

La abundancia de facilidades educacionales o culturales, debería ser el objetivo final del desarrollo económico.

Nuestro interés es eliminar la pobreza, pero al mismo tiempo podemos estar pendientes del desarrollo cultural del pais, pues no debemos llegar a ser una sociedad de la abundancia sin el cultivo del espíritu.

Los costarricenses de nuestro tiempo hemos prestado bastante atención a la enseñanza, pero muy poca a la cultura superior, al cultivo do las ciencias y las artes. Necesitamos más música, más pintura, y escultura, más filosofía, más poesia, más literatura.

El campesino costarricense cuando se le vuelca Ja carreta, no se sienta a llorar el percance. Rehaciendo su ánimo, la levanta, la pone sobre sus ruedas y sigue caminando.

La democracia es una concepción optimista de humano: presupone que el hombre es un ente moral, capaz de educarse, de gobernarse, de vivír en sociedad conservando su dignidad individual, de acatar sus propias leyes y de encauzar su vida hacia lo más alto.

Para que tractores sin violines…

Esta debe ser, en nuestro siglo, la meta de todos nuestros esfuerzos, basados en el aprovechamiento de la ciencia, e inspirada en un sentimiento de solidandad humana: producir suficiente riqueza para sufragar el de un alto nivel de cultura, de salud, y criterio moral, generalizado a todos los hermanos.

En vosotros, hombres de mañana, y en nosotros, los hombres de hoy, está la fuerza necesaria que realzará este tercer gran cambbio que ha de dar a la nación que es nuestra patria una cosecha de bienestar para que la disfruten todos los costarricenses.

El nombre de la estrella que nos guie, debe ser, El bienestar del mayor número…

De este pueblo costarricense, que tiene sus raíces profundamente, enclavadas en un pasado glorioso, nace hoy un retoño prometedor, que habrá de producir, para bien de la patria y en un futuro próximo, nuevo tronco, nueva flor y nuevos frutos.

La posición que Costa Rica ocupa, como país de libertades, de respeto a la dignidad humana, de gobierno representativo, no debe perderse jamás.

Nos dolemos cuando los bosques se queman, o las tierras se erosionan, o los ríos fluyen sin producir energía. Lamentamos todo desperdicio de nuestros recursos naturales. Pero el mayor de los recursos, nuestro hombre, nuestro pueblo, solemos olvidarlo, y hasta desperdiciarlo.

El Estado no puede desentenderse de las necesidades de toda la población.

José Figueres Ferrer

Me comprometo hacia las generaciones venideras, ya que gobernar es, en gran parte, resolver hoy las necesidades de mañana. Nuestros hijos no deben pagar, con angustia y lágrimas, la improvisación del presente…

El Desarrollo Económico Social debe ir acompañado de los aumentos productivos en la que participan todos los individuos…

Francisco J. Orlich B.

Los liberacionistas no tememos ni a la globalización ni a sus desafíos

Una Costa Rica Integrada por las oportunidades

V Congreso Daniel Oduber Quirós

Las épocas modernas están cargadas de grandes preocupaciones y de una dispersión global de los asuntos económicos, políticos y sociales.

Algunos han pensado en la posibilidad de encontrar una vía distinta a los planteamientos políticos y económicos, diferente a la que se ha venido aplicando hasta el momento.

Enrique Obregón

Pensar en transparencia electoral, en lucha contra la pobreza, en justa distribución de la riqueza, en paz, en libertad y en democracia, es pensar en don Pepe. Es pensar en Liceración Nacional.

Carlos Manuel Vicente

Por qué hoy pretende la historia borrarnos si fue con la sangre de nobles patriotas que se rige el mundo.

Héctor Miranda

De la última la cita, me intrigó quien podría ser Héctor Miranda, a quien no recordaba. Investigué un poco, y resulta que es un excombatiente del 48, que escribió un pequeño folleto de poemas épicos sobre la Revolución del 48.

Como curiosidad les incluyo el poema de donde se sacó la frase.

La Historia se escribió con Sangre

“Por qué hoy pretende la historia borrarnos”
si fue con la sangre de nobles patriotas
que se rige el mundo y la civilización
desde hace dos mil años allá en el Calvario

clavado en la Cruz, Cristo el Salvador
regó con su sangre y dio su perdón
Y cuando expiró, el Creador
al hombre corrupto le dio Redención.

El circo romano, “El Loco Nerón”
con tigres y leones mataba cristianos
las fieras hambrientas les despedazaban
Y el pueblo pagano al “Loco” aplaudía.

Y allá en Francia, la muerte y la sangre
tomó La Bastilla rodando por cientos
los decapitados por la guillotina
la sangre la que es don de vida.

Estados Unidos contra los bretones
formó un mar de sangre en la Secesión
en la vieja Europa la primera guerra
millones de muertos, su sangre vertió.

El fatal eje nazi-falangista
del chacal Adolfo y de Mussolini
al viejo continente de sangre bañó
lo dice la historia, escrito quedó.

Se escribió en la historia de Santa María
de Mora y de Cañas y de Santa Rosa
la sangre vertida en Rivas y en Sapoá
la Guerra del Golfo de fecha reciente.

Porque si con fuego y con sangre
se ha escrito la historia contra los corruptos
los historiadores de esta Costa Rica
pretenden borrarnos, que ignoren los jóvenes

los años fatídicos allá en los cuarentas
vejamen, saqueos, y los linchamientos,
las cárceles llenas de hombres inocentes
que no comulgaban con la corrupción.

Brigadas de choque de los comunistas
robando y matando recorrían los pueblos
quemaban los templos, mataban los curas
a los campesinos y profesionales.

Con rifles sus vidas segaban, la sangre corría
los suelos regaban, los mártires caían
Gonzalo Hoffmaister, hermanos Chinchilla
Timoleón Herrera, Colacho Marín, el doctor Valverde,

Al fin vino el triunfo, las armas de fuego
la sangre vertida, allá en El Empalme
Limón, San Isidro, Cartago y Tejar
un doce y un trece de Abril del 48.

Un grupo de jóvenes en sacos de yute
sus cuerpos cubiertos, con frío y con sangre
con fuego y con plomo, henchidos de gloria
a esta Amada Patria le dio libertad.

HECTOR MIRANDA C.

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