Siempre que sucede igual pasa lo mismo…

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Carlos Revilla Maroto

Decía Tres Patines, aquél personaje de la Tremenda Corte interpretado por Leopoldo Fernández y que tantas veces nos hiciera reír con sus ocurrencias y frases de poca rigurosidad gramatical, pero de un humor privilegiado. Pero basta ya de esta introducción, lo que voy a hablar es muy serio, pero a lo que que le viene muy bien la frase de Tres Patines, me refiero a la Asamblea del Partido Liberación Nacional recién celebrada.

No es que pretendamos que los problemas del PLN se arreglen con una asamblea, pero por algún lado hay que empezar, y la realización de la primera después de la debacle electoral de febrero y abril daba una excelente oportunidad para iniciar con el proceso de cambio que se necesita. Si, lo he venido diciendo, el PLN como está no va para ningún lado, bueno tal vez si, pero al despeñadero…

La situación del partido es crítica y urge dar señales de cambio. Quizás quien mejor resumió la crisis partidaria es José María Figueres, quien en la asamblea dijo “Es momento para aprender el mensaje que nos envío Costa Rica en las pasadas elecciones, pedir disculpas, enmendar nuestros errores, recomponernos como partido, señalar el norte y volver a la carga…” A esto agregaría únicamente lo que ya he dicho otros veces, que también se debe recobrar la credibilidad.

También José María criticó que el partido está desligado de sectores que históricamente le han dado apoyo como el cooperativo, los agricultores, los trabajadores y la clase media. Esto es muy cierto, pero no basta con decirlo, esto es la parte sencilla. Recomponer esa relación es una tarea titánica. También cuestionó que el partido no tiene posiciones sobre temas claves, como el desarrollo de infraestructura y la generación de energía. Esto es cierto también, pero diay, no es que no quiera tenerlas, es que no lo dejan. Recuerdo para el Congreso Daniel Oduber Quirós en el 2005, yo fui promotor y me tocó ir a cuatro cantones del país, además de coordinar el sector norte de San José (Tibás, Guadalupe, Moravia y Coronado). Se nos pidió expresamente que sacáramos de las deliberaciones el tema del TLC y la reforma fiscal. ¿Entonces, cómo quieren que el PLN tenga posiciones si de entrada matan cualquier discusión en —como dice José María— los temas claves?

El ejemplo anterior fue en el 2005, cuando el PLN tenía dos períodos sin gobernar, ocho años de estar en la llanura, un tiempo enorme para quien esta acostumbrado al poder. Bueno, pues ahora es mucho peor, después del mismo período, pero de estar en el gobierno. ¿Por qué? Muy sencillo, hay que defender lo actuado, haya sido bueno o malo y lo mejor es continuar sin posición sobre temas claves, para no afectar al partido.

Por lo menos para mi, el tema importante de esta asamblea era la aprobación del Código de Ética, después de largos once años de dormir el sueño de los justos, si once años desde su presentación ante una asamblea y nueve desde su aprobación en un Congreso Nacional. El Código nos da la oportunidad de comenzar el largo proceso de la recuperación de la credibilidad. Por algún lado hay que empezar, y que mejor que con la ética, tema super cuestionado. Un primer paso en la dirección correcta.

Pero en la asamblea no se logró someter a votación el Código, ya —de nuevo como en el 2003— listo y revisado. En lugar de ser uno de los últimos puntos de la agenda, debió ser el primero, así de al revés tiene las prioridades el partido. Tampoco se pudieron ver ninguna de las mociones preparadas ex profeso por algunos asambleistas y grupos como la juventud, para encaminar el proceso de renovación. Eso si, hubo tiempo de sobra para los discursos… La presidencia (Bernal Jiménez) —parte del problema, no de la solución— mantuvo un control total de la asamblea para evitar la confrontación, especialmente en el tema del informe de la comisión de campaña, que es uno de los puntos más criticados.

Vuelvo con José María Figueres, que también dijo “Es mejor pasar la raya aquí y ver hacia el futuro. En estas condiciones, es imposible ganar una elección”. Esto es un poco contradictorio, ¿cómo nos recomponemos como partido pasando la raya? No se puede, hay irremediablemente que ver hacia el pasado para no cometer los mismos errores de siempre. El borrón y cuenta nueva no se vale.

Increíble, pareciera que el PLN no aprendió nada de la elección pasada. La gente no está viendo ningún cambio de actitud. Se sigue pensando en el corto plazo (la parte electoral) y el supuesto Congreso Nacional que se tiene programado hacer, volverá a guardarse en una gaveta con el del 2005. ¿Y cómo se esto? porque sin una una real voluntad de cambio y esto pasa —como ya dije— por recuperar la credibilidad, nada cambiará y entonces la mayoría de la gente seguirá dándonos la espalda y lo que nos espera es el despeñadero, o lo que es lo mismo, como dijo Tres Patines, siempre que sucede igual pasa lo mismo.