Quo Vadis PLN?

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Carlos Revilla M.

Uso la alocución latina recordando la de Quo Vadis, Domine? (¿Adónde vas, Señor?) que es la frase supuestamente dicha por San Pedro cuando estaba saliendo de Roma, ya que Dios lo había increpado por abandonar a su pueblo, ordenándole que regresara a la ciudad y cumpliera su destino. En base a este hecho, el escritor polaco Henryk Sienkiewicz, escribió la novela Quo Vadis?, que está ambientada en la época del emperador Nerón, durante las más encarnizadas persecuciones contra los cristianos.

La utilizo para hacer la pregunta de ¿Adonde vas PLN? referido, claro, al Partido Liberación Nacional por la gran encrucijada en que se encuentra después de la amarga derrota en la segunda ronda del 6 de abril, donde obtuvo un 22% de los votos, porcentaje inédito, llegando a ser la mayor derrota desde su fundación hace ya 62 años.

La derrota duele mucho, pero no dejemos de ver el bosque por ver solo el árbol. Los problemas no son solo de ahora y no se trata de gente o del candidato. Muchos han hablado de cambiar la dirigencia superior (Directorio Político y Comité Ejecutivo). Eso podría dar una buena señal, pero nada se arregla cambiando solo la dirigencia. El problema tampoco se arregla con un “Congreso ideológico”, como ya han dicho las autoridades que van a convocar; el hacerlo en nada cambiaría el panorama desolador que enfrenta Liberación.

El problema del PLN es estructural. Tenemos un partido del siglo pasado y la dirigencia no ha sabido interpretar el signo de los tiempos. Digo solo la dirigencia y no me incluyo, porque siendo inmodesto, ya desde el 2002 un grupo de militantes habíamos advertido de lo que nos pasaría si no se hacia nada. Se les dio el correctivo, pero efectivamente no hicieron nada. Ahí están guardadas -las ya en ese entonces- urgentes reformas, de esto hace doce años.

De las pasadas elecciones, y de antes también, aunque es más notorio ahora, hay varios reclamos muy importanes que le hacen los costarricenses al partido. Con esto no quiero obviar otros reclamos como el pésimo gobierno actual y otros parecidos, pero que escapan al alcance de esta columna que se centra en el PLN, aunque por supuesto, están relacionados.

Reclamos importantes:

Alejamiento de la ética. Pues desde el 2003 está la propuesta final del Código de Ética, pero -vaya uno a saber porqué- nunca lo aprobaron a pesar de la insistencia de algunos, entre los que me cuento. ¿Entonces? Dense cuenta que pésimas señales las que damos. Si el Código se hubiera aprobado, como dicen otro gallo cantaría; tendríamos herramientas para demostrar que si nos interesa el problema ético, pero no se hizo.

Alejamiento de la sociedad civil. Ahí está la propuesta de reforma estatutaria desde el 2005, donde se sugiere un cambio radical en la relación a los agentes externos (sociedad civil), pero después del Congreso las autoridades ni la volvieron a ver, dizque porque se acercaban las elecciones. Lo curioso es que ya van tres elecciones después de eso y nada de nada…

Las elecciones internas son un relajo. Que dan vergüenza por la cantidad de irregularidades que se dan (por cierto, motivo por el cuál renuncia el Presidente Electo Luis Guillermo Solís al PLN) nadie lo pone en duda. Pues se les dio la solución para empezar a arreglar el problema (entre otros separar los procesos), pero tampoco hicieron nada, perdón, no es cierto, claro que hicieron algo: premiaron a los miembros del TEI (Tribunal de Elecciones Internas) culpables en mucho del relajo, reeligiéndolos para otro período de cuatro años.

Y así podría seguir… la ceguera, tozudez y visión de corto plazo de la dirigencia ha sido mayúscula.

El entreguismo y genuflexión de la mayoría de los miembros de la plenaria ni se diga, priva más el amiguismo y el puestismo que el verdadero amor al partido. Por lo menos ahora se les acabó la P-21 (orden de empleo en el gobierno central), vamos a ver que hacen. Espero que cumplan con la historia y tengan valor para tomar las decisiones que hay que tomar, pero que serán en bien del partido y de Costa Rica, pues al final sigo creyendo que la socialdemocracia es lo único que ofrece una verdadera posibilidad de mejoría, pero respetando la dignidad hunana. Como ha retrocedido el PLN en tantos temas, ¡qué papelones y ridículos ha hecho!

Yo sabía que esto iba a suceder era cuestión de tiempo. Y si no se hace nada de nuevo, ahí si que sería el entierro del PLN. Estamos realmente en una encrucijada, por lo que la pregunta es muy actual Quo Vadis PLN? (¿adonde vas PLN?)